La efectividad era necesaria. Night City se hallaba a por lo menos unos 37 días a pie. No había forma de poder movilizarse así, así que V tuvo que gastar en el transporte mientras planeaba perfectamente sus pasos a seguir.
Estuvo en muchas bandas, con mucha gente. Contactos no le sobraban, pero los ideales no faltaban.
Sigue comiendo croquetas, recordando que todo lo que gastó de su restante dinero fue a eso. Su vista general va entorno a todo el autobús. Todos con vidas diferentes y a la vez tan iguales... Generalmente porque todos trataban de escapar de algo.
El viaje es jodidamente veloz. Está seguro que en menos de unas horas está allá... Y mientras el viaje sigue, sus pensamientos se sumergen en su nuevo futuro.
V tiene un plan para esto. Sabía a quién robar y cómo. Sumado a eso, qué clase de manos necesitaba para el trabajo.
No había forma de fallar. Todas las cartas estaban en sus manos ahora.
Su Sandervistan vibra, recordándole que está lista para usarse y que debe acostumbrarse a usarlo en el asalto. Con su poder, entrar y salir sin ser visto serían pan comido.
Pero lo que es impresionante de la vida es la facilidad de crear planes y que estos no vayan como deben ir...
La mirada perdida en la ventana se enfoca cuando nota que un vehículo se posiciona al lado del transporte y su impresión es justa cuando ve a un grupo preparándose para algo.
"¡AAAAH!" Grita una de las mujeres abordo, lo que hace que V se tire al suelo justo cuando supone lo que ocurre.
Disparos. Balas llueven de manera impresisa dentro del vehículo, reventando los cristales blindados, mientras V repara en su mente quienes son los responsables de este asalto y sus intereses, en un intento también de evitar concentrarse en las personas que estaban siendo asesinadas.
"¡MAMÁ ES AMOR! ¡MAMÁ ES VIDAAAA!" Exclama uno de los perpetradores a carcajadas mientras descarga su munición con imprecisión. V chasquea la lengua al reconocer que se trata de Cyberpsicópatas que eran más ruidosos que las propias balas.
"Lo que faltaba..." Murmura con molestia mientras su sistema operativo se inicia. "¡Ni tiempo tengo para vivir otra vez!"
El Sandervistan se activa. El tiempo se ralentiza y V rápidamente se dispone a evadir los disparos que lentamente se adentran al lugar mientras tumba al suelo a aquellos que se encontrasen vivos. Justo ante eso, el tiempo se normaliza mientras está sobre alguien y se prepara nuevamente.
"50% de ralentizado en 5 segundos." Reconoce mientras intenta recuperarse del enorme exceso físico que esto demandó. "1, 2, 3... Dios... ¡Ni siquiera puedo concentrarme con tantos disparos!"
En algún momento, su Sandervistan se reactiva. V no tarda y usa el sistema de sus piernas para arrojarse al vehículo mientras evade los disparos que se hallaban en su camino. En el camino, percibe 4 enemigos disparando y a uno conduciendo con una conducta errática.
"Ahora... ¡Un arma!"
Al caer al lado de uno de los tiradores, retiró su pistola de la cintura mientras se desliza hacia el asiento del pasajero, al lado del conductor.
"¡El pollito pío! ¡El pollito pío! ¡El pollito-! ¿Eh?" Canturrea el conductor cuando mira a su lado, donde V se halla recostado tras los efectos del sandervistan, apuntándole a la cara.
"Pío."
La cabeza del psicópata vuela en pedazos mientras el vehículo se dispone a descarrilar rápidamente por la funcionalidad del resto del cuerpo del criminal. Rápidamente lucha por sostener el control del mismo mientras ve como todo se va al carajo en un peñasco.
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Sandevistan Extremo.
Fanfic[ AU Regresión en el espacio y tiempo. ] [ OC! David Martínez (básicamente transporta su evolución en toda la historia hasta la mitad del capítulo 4) OC! V (también afectado por una regresión espacio y tiempo). ] Un enlace entre dos leyendas se arma...