Capitulo 1: Una Mala Noticia

507 3 2
                                    

-Julieta, ¿Estás atendiendo a la clase? -reprochó la profesora desde el pizarrón lleno de garabatos y números.

Julieta asintió con la cabeza. Miró a Daiana, soltaron a las carcajadas, y le hacían burla a las profesora cuando estaba de espalda. De repente, la profesora escucha una risa y mira enseguida hacía atrás. Las vió en el acto, y muy enojada, dijo:

 -¿Qué no saben que esto es un centro educativo, y que yo soy una persona mayor y además su docente? Por atrevidas, y para que no pase de nuevo, van a ir a hablar con la adscripta. ¡Ya!


Daiana y Julieta se levantaron de sus bancos, con la cabeza baja. Pero no por arrepentimiento, más bien, porque no querían que la profesora las viera reír.

Salieron del salón lo más rápido posible. Una vez lo suficientemente alejadas de la puerta, se sentaron en el piso y comenzaron a reír. Cuando paran, se miran a la cara, y se ven los ojos llorosos la una a la otra. Estaban tan ocupadas riéndose, que se olvidaron que estaban al lado de la adscripción. La adscrita sale enfadada y dice: -¡Señoritas, ¿dónde creen que están?! Para su información hay otras clases trabajando. ¡¿Y por qué no están en su salón?! Entren, ¡rápido!


Julieta y Daiana se dirigieron hacia la adscripción, calladas.

Una vez sentadas al frente de la adscrita, le explican todo. La adscrita les pone una observación y las manda a clase.

Cinco minutos después toca el timbre. Recogen sus mochilas y van juntas caminando hasta sus casas, ya que, vivían en la misma manzana.

Cuando Julieta llega a su casa, saluda a sus padres, va a su habitación y saca su celular de su bolso. Tenia 10 mensajes de sus amigos por lo que había sucedido. Los calmó y se puso a conversar con ellos por mensajes de texto. De repente, llaman a la puerta.

-¿Julieta? Soy mamá, ¿puedo pasar?

-Sí mamá, está abierto.

Su madre se sentó en el borde de la cama.

-Cariño, tengo una mala noticia. Verás... le han ofrecido una oferta de trabajo en Maldonado. Me temo que, tendremos que mudarnos allí por un largo tiempo.

-¡¿Qué?! -dijo Julieta sobresaltada, -¿Y no me consultaste? Yo no me voy de acá. Toda mi vida la he pasado en Salto y así va a seguir siendo.

-Julieta, no te estoy preguntando, te estoy ordenando, quieras o no, nos vamos el lunes. Fin de la discusión.

Su madre deja la habitación. Julieta se tira en su cama. Iba a perderlo todo, e iba a tener que empezar todo de nuevo. ¿Podrá Julieta, seguir adelante?



New LifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora