Tú y yo.

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Mark se encuentra sentado junto a la ventana entre un montón de almohadas y mira perdidamente el cielo lluvioso y gris.

Recordó la primera vez que beso sus labios, siempre formando una hermosa sonrisa y sus melodiosas carcajadas, su presencia deslumbrante y cegadora, lo hacia querer mantenerlo escondido para siempre, ponerle algo que gritara suyo y siempre mantenerlo a su lado.

Mientras se deslizaban algunas gotas por la ventana, recordó riendo como de manera osada le pidió que estuvieran juntos, que se hiciera cargo de sus sentimientos, murmurando que un noviazgo era exactamente lo que necesitaban para comenzar ese hermoso viaje que fue conocer a cada faceta de Donghyuck, escucharlo hablar de todo aquello que lo hacia feliz y pensar cada vez lo escuchaba que no existía otro tono de voz mas tranquilizador que el suyo.

Mark rio mientras se tapaba la boca por sus pensamientos distractores sobre Donghyuck, le encantaba recordar todos los bellos momentos que han compartido hasta ahora, recuerda claramente como fue el primer beso, eran jóvenes e inexpertos que pensaron que ese pequeño roce de labios los convertiría en adultos, recuerda la sonrisa brillante cuando se separaron y los brazos de Donghyuck rodearlo en un abrazo para acompasar sus desaforados latidos del corazón y sellar ese nuevo sentimiento de que estaba surgiendo, ponerle nombre.

No hay nada que le guste mas en el mundo a Mark que los abrazos de Dongyuck, como llega casualmente y lo rodea por los hombros con un ligero contacto haciéndolo sentir seguro, acompañado y amado.

Cada momento juntos esta atesorado en la mina de recuerdos que tiene almacenados en su memoria, todas esas tardes en su compañía, todas las citas no-citas, todos los besos robados, todas las charlas hasta entrada la madrugada, todas las horas de practica y los juegos cuando se supone que debían estudiar, todas las canciones que cantaron juntos, sus cumpleaños. Todos ellos hacen parte del patrimonio integral de sus recuerdos en común y hasta el dia de hoy Mark sigue viendo Donghyuck y no puede evitar sentir la revolución interna que se le genera en su corazón cuando le habla y hasta cuando no es nada atrevido o romántico, todos los apodos que le tiene Dongyuck a Mark aun tiene la capacidad de colocar una enorme sonrisa en su rostro y brindarle una tranquilizadora felicidad.

Cada vez que Mark mira a Donghyuck casi puede sentir las emociones escaparse de sus ojos a través de su mirada, Donghyuck significa el mundo para Mark y es que como no si han estado pegados como stickers el uno al otro por tantos años que la ausencia se siente extremadamente pesada y palpable, la ausencia se hace indescriptible para Mark cuando prácticamente respiran en la nuca del otro, cuando a pesar de lo opuestos que son están tan sincronizados que parecen una sola persona dividida en 2, porque ningún detalle del contrario se le escapa. Están el uno para el otro, en silencio como apoyo cuando no pueden hacer mas que entregarse en los brazos del otro en un abrazo amistoso para los ojos del resto.

A veces la sola vista de Donghyuck a los ojos de Mark hacían que quisiera presionar muchos besos en su gomosa sonrisa para ver sus ojitos brillar un poco mas que de costumbre y que se convierta en una masita adorable y sonrojada que solo pide abrazos y largas siestas, cuando le pide con su eterna ternura que le cante algo o rapee lo mismo de siempre porque le encanta escucharlo una y otra vez, cuando Hyuck se convierte en casi un bebe consentido por la atención de Mark, en cada uno de esos momento Mark siempre recuerda que están juntos en esto.

Mark no puede evitar sonreír como tonto cada vez que piensa en Donghyuck junto a la silenciosa lluvia que cae en la ciudad, mientras desea que aparezca y le diga...

- Hyung... - se escucha luego de un crujido proveniente de la puerta ahora abierta - Hyuuuung! Hyuuuung! - siguió insistiendo Donghcyuk cuando vio que Mark ni siquiera se movió.

- Mmm... - respondió Mark algo atontado intentando conectar su mente a la realidad mientras su cerebro intentaba recoger todo el patrimonio de recuerdos que comenzó a revisar mientras admiraba la lluvia

- Mooork - se escucha ahora más cerca y Mark comienza a dudar si realmente se ha vuelto loco como para imaginar con gran claridad el escuchar la voz de Donghyuck,  parpadeo sorprendido porque sonaba demasiado cerca como para ser una jugarreta de su cerebro, de nuevo.

- ¿Que? - responde Mark mortificado con el pensamiento de que estaba tan ensimismado en sus recuerdos que pensó estar imaginándose a Hyuck, cuando el menor realmente estaba ahi, se levanto mientras cerraba las cortinas  y se dirigía a la cama para volver a dormir un rato mas, era su dia libre después de todo.

Escucho la puerta cerrarse y pasos que se van acercando a la cama, Mark cierra los ojos con fuerza y suspira, debía lucir como un tonto, la fuerza de sus pensamientos parece como si hubieran traído a Donghyuck hasta su habitación, se lamento en silencio, hoy era uno de esos pocos dias libres que tenían y debían aprovecharlo para dormir lo suficiente y descansar como era debido. Mientras seguía lamentándose sintió unos brazos rodearlo con calidez y unos pequeños húmedos besos bañar su nuca.

- Melt, aun sigues dormido? - susurro Dongyuck en su oído - Vamos a desayunar, hyung -  volvió a susurrar mientras afianzaba el abrazo y acariciaba su espalda con su mejilla.

Mark suspiro encantado, Donghyuck realmente estaba allí abrazándolo, se giro entre sus brazos y lo apreto fuerte contra su pecho, se embriago con su delicioso aroma y dejo pequeños besitos en su cabellera.

- Quédate así un momento más, por favor - respondió Mark mientras sentía unas cálidas manos adentrarse bajo su camiseta y acariciar su espalda.

- Aun sigues somnoliento hyung, por eso vamos a quedarnos solo 5 minutos mas porque tengo hambre - respondió Donghyuck escondiendo una sonrisa en la curvatura del cuello contrario.

Mark lo abrazo un poco mas fuerte, cerro los ojos y aspiro su aroma pensando en lo afortunado que era de tener a Donghyuck.

- Te amo - susurro Mark dejando pequeños besos en la frente contraria.

- Te amo más - respondió Donghyuck mientras apretaba mas al garre de sus brazos y entrelazaba sus piernas con las contrarias y la calidez les nublaba la mente adormeciéndolos poco a poco, dejando al cansancio tomar el control. 

Estaban tan entrelazados que no sabían donde empezaba Mark y donde terminaba Donghyuck, eran la definición perfecta del tu y yo, esta seria la descripción física de que nos complementamos el uno al otro.

Love. Markhyuck (OS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora