23. ¿Qué paso ayer?

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Todos en el jardín mirándonos los unos a los otros, Cris con un ojo morado, Gabriel con el labio roto, Austin con los nudillos rojos y sangrados, Alex con sus lentes de sol sin un cristal y con un cachete que parecía de ardilla, y Decker con una bolsa de hielo en la cabeza, ¿en que momento paso todo eso?, solo dios sabe porque ninguna de las chicas y mucho menos ellos los chicos dábamos razón de ello.

Llevaba los lentes negros Ray-Ban de Austin y el llevaba los de Elvis.

-¡FONDO!

-¡FONDO!

-¡FONDO!

-¡SI!-gritamos.

Los flashbacks de la noche golpeaban en mi mente, pero estos venían acompañados de un horrible dolor de cabeza. Y se hizo un click y me busque por todos lados mi anillo.

-Tranquila, yo lo tengo-habló Decker dándomelo.

El tan solo asentir era una tortura pues sentía como mi cerebro se movía.

Fueron como veinte minutos de solo estarnos viendo, sin decir una sola palabra; recargue mi cabeza en el hombro de Austin, entrelazamos las manos, -¿tienes calor, amor?-pregunto acariciando mi cabello.

Negué con la cabeza.

-¡Muy bien!-una Karen radiante, sin cruda, y con unos caballitos en un plato cruzo la puerta de vidrio,-¿Quién será el primero?

-Pelirroja, ¿Qué es eso?

Karen mostro una perfecta sonrisa arrogante, -Esto mis queridos, es un vuelve a la vida-levanto uno de los pequeños vasitos. -Y créanme que esto les va a quitar esa carita de muerto viviente que se cargan.

-¿y es seguro?-pregunte bajándome un poco los lentes, -porque puedo jurar que esa cosa hasta burbujea.

-Créanme que esto les va a asentar el estómago, aunque en el peor de los casos quizás los mande al baño-respondió sin importancia.

Ninguno quería ni siquiera acercarse a los pequeños vasitos que había sobre la mesa.

-¡Rápido! que si esto sigue en el sol ya no va a servir, y lo tendré que volver hacer-volteo los ojos, -entonces, ¿Quién va primero?

Cris golpeo la mesa con sus palmas y se levantó acompañado de Gabriel para ir a donde estaba Karen, -Ok-les entrego los vasitos, -es como un shot, tiene que ser rápido porque si lo retienen les va a dar asco.

Gabriel abrió de golpe los ojos y dejo el vasito en la mesa dando dos pasos atrás.

-A la cuenta de tres-habló Karen amarrándose su cabello.

No puedo ni empezar a contar cuando Cris se lo acerco a los labios y sin respirar se tomo el contenido, hasta me quite los lentes para ver bien la cara que iba hacer mi amigo. -No lo retengas-puso su mano en su hombro. A duras penas paso por su garganta, soltó el aire y como si el color hubiera vuelto a su rostro se empezaba a ver más recuperado, o al menos eso pensamos hasta que de repente sus cachetes se inflaron como el de ardillas, -¡vete al baño!-le dijo Karen señalando el pasillo, todos nos levantamos para ver que iba a pasar, pero el wey no alcanzo a llevar al baño y vomito en la tarja del fregadero.

Cris regreso con una cara un tanto pálida, -creo que hasta volviste tu primera papilla-hablé atacada de la risa.

-¡Cállate!-sacudió mi cabeza. -¡Karen dale uno!

-Te odio-lo señale.

Karen dio la vuelta a la mesa con un vasito ya listo para dármelo, aprete los labios y aprete el hombro de Austin para que no me dejara tomar eso, -amor, ayúdame-dije rápidamente mientras me estaban acercando el vasito, Cris me abrazo por detrás para que me quedara quieta.

Mi novio es el ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora