Una Bala Directo al Corazón - Camren

Capitulo XXV

Se habían escuchado todas las declaraciones de los padres de Austin, de los Cabello y alguno que otro cómplice de la organización, el único que faltaba por hablar era Austin Mahone, Camila tenía una extraña sensación dentro de sí, sabía que muchas cosas saldrían a la luz, cosas que solo ellos sabían.

-Señor Mahone, ¿es verdad que la señora Camila Cabello contrajo matrimonio con usted bajo coacción? - le preguntó el fiscal.

Austin posó sus verdes ojos en Camila directamente, la chica se tensó, esperando la negación de este sobre el asunto.

-Es verdad, yo la amenace que si no se casaba conmigo yo iba a delatar a su padre - confesó.

Camila abrió sus ojos con asombro, no podía creer que la verdad estuviera saliendo de los labios de aquel hombre que tanto daño me había hecho; mientras que en el otro extremo de la sala, Lauren observaba con atención el intercambio de miradas de los dos esposos, sintiendo un nudo en su interior, no podía descifrar qué era lo que estaba pasando y se negaba a creer que Camila en todo ese tiempo allá desarrollado algún tipo de afecto por ese chico.

-Señor Mahone, ¿estaba su esposa al tanto de sus negocios ilícitos antes de contraer matrimonio?

-Antes de contraer matrimonio no, luego se lo dije y la mantuve a mi lado bajo amenazas y así evitando que me delatara.

-Señor Mahone, hay rumores de que usted es el actor intelectual del accidente de la inspectora Lauren Jauregui, ¿lo niega?

Aquella pregunta cayó como balde de agua en los que conocían la verdadera historia, Lauren jamás pensó que esa información ya se regara por todos lados, no lo esperaba y por eso sus manos comenzaron a sudar y temblar, Dinah le tomó la mano con delicadeza al notar la incomodidad de su amiga, por otro lado Camila no pudo evitar posar sus ojos en la inspectora, quien miraba fijamente hacia donde estaba Austin, el cual le devolvía aquel gesto pero con una sonrisa maliciosa.

-Le tenía que cobrar de algún modo que se estuviera follando a mi mujer -dijo con una sonrisa burlona.

Se escucharon sonidos de asombro por parte de los espectadores, los padres de Camila giraron sus rostros rápidamente hacia ella con terror, Lauren apretó sus puños tratando de tranquilizarse, mientras que Camila cerraba los ojos con vergüenza.

-¿Tenía usted pruebas de eso?

-Claro, mi mujer se escapa muchas veces en las noches y cuando me decía que iba a tomar café con sus amigas, todo era mentira, iba a meterse en la cama con la inspectora.

-¿Estaba usted enamorado de Camila Cabello?

-Como un cabron, pero ella amaba a otra - sentenció.

Camila no podía creer que aquello estuviera pasando, esas muestras de amabilidad por parte de Austin eran toda una farsa, el chico la había humillado delante de todos. Por otra parte al terminal el juicio Lauren llamo a su persona de confianza y les exigió explicaciones de lo sucedido, como era que la fiscalía tenía esa información de ella y Camila, pero parecía ser que alguien ajeno a ella había abierto la boca.

Mientras seguía con furia buscándole una explicación a lo sucedido pudo notar como Camila salía de la sala en compañía de Ally, por lo que vio la oportunidad perfecta para salir tras de ella.

-¡Camila! - le llamo, corriendo detrás de ella, alcanzándola antes de que entrara a su auto.

La Cabello se detuvo con una mirada de molestia hacia ella, tenía unos lentes oscuros puestos y se los quitó para darle la cara.

-¿En que puñetero idioma tengo que decirte que no quiero hablar contigo?

-Por favor, tenemos que hablar, no me has dado la oportunidad de explicarte.

-¿Explicarme que?, qué te fuiste un año entero y me dejaste aquí sola, me dejaste con ese animal que no sabes cuantas cosas me hizo, te fuiste sin importarte una mierda lo que pasara conmigo -le dijo, con una mirada llena de dolor y de rabia.

-Eso no es así, no me fui porque quise, tuve que hacerlo y no te dejé desprotegida, Fernando estuvo cuidándote todo el tiempo.

-Fernando no podía entrar en las noches a la habitación cuando Austin llegaba borrachos y me hacía lo que le daba la gana.

Las lágrimas de Camila corrieron como cataratas sobre sus mejillas, al mirarla de esa forma, Lauren se quedó sin argumentos, entendió que el alma de Camila estaba rota y tenía un rencor que difícilmente se iría, sentía que no podía perdonarse, ella tenía razón, la dejo, la abandono y ahora no merecía su perdón.

Se introdujo rápidamente en su auto y encendió, no sin antes darle una última mirada de dolor a la inspectora.

-Deberías darle una oportunidad de que te cuente cómo pasó todo - le dijo Ally.

-Esta todo claro Ally, vio la oportunidad de conseguir que la subieran de puesto a costa de mi desgracia, hasta regó nuestra historia, porque dudo que Austin lo haya hecho por su orgullo de macho.

-No lo creo Mila, hasta estuvo al borde de la muerte por meterse en esto.

-Ya no se si eso es verdad - sentenció.

Al llegar a casa Camila sintió un silencio extraño, siempre se escuchaba la voz de Sofía cantando en su karaoke, jugando por toda la casa o con el tv al máximo volumen con las caricaturas, pero nada de eso se sentía, por lo que recorrió el lugar y cuando llegó a la sala de estar se encontró con una tierna imagen, Rebeka y los niños dormidos plácidamente en el mueble, sintió pena por la chica, pues la noche anterior había tenido guardia y aún así, insistió en quedar a cuidar a los niños, Camila soltó un suspiro y se acercó a ella tomando al pequeño Stiff, la doctora al sentir aquello se despertó de golpe.

-Mila, has vuelto - le dijo, casi en un susurro.

-Ve a dormir, ya yo me encargo.

-¿Segura?, puedo ayudarte en lo que necesites si quieres - le dijo antes de colocarse la mano en la boca para tapar un bostezo.

-Segura, ve y Rebe, muchas gracias por todo.

La chica le regaló una sonrisa antes de subir a su habitación, Camila le colocó la manta a Sofía quien seguía durmiendo y llevo al pequeño Stiff a su cuarto en donde lo acostó en su cuna y salió en dirección a su habitación, de camino pasó en frente de la puerta de la habitación de Rebeka la cual estaba un poco abierta y escucho sin querer unas palabras que la dejaron sin habla.

-Cada día se me hace más difícil hermana, siento que la amo, es la mujer más extraordinaria del mundo, cuando daría porque me mirara con los ojos con los que ve a ella, sería capaz de todo por hacerla feliz.

Camila camino rápidamente antes de que la descubriera escuchando aquella conversación privada, luego de ese día no dejó de pensar y preguntarse, ¿quien era esa mujer que había robado el corazón de Beka?.