Hacía muchísimo tiempo que Jimin no veía a sus tíos paternos, pues ellos se habían mudado a Seúl cuando él era bastante joven, y verse seguido se les dificultaba. Tanto, que Jimin no supo mucho de aquella familia por unos diez años, aunque siempre tuvo una buena relación con ellos. Fue por eso mismo que un día el joven se animó a pedirles el mayor favor de su vida: que le dieran alojamiento en su casa en Seúl para que él pudiera estudiar lo que realmente quería, lejos de Busan y sin la preocupación de tener que rentar en algún lugar demasiado caro por su cuenta.
Sus tíos aceptaron; no tenían ningún problema en ayudar a un miembro de la familia, aunque este no los hubiera visto en años. Así que, luego de mucha organización y tiempo, Jimin finalmente fue bien recibido en casa de sus tíos, donde también vivían sus dos primos mayores y un adorable gatito atigrado.
Todo fue bien desde el principio, sus tíos eran demasiado amables y sus primos (Taehyung y Seokjin) lo hicieron sentirse integrado de inmediato, poniéndose a recordar con él los momentos que pasaban juntos cuando eran niños y salían a jugar al jardín en casa de su abuela. Jimin rápidamente recuperó la confianza que se había oxidado ligeramente con el tiempo, y pensó que no podría haber llegado a un lugar mejor en Seúl.
Sus tíos le cedieron la habitación de invitados completamente para él, la cual podía decorar a su antojo y hacer lo que quisiera con ella. La primera noche, sin embargo, Jimin no durmió ahí, pues se la pasó toda la noche hablando sin parar con Taehyung en su cuarto, que estaba justo al lado del suyo. Seokjin se fue a dormir temprano y ellos dos se quedaron hablando y recordando el pasado, dándose cuenta de lo mucho que se extrañaban mutuamente casi de forma inconsciente.
Taehyung era el más próximo a su edad que Seokjin (Tae solo le llevaba algunos meses), por lo que inevitablemente estos dos siempre fueron más unidos. Se quedaron hablando casi hasta el amanecer, y los dos ni siquiera se dieron cuenta del momento en el que se quedaron dormidos en la cama de Taehyung. No había sido un problema, por supuesto. Puede que no se hubieran visto en años, pero la confianza que se tenían desde pequeños no había cambiado mucho.
Algunas noches después, en fin de semana, Jimin volvió al cuarto de Taehyung por la noche, repitiendo lo de hablar por horas hasta quedarse dormidos. A ambos les gustaba mucho la compañía, por lo que no les molestaba en absoluto hacer eso más seguido. De hecho, llegó un punto (varias semanas después) donde Jimin ya ni siquiera dormía en su propia cama, sino en la de Taehyung. Los dos ya estaban más que acostumbrados a la cercanía del otro, y no lo sentían invasivo para nada. Incluso, lo preferían. A los dos siempre les gustó más dormir acompañados, solo que antes no tenían con quién. Era lindo saber que podían complementarse de esa forma luego de tanto tiempo.
No pasó nada fuera de lo usual por varias semanas, hasta que una noche Jimin sintió algo... diferente. Lo despertó una mano firme sobre su cintura, y una extraña presión sobre su trasero. Abrió los ojos desorientado, sintiendo más claramente cómo su primo frotaba su erección contra sus nalgas.
"¿Tae, qué...?" susurró, muy bajito.
Escuchó a Taehyung soltar un gemido casi inaudible, que sin querer, provocó cosas en Jimin. Y que de hecho, también le hizo darse cuenta de algo.
Taehyung no estaba despierto.
"¿TaeTae?" volvió a intentar, pero una vez más no hubo respuesta. Su respiración acompasada le confirmaba que estaba dormido, pero eso no impedía que siguiera frotándose contra él inconscientemente, aún sosteniendo su esbelta cintura y soltando suaves gemidos en su oído. Debía estar soñando algo sexual y usaba el cuerpo de Jimin para aliviarse.
El joven empezó a sentirse demasiado mal cuando su propio miembro empezó a endurecerse, sintiendo la dura polla de su primo empujar contra su culo. Inclinó ligeramente el cuerpo para exponer un poco más sus nalgas, intentando sentir todavía más a su primo, necesitando sentir su polla rozarse más fuerte contra la tela de su pijama, que Jimin deseaba que pudiera desvanecerse en ese momento para poder sentir la longitud de Taehyung sobre su piel desnuda y sin barreras.
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don't talk about it ✧ vm
FanfictionSin duda, lo que más le gustaba a Jimin de dormir con su primo Taehyung, era sentir su dura polla contra su trasero todas las noches. ♡vmin (th!top, bttm!jm) ♡incxsto ♡somnofilia ♡+18 ♡os (2.2k)