The Legend Of Pagod

-Prólogo-

"Cuenta la leyenda que hace miles de años existió un pequeño planeta llamado Pagod, en el que sus habitantes, los Pagodes, entrenaban desde pequeños para conventirse en fuertes guerreros, y derrotar a los monstruos que ocasionaban continuamente terribles ataques en Pagod. Hasta ahora ninguna raza de monstruos había conseguido derrotar a los Pagodes... Pero un día llegaron a Pagod una terrible raza de terroríficos monstruos espaciales; los Schumai.
Los Schumai, que poseían una fuerza descomunal, no tardaron en arrasar Pagod y en acabar con casi todos sus habitantes.
Los pocos Pagodes que quedaban eran sometidos y esclavizados por los Schumai, y cuando se volvían inservibles se les mataba sin piedad.
Pero de entre los esclavizados supervivientes, un joven Pagode llamado Peear consiguió robar una nave de los Schumai y huir de Pagod junto a sus compañeros; Anaís, Raspher y Pinpale.
Estuvieron tres años entrenando en un lejano planeta, Épsilon, y volvieron a Pagod convertidos en unos guerreros formidables.

Desafiaron a los Schumai, y tras una dura batalla en la que los monstruos acabaron con las vidas de Raspher y Pinpale, Pagod fue liberado, y la paz regresó al planeta...

Esta leyenda ha sido transmitida durante siglos de abuelos a padres, de padres a hijos, de Pagodes a Pagodes.
Pero... ¿Qué sucedió después?

Tras la batalla de los Schumai, aquellos que se dice vagan por el espacio en busca de planetas que destruir, contra Peear y sus valientes guerreros, los demás Pagodes, convencidos de que ya no podría haber mayor peligro que el de aquella batalla, dejaron de adiestrarse, y poco a poco se convirtieron en unos seres tranquilos, inofensivos y sin dotes para la lucha.

Los Pagodes convirtieron la catastrófica batalla de los Schumai en una leyenda que se transmitió durante algún tiempo, hasta que las leyendas también desaparecieron.

Pero no todos los guerreros desaparecieron; a lo largo de los milenios, tan solo tres linajes de tres familias diferentes siguieron entrenándose.

Actualmente, solo quedan seis guerreros Pagodes en Pagod; Aftern Fighspirit, el guerrero más poderoso de todos, y sus hijos, Orange y Datel Fighspirit; Figs Painfuldeth, la única guerrera femenina, cuyos padres fueron asesinados cuando ella tenía tan solo dos años; Mist Soulwarrior, el guerrero más fiero de los seis; y finalmente, su hijo; Cranber Soulwarrior; es decir, yo.

Como para el resto del planeta el entrenamiento para ser guerreros es cosa de leyendas, nosotros debíamos formarnos en una base escondida a las afueras de Pad, mi ciudad, y combatíamos a los pequeños grupos invasores que acechaban nuestro planeta con el objetivo de que ningún otro habitante del planeta se percatara.

Hasta ahora todo había ido bien...
Pero llegó el día 4 de Julio del 4783; hace 20 años...