Kate Spiering entrará a su primer año en Hogwarts. La sorpresa de que es una Slytherin cambiará un poco las cosas, tendrá que adaptarse. En el transcurso del año, conoce gente nueva, enfrenta problemas, descubre y se la pasa genial con su mejor amig...
- Ah - se quejaba Nattie, mi prima, mientras subíamos las escaleras para ir a mi habitación -. ¡Cuanto nos hiciste sufrir hoy, Katherin! Hasta me duele la espalda.
- ¡Y a mi me duele la cabeza! - le siguió Tamara, otra prima - tuve que soportar esa música escandalosa que escuchas.
Contexto: Hoy 25 de Diciembre, era mi cumpleaños. Y en pocas palabras... Hice sufrir a todos en casa haciendo lo que se me venía en gana con la excusa de que era mi cumpleaños. Jeje, que puedo decir, soy malvada.
Entré en el cuarto, que estaba totalmente a oscuras. Nattie encendió la luz y se llenó de claridad. Además de mi cama habían dos colchones más en el suelo.
Por el 24 de Diciembre, navidad, y el 31 Diciembre, año nuevo, la mayoría de mi familia había venido de visita a Londres, entonces a algunos los hospedamos en nuestra casa, por esa razón Natalia y Tamara dormían conmigo.
Estaba agotada (JA, por lo mucho que hiciste). Me acerqué a mi camita e iba a tirarme en ella pero vi un pequeño papel doblado en ella.
Con curiosidad lo tomé y lo desdoblé. Y lo único que decía era:
Feliz Cumpleaños.
ATT: Barbie.
S
onreí como una tonta.
- Uyyy.
Me sobresalté y traté de esconder el papelito.
- ¿De quién es? - dijo Tamara con una sonrisa cómplice.
- Emm... No es... es... solo es un... ¡¡Heyy!!
Natalia me arrebató el papel por detrás.
- ¿Quién es Barbie? - preguntó evadiendo mi intento de quitarselo.
- ¿Barbie no es la muñeca esa de los Muggles? - dijo Tamara.
- Ayy noo, que terror que te escriba una muñeca - continuó Natalia.
- !!No me escribió una muñeca, solo es un amigo!!! - susurré.
- Con que un amigo... - dijo Tamara.
- Sospechoso... - dijo Natalia.
- Muy sospechoso - dijeron ambas al unísono.
- ¿Saben que se vuelven insoportables cuando están juntas? - dije exasperada.
Ellas se miraron y se rieron.
Luego de un largo rato donde mis primas empezaron a hablar sobre mi "amigo" y yo, y donde logré quitarles el papelito(que lo guardé en el libro más cercano que encontré) nos acostamos a dormir. ¡¡Por fin!! Paz, el momento que más espero cada día para pensar.
Draco me había hablado por primera vez en mucho tiempo, en un papel y con un simple "feliz cumpleaños". Pero se acordó...
Y aunque fuera algo tan simple, significó mucho.
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