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El enfermero revisa los papales para verificar que pastilla le toca tomar al rubio, cuando ya tiene todo listo se acerca al rubio y nota que este respira agitado, se acerca más y ve esos labios resecos y sudor en la frente

—otra vez fiebre— deja las pastillas a un lado y busca otras para bajarle la fiebre a Jimin, su rostro es de verdadera preocupación y por eso se queda por un rato más —desde hace 8 años que te conozco y aún sigues en esto, mientras tu esperas vivir hay otros que nisiquiera quieren vivir... creo que la vida es injusta con ángeles como tu— Seokjin se da la vuelta y ve al doctor de hoyuelos parado a un lado de la puerta

—te ves lindo cuidando de Jimin—

—doctor Kim estamos en horas de trabajo— le dice Seokjin y vuelve su mirada a Jimin —¿cómo no amar a este ángel?, desde muy pequeño tiene ganas de vivir y ve la esperanza aun cuando a veces los demás la queremos perder... personas como él no merecen estar enfermo—

—así es la vida, no te queda nada más que seguir y hacer uso de lo que sabes para cuidarlo esperando que un día salga por la puerta sano... es horrible cuando alguien muy cercano muere y sé que te afectaría mucho si algo le sucede—

—desde la primera vez que vino con sus padres me enamoré de su forma de ser, nunca había conocido un pequeñín como él, en todos estos años me ha enseñado muchas cosas... y no sé que tengo, pero desde ayer me siento intranquilo... lo ví hablando con el paciente que no quiere hacerse el tratamiento—

—Jeon Jungkook, ¿hablas de él?—

—si, ese niño es todo un problema, es una gran oportunidad y la quiere desperdiciar, si no quiere vivir debería dejarle su sitio a otra persona que si quiere— dice Seokjin mientras le quita el sudor de la frente a Jimin

—olvide decirte que Jungkook es hijo de mi hermana, su padre se apellida Jeon, es por eso que no tenemos el mismo apellido... mi hermana me pidió que covenza a Jungkook de hacerse el tratamiento— Seokjin mira de reojo al doctor

—pareces no mentir Namjoon, pero el hecho de que sea tu sobrino no hace que quiera de dejar de tener mis propias opiniones sobre su persona, nisiquiera se parece en nada a ti y no tiene tu madurez—

—tienes razón, pero si él no se quiere hacer el tratamiento tendrá sus razones, un día de estos que este desocupado intentaré persuadirlo—

—intent— Seokjin deja de hablar porque en ese momento siente algo en su pecho vibrar y sale apresurado a la receptor notando que hay una emergencia en la habitación 709. Seokjin ingresa a la habitación y ve a Taehyung alzando sus manos

—cof cof, lo siento, es que estaba comiendo una mandarina y me atoré con una pepa— sonríe apenado y Seokjin lo mira severamente

—casi se me sale el alma del cuerpo Taehyung, ten cuidado con todo lo que te metes a la boca  y deja de comer eso porque ya es de noche y ya no puedes comer— Seokjin decomisa la mandarina y deja a Taehyung en su habitación

—¿esta bien?— pregunta Namjoon

—ya es hora de irme doctor Kim— hace una sonrisa ladina y se muerde sutilmente los labios











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Jimin abre los ojos y se limpia el sudor que tiene en la frente, se talla los ojos cierra la administrador de suero y también cierra la intravenosa que esta en su mano para evitar que salga sangre. Como todas las mañanas limpia toda su habitación, la ordena a su manera y toda todas sus pastillas

—buenos días—

—Jinie hyung—

—¿cómo te sientes?—

—mucho mejor, estos días me estoy sintiendo mejor... solo que a veces extraño el salir afuera—

—sabes que estas en tratamiento otra vez, te prometo que si te mejoras yo mismo le pido a doctor Kim para que salgamos y así podrás disfrutar de todas las plantas que amas en completa libertad—

—por la garrita— alza su meñique y Seokjin entrelaza su meñique con el de Jimin

—y tu prométeme que siempre vas a tener ese espíritu de lucha y vas a cumplir lo que se te pide para que te recuperes—

—sí hyung, y cuando salgamos prepara tu billetera porque voy a pedir mucho—

—pequeño glotón— pica la nariz de Jimin

—deja de decirme pequeño hyung, soy un chico de 17 años—

—esta bien gran chico, voy a atender a mis demás pacientes— Jimin se pone su mascarilla y camina por el pasillo hasta que escucha una voz que lo deja pensando hasta que recuerda de quién se trata y al mirar en la dirección de donde venía la voz comprueba que se trata de ese rebelde

—¡ya dije que no lo haré!— sale rápido de la habitación y Jimin lo sigue detrás furioso —deja de seguirme— dice el pelinegro

—¡¿qué crees que haces?!— Jimin intenta detener a Jungkook pero este se suelta del agarre y Jimin cae al suelo lastimándose las manos y su pierna

—¡¿pero qué....— Jungkook vuelve hacia atrás e intenta ayudar a levantarse a Jimin, aunque Jimin tenía orgullo e intentó levantarse por si mismo... ya después tuvo que tomar la mano de aquel pelinegro que tenía una sonrisa de completa suficiencia en el rostro —no te metas en mis cosas— le dice Jungkook ayudando a Jimin a sentarse

—¿por qué no haces tu tratamiento?, ¿crees que te ves genial desafiando la vida?—

—já— alza los hombros y Jimin se pone rojo, ganas no le faltan de golpear a ese pelinegro —¿de verdad crees que desafió la vida?, eso no es más que una mentira que nos dicen los doctores, el hacer esos tratamientos simplemente es atrasar nuestras muertes, ni siquiera respiramos nuestros propio aire, andamos respirando un aire prestado porque no podemos respirar por nosotros mismos. Hacer el tratamiento puede ser doloroso y solo me garantiza poco tiempo de vida, prefiero vivir por mi mismo y lo haría feliz... aunque si me dijeras los supuestos "buenos argumentos" por los cuales piensas que debería de hacer mi tratamiento puede que me convenzas de hacerlo— Jimin hace un puchero y antes de irse pisa el pie de Jungkook y este último grita







ESTA DISTANCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora