~Capítulo°2~

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Ok, ok. Un momento, como rayos supo este chico que estaba aquí, y en segunda, jamás habíamos intercambiado palabras, como sabía mi apellido. En serio que me sorprendió su aparición y a quién no le sorprendería que alguien que no conoces te hable así como si nada, desde aquel día solo intercambiamos miradas y aún así es algo raro que sepa de mi.

—y tú quién eres?— vaya pregunta más tonta, era obvio que sabía quién era.

—no me recuerdas?— dijo con una risita burlona— ayer en la cafetería estabas muy embobada con mi amigo, no es así Bradley? O ya lo olvidaste?— perfecto, me lo restregaba en la cara, al parecer gozaba al avergonzarme, y créanme que lo estaba haciendo— me llamo Jed— seguía con su estúpida risita bufona. Si que era odioso verlo así.

—Ah, ya me acuerdo de ti. Y gracias por recordármelo, Jed— escupí con ironía.

—De nada.

Le di una mirada de pocos amigos y me giré sobre mis pies para irme. Créanme no soportaba más la humillación de haber sido pillada por el y que me lo restriegue mucho menos, tenía curiosidad de preguntarle como sabía mi apellido pero no quería seguir hablando con ese tonto.

—A donde vas Bradley? No hemos terminado de hablar— Ahora este tal Jed tenía que saber a donde iba?.

Solamente seguí caminando, pero al parecer no se rendía. Estaba siguiendome?.

—Por qué me sigues?— me detuve abructamente.

—No te estoy siguiendo, solo estoy caminando.

—Si como no. Dime que quieres— crucé los brazos sobre mi pecho y esperé su respuesta.

—Te quiero a ti.

Mis ojos se abrieron como platos, acaso había escuchado bien?. Este chico que practicamente acabo de conocer hace solo unos minutos se me confesó o es solo idea mía?!!!.

—!¿que?!—di un leve grito por su declaración.

—sorprendida Emily Bradley?— y ahí iba con su típica sonrisa burlona —Quiero que tú y yo hagamos un trato— su voz cambió totalmente, ahora sus facciones eran serias al igual que su voz que antes era bulliciosa.

Esto ya indicaba que no era una confesión amorosa como yo pensaba, si no que una petición.

—y porqué haría un trato contigo?— mi ceja se arqueó.

—porque se que Lowell es un hijo de puta y aún así quieres estar con él, y yo puedo ayudarte a cumplir tu pequeño sueño.

Mi corazón se detuvo cuando pronunció su nombre. Estaba tan sorprendida por su propuesta,era totalmente impactante. La pregunta es, en que se beneficiaría él en todo esto?.

—y que ganarías tú ayudándome a estar con él?.

Vi como sonrió, pero no de una manera alegre o amistosa, si no una que indicaba que lo que iba a decir no sería nada bueno.

—quiero que tú lo hagas sufrir. Quiero que lo enamores y después lo corrompas.

No sabía que decir, mi boca estaba ligeramente abierta por la impactante sorpresa que me acababa de llevar y mis ojos más abiertos no podían estar.

Se suponía que el era amigo de Stewart, no?. Porqué razón quería hacerle daño?, algo de seguro había sucedido entre el y el pelinegro, pero no me atrevía a preguntar. Y además como carajo haría que Stewart se anamorase de alguien como yo.

—lo siento... Yo no puedo hacer esto.

Así es, yo Emily Bradley, estaba rechazando la propuesta más tentadora en toda mi vida. Me gustaba el echo de que pagara por todas las veces que me hizo sufrir cada vez que se acostaba con todas esas baratas. Pero no puedo, no tengo el valor para esto, soy tan cobarde como para hacerle eso.

Éxtasis & DolorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora