𝑺𝑬𝑽𝑬𝑵𝑻𝑬𝑬𝑵 [One Shots]

🎃 HALLOWEEN: ZOMBIES AU🎃

Akemi suspiró agotada, si hubiese sabido que le tocaría huir de sus mismos compañeros de clases tal vez no lo habría puesto en duda pero de verdad no se lo habría esperado.

Y menos tan pronto.

Miró al suelo, Sieun estaba tirada en el piso intentando recuperar el aliento y luego miró a su lado para ver a Minju murmurando quejas acerca del sudor que bajaba por su frente.

─Hay que salir de aquí ─comentó Akemi pasando por encima de Sieun y se dirigió a su clóset para buscar algo.

Sieun observó a sus amigas con curiosidad, ella y Minju llevaban el uniforme de diario compuesto por la falda tableada de estampado tartán, la camisa blanca, el pullover vinotinto y aquel moño azul marino. En cambio, Akemi llevaba el uniforme deportivo que constaba de una camiseta blanca con la insignia del colegio, shorts ajustados azul y zapatos deportivos de color blanco, tenía el cabello rubio recogido en una cola alta y revolvía su ropa con rapidez.

Minju comenzó a meter cosas en una mochila con una velocidad impresionante.

Se habían ocultado en su habitación, estudiaban en un internado en el cual las tres chicas compartían cuarto.

El internado Attacca se componía de un gran campus dividido en dos enormes edificios con arquitectura gótica, las chicas dormían separadas de los chicos, el único contacto que tenían con ellos era durante las clases pero no compartían en las horas de descanso ni comidas. Aquel instituto era para chicos prodigios con problemas de conducta o algún transtorno no demasiado fuerte, allí los ayudaban a explotar sus potencial y controlar sus problemas.

Minju suspiró mientras sacaba el arco y las flechas debajo de su cama. Akemi sacó un bate de su armario y ambas miraron a Sieun que seguía en el piso.

─¿Por qué tienen esas cosas aquí? ─preguntó Sieun frunciendo el ceño.

─Hay que estar listas siempre ─le dijo Minju acomodando el carcaj en su hombro.

Sieun abrió los ojos espantada, ella sólo estaba allí porque tenía una memoria fotográfica y había excedido el límite de velocidad en un auto robado. Pero sabía que Akemi había golpeado a un chico hasta dejarlo inconsciente con un bate y Minju atravesó a su vecino con una flecha.

Dicho así, sonaba como si eran un par de homicidas pero la verdad era que en el caso de Akemi ella se defendió de su agresor el cual era un chico que solía burlarse de ella en su antigua escuela.

Mientras que Minju había sido si acosada un par de veces por el hombre de mediana edad. No lo mató, sólo le hirió el hombro, pero al parecer eso fue más escandaloso que su situación.

─Si quieres morir, puedes quedarte allí pero yo me voy ─Minju abrió la ventana de la habitación mirando al suelo del jardín cerrado que estaba abajo, eran muchos metros de distancia─. Bueno, será una muerte menos dolorosa a ser comida por un maldito zombie.