final

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al día siguiente, chifuyu despertó con un dolor de cabeza. fue al baño a hacer sus necesidades y miró su cuerpo en el espejo. estaba lleno de marcas, mordidas y chupones. sentía su piel pegajosa, y todavía sentía el olor a lubricante. se fijó, sobre todo, en una mordida en su cuello que no pasaría como en una semana más. recordó lo de anoche, se moría de la vergüenza. ignorando eso, se puso su bóxer que estaba en el suelo y salió a buscar a kazutora.

estaba vestido, limpio y buscaba algo en la chaqueta.

kazutora - chifuyu...

chifuyu - oh... hola.

kazutora - yo... bueno, estaba buscando algo para la resaca para ti.

chifuyu - estoy bien.

kazutora - ah... ya veo.

hubo un silencio incómodo.

chifuyu - supongo que no quieres hablar de lo de anoche.

kazutora - ¿tú quieres?

chifuyu - no... la verdad no lo sé.

kazutora asintió tristemente. se puso su chaqueta y tomó las llaves de su auto.

kazutora - está bien, nos vemos.

kazutora salió de la casa de chifuyu. encendió el auto y se dirigió a la suya. llegando, tomó una ducha y se sentó a comer. apoyó su frente en sus manos y comenzó a llorar.

¡qué tonto era! creyó que al despertar chifuyu lo recibiría con un beso en los labios y automáticamente se convertirían en novios. kazutora pensó que era especial, pero no era más que una cogida de borrachos. ahora su vida será ver incómodamente a su amigo todos los días. amigo, porque no van a ser nada más que eso. su teléfono sonó, era chifuyu. realmente no le quería hablar, ni verlo, ni escucharlo. no sólo se sentía triste, sino culpable de haber caído en su trampa. claro que lo era, chifuyu miraba a cualquier chica que pasaba, quería tener sexo y lo consiguió; y con nadie más que el primer imbécil que encontrara, él mismo.

chifuyu jamás lo miraría como algo más que un amigo, porque por algo no habían tenido sexo. esa noche estaban borrachos y obviamente lo hicieron por esa razón, nada más.

estos y otros pensamientos más cruzaban por la cabeza de kazutora, porque sinceramente no podía hacer otra cosa. su teléfono sonaba y sonaba hasta que decidió apagarlo.

luego de comer se dirigió a la toman para trabajar en lo que sea que le digan, lo importante es no encontrarse con chifuyu.

llegó al gran edificio, y subió al último piso. tocó la puerta del único cuarto que había.

takemichi - ¡kazutora! qué bueno verte, pasa por favor.

kazutora - ¿qué tal?

takemichi - me tenías preocupado, chifuyu y yo te llamamos pero no contestabas.

kazutora - ah, bueno no tengo batería.

takemichi - chifuyu estaba preocupado por ti.

kazutora - ¿en serio?

takemichi - ¡claro! dijo que tenía que conversar algo importante contigo. no me dijo qué. pero sospecho que pasó algo entre ustedes.

kazutora - ¿ah, sí? bueno, no te equivocas. pero no quiero hablar con él.

kazutora se dirigió al estante y sacó un vaso y una botella de whiskey. tomó con una pinza unos hielos y se sirvió. de un sorbo tomó todo el vaso. takemichi suspiró.

- 𝙭𝙭𝙭; 𝘬𝘢𝘻𝘶𝘧𝘶𝘺𝘶 ⊰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora