Nuestro Día a Día *La Verdad* 2

❣Parte 11❣

Lucero: Se puede saber porque están revisando las cámaras que nunca revisan? [Cierra la puerta tras ella y los mira con cierta molestia]
...

Manuel: Jos hijo. Ve a afuera [Detienen el video y le dice seriamente mirando a los ojos de ella]

Jos: Bien. Hola ma

Lucero: Hola mi amor [se dan un beso en la mejilla y sale]

[Esperan a que cierre la puerta y se acercan ambos con cara de molestia]

Manuel: Que significa... [ella interrumpe]

NARRA LUCERO:

[El imaginarme que nos estuvieron vigilando me súper alteró, como se les ocurre...]

Lucero: Que significa eso [apunto con un dedo a la laptop] Me estabas vigilando la conversación con mi hija!!!

Manuel: Es mi hija también. Me preocupé

Lucero: Que te cuesta preguntarme. [Esto no está bien] Lo que menos me imaginé fue que tu y José Manuel hicieran algo así.

Manuel: Aquí lo que interesa es... que carajos tienes que decirle tu a Lucerito que traiga a sus amigos a esta casa

[Manuel me levanta la voz horriblemente y sé que si no la modera vamos a entrar en discusión tan temprano... ]

Lucero: En primera [levanto un dedo] A mi no me gritas [digo lo más relajada posible] Segunda [otro dedo] Que quieres que se vea con un chico en la calle, en un hotel, en casa de una amiga o qué? Más segura, su casa. Estando presente yo que soy su madre.

[Manuelito cabecea y eso es señal de que se está molestando el doble. Yo camino un poco hacia atrás solo por espacio]

Lucero: La niña no está bien Manuel, si no la apoyo me va a perder la confianza

Manuel: Así no Lucero [me levanta la voz y le ruego al cielo que no lo siga haciendo] Así no, Lucero Mijares es mi hija!!! Está mal si, por culpa de él no te das cuenta

Lucero: Me crees tonta!? [Le grito y me acerco a él] Justo por eso lo hago. De una vez por todas necesitaba aclarar todo ese enredo. Imagínate que hubiera pasado luego.

Manuel: Deja que yo vea al escuincle ese

[rápido agarro los hombros de Manuel, se está alterando y sé que es capaz de ir a pedirle todos los datos posibles sobre él, a mi nena.]

Lucero: Para que? Deja que comportarte como un inconsciente. El muchacho no le hizo nada a nuestra hija

Manuel: Estas defendiendo al chamaco que le hace daño a tu hija?

[Me separo de él solamente para mirarlo asombrada, como se le ocurre. A mi hija la voy a defender toda la vida. Pero es que es la verdad ninguno tiene la culpa. Y no puedo reclamarle a ese chico solo por gustarle a mi hija, esas son cosas que no se pueden evitar]

Lucero: No pero es que ya tu estás mal [me toco la sien] Como crees Manuel?

Manuel: No pues tu dirás [levanta sus manos]

Lucero: Manuel que culpa tiene ese chico de que la niña se haya enamorado justamente de él

Manuel: Enamorarla Lucerito, enamorarla [me dice haciendo gestos como si me tuviera que explicar palabra por palabra]

Lucero: No seas necio. [Ruedo los ojos, y ya esto me está cansando] Que quieras tenerla en una bola de cristal y cuidarla como si fuera una niña de 7 años, es muy diferente a las cosas que en realidad están pasando. [Doy un ligero manotazo en la mesa] Tu también te has enamorado muchas veces, has llorado y has sufrido.

Manuel: No Lucero, a parte no tiene nada que ver una cosa con la otra [me da la espalda y le doy la vuelta]

Lucero: Todo tiene que ver. Porque de esa si que no salva nadie. No me interesa si lloraste por cada rompimiento que tuviste, mucho menos si te emborrachaste... Pero solo quiero que tomes de ejemplo nuestros problemas. [Toqué cierto punto que causó gran silencio en toda la biblioteca] Ponte a pensar a ver si no es algo inevitable

[Manuel se queda callado, coloca sus nudillos en la mesa mirando abajo. Veo como suspira profundo e incluso siento el sonido de su respiración. Me da tanto coraje toda esta situación y solo puedo mirarlo]

Manuel: Es desgarrador ver como le rompen el corazón a tu hija [no me mira, pero habla, y claro que es horrible] Me siento como amarrado ante esta situación. Sin saber que hacer, porque quisiera evitarle cualquier dolor a mi nena.

Lucero: Yo. [pienso lo que voy a decir, siento que cualquier palabra que diga va a regar la situación completa ya que si así está él. Es porqué no se quiere alterar] Lo entiendo perfectamente, pero ella tiene que vivir cada etapa como se le va presentando

Manuel: Y su corazón? [su voz se va quebrando y mi corazón se va haciendo agua al escucharlo] Como le evito ese dolor

Lucero: Acaso un mal de amores se puede evitar [mi voz estaba casi quebrada cuando veo que levanta su rostro y sus ojos están rojos, y de repente da un fuerte manotazo en el escritorio]

Manuel: Y que mierda me importa eso a mi! [doy un ligero brinco, me asustó la verdad] Mi hija no tiene que pasar por eso [grita muy molesto y con voz de amargura] Ella no se merece las lágrimas de nadie en este jodido mundo, me entiendes!

[Me quedó paralizada al ver cómo lanza una escultura de la repisa, que tanto veneraba y cae al suelo echa pedazos. Al levantar mi vista ya lo tenía a un milímetro de mi cara gritando]

Manuel: Esto esta mal Lucero [Abro mis ojos con exageración y espero a que se de cuenta de que se está pasando de la raya] Si, si lo voy a resolver yo. [Me agarra de un brazo e inconscientemente lo aprieta, hago una mueca de dolor... me está doliendo muchísimo]
.
.
.
.
😶