06.- Graduacion.

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Viernes, 10 de julio del 2018.
Hace un poco más de dos años.

Nadie le había dicho que una fiesta de graduación escolar a se tan endemoniadamente aburrida. Es cierto que aquel era un momento importante en su vida, sin embargo a Sunoo no podría importarle menos.

Recién había terminado el primer año, con unos resultados bastante satisfactorios para tratarse de él. Ya habían hecho la celebración oficial de la graduación, donde a los estudiantes se les entregaba su diploma y se les hablaba sobre sus logros durante el año. Ahora la escuela había alquilado una buen salón para celebrar la fiesta de las graduaciones de cada uno de los cursos, y ahora él estaba ahí, junto a todos los estudiantes de primer año, celebrando la graduación.

Su madre le había dicho que fuera vestido con algo formal, digno de su alta posición social. Sin embargo, Sunoo se había limitado a ir con unos jeans ajustados de color azul y una chaqueta de mezclilla oscuro, con el cabello hecho un desastre. Entonces, justo en aquel momento se sentía fuera de lugar. Todos en la fiesta andaban de traje y corbata, las mujeres usaban vestidos finos y tacones largos. Incluso el mismo lugar de la fiesta era elegante: Un enorme salón con ventanales de cristal, una gran lámpara de araña en el centro de la habitación, y los camareros vestido de negro corriendo de aquí para allá, repartiendo canapés y bebidas a los invitados. Aún le sorprendía que le hubiesen dejado entrar con aquella facha que traía puesta.

La elegancia del lugar, claro está, no se comparaba en absoluto con las exageradas fiestas de ricos que se celebran en la mansión de sus padres, pero aún así le sorprendía que la escuela se hubiese esmerado tanto en conseguir un salón así para la graduación de los alumnos.

Y eso era lo aburrido que tenía.

No sólo porque el lugar era lo suficientemente elegante (ridículo) como para desagradarle, sino que estaba solo.

Había quedado con sus cuatro amigos para llegar juntos y encontrarse ahí, sin embargo, no los veía por ninguna parte.

Estuvo sentado solo en una mesa de cuatro por un buen rato, mirando a los amigos abrazarse y a las parejas besarse, hasta que escuchó una voz conocida llamar su nombre.

—¡Sunoo!

Se levantó de golpe de su silla y divisó a su novio en la puerta del lugar, saludándolo con la mano. Sin pensárselo dos veces corrió a sus brazos para abrazarle.

—¡Sunghoon...!—exclamó Sunoo contra su pecho y levantó el rostro para mirarle a los ojos haciendo un puchero—¿Por qué llegaste tan tarde? Enserio me estaba aburriendo aquí solo. Los chicos no han llegado aún ¡Y prometiste que vendrías pronto para estar conmigo!

Sunghoon soltó una risita por lo bajo, llenándose de compasión al ver cuan tierno podía llegar a ser su novio.

—Lo siento sun... No te enojes. Me costó mucho venir aquí. Recuerda que estoy en segundo año. Justo ahora debería estar en la fiesta de MI graduación. Pasé un rato por ahí para saludar a algunos amigos, y vine aquí tan rápido como pude.

—Mmmh... Aún así estoy molesto contigo—le dijo Sunoo volviendo a hacer uno de sus tiernos pucheros, y entrecerrando los ojos al fruncir el ceño.

—¿Ah, si? ¿Y como puedo recompensarte?

Sunoo le dedicó una sonrisa de oreja a oreja y se palpó los labios con el dedo índice en modo de respuesta.

Sunghoon entendió a lo que se refería y depositó un beso sobre los labios de su pequeño Sun. Esos sencillos besos de tan solo un roce, tan inocentes como si fueran dados por un niño de primaria. Sunoo debía conformarse con ese tipo de besos, porque esos eran los besos que Sunghoon podía ofrecerle. A pesar de que el menor siempre quisiese mucho más que tan sólo eso. Debía conformarse porque ese chico inocente de ahí era su novio, y Sunoo le quería.

MORE THAN SEX | HEESUN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora