Nombre: El último verano.
Historia: Ficticia
Era el último día de clases para dar paso a las vacaciones de verano y todo mundo estaba ansioso por disfrutar al máximo pues la Universidad había sido más agotadora de lo usual en esos días.
Ethan: ¿Entonces qué harán? Debemos aprovechar al máximo este descanso.
Ellie: No lo sé chicos, yo había pensado pasar mis días en casa comiendo y durmiendo.
Thyson: Eso es muy aburrido para el verano. -Dijo al tiempo que pasaba su brazo por el hombro de Ellie-
Ellie: Ya sé, ahora quita tu brazo por favor.
Claire: Ya déjala Thy, ¿Qué tal si vamos a la cabaña de mi familia? Hay un lago y será divertido ir todos.
Dylan: Yo me anoto chicos, suena buen plan. -Seguido los demás chicos también asistieron-
Todos salieron rumbo a sus casas y acordaron en un parque cercano luego de empacar las cosas que pensaban llevar al viaje.
Ethan pasó por sus amigos al parque y luego fueron al súper por provisiones, algunos dulces, snacks, bebidas y un poco de alcohol para alegrar el ambiente.
Unas 4 horas de camino después llegaron a su destino, la cabaña de la familia de Claire, algo alejada de las demás personas y rodeada por naturaleza, un buen lugar para ser libres.
Ethan: Bueno creo que aquí estamos. -Parece que tenemos vecinos dijo mirando la casa de al lado-
Claude: Sí y no, nunca hemos visto a los dueños o a alguien ahí, así que no sabemos si hay gente viviendo allí.
Thyson: Entonces es mejor, estamos solos y sin tener que guardar apariencias. -Justo se saca la camiseta mientras los demás terminan de sacar las cosas del auto-
Cada quien se instaló en una habitación y luego de tomar un baño bajaron a la sala pues había oscurecido y por ende la temperatura había bajado así que prendieron la chimenea y se sentaron ahí.
Ellie: Oigan no les pareció raro que aún cuando no se ha visto vida en esa casa se vea tan bien, digo si no vive nadie no creo que alguien se molesta en venir hasta acá solo para limpiarla.
Thyson: ¿Qué tal si son fantasmas?
Ethan: Por favor Dylan, ¿Cuántos años tienes?, ¿Cuatro?
Claire: Oigan, ¿Escucharon eso?, Creo que vino de afuera.
Entonces todos se levantaron para ir a ver qué pasaba, mientras ellos estaban espiando había una persona no invitada intentando entrar por la puerta trasera, con gran sigilo y cuidado logró adentrarse y avanzar hacía su objetivo.
Thyson: Creo que no fué...
Ni siquiera pudo terminar lo que estaba por decir, el sujeto que había entrado acababa de atravesar su pecho con un arma cortopunzante, los demás voltearon inmediatamente al oír su quejido y empezaron a gritar mientras intentaban escapar de él.
Corrieron asustados y desesperados a sus habitaciones intentando encontrar la manera de huir de aquel asesino más de uno se encontraba llorando al borde del colapso.
Sus corazones estaban acelerados y de repente se escuchó una puerta sonar, luego el silencio, habían pensado que todo había sido una broma entonces bajaron y Ethan, Claire, Ellie y Dylan en ese orden, al llegar al piso de abajo no encontraron a Thyson, no había nada, solo un charco de sangre.
Estaban muy asustados y cada vez más nerviosos, volvieron a mirar por la ventana y vieron una camioneta en la casa de al lado corrieron a advertirles a esas personas sobre lo que había pasado y a punto de llegar vieron algo que inmediatamente los hizo detenerse, dos personas estaban despedazando a su amigo y tirándolo al lago, sin duda era una imagen que no iban a olvidar nunca.
Intentaron retroceder silenciosamente, pero entonces Dylan tropezó con una rama y acabo estrellándose la frente contra una roca, lo cual hizo que terminara haciéndose una herida en esta, rápidamente lo levantaron y huyeron de nuevo a la casa.
A punto de entrar lograron jalar a Ethan y los demás viendo que no podrían hacer nada, cerraron la puerta justo a tiempo, cubrieron rápidamente las ventanas y puertas también subieron al segundo piso a revisar y de igual forma cubrieron todo.
Estuvieron gritando, llorando y maldiciendo silenciosamente un buen rato hasta que escucharon algo, la camioneta se había marchado y no parecía haber nadie en la casa de al lado.
En este momento recordaron sus teléfonos, pero no había nada de cobertura, volvieron a salir para revisar la otra casa y lograron entrar, buscaron por todos lados y no encontraron ningún rastro de nada hasta que detrás de una compuerta salió uno de los sujetos y arrastró a Claire con él mientras Ellie y Dylan corrieron inmediatamente hacia el bosque.
Luego de un tiempo empezaron a bajar el ritmo por el agotamiento, era difícil correr prácticamente a oscuras y más por tipo de terreno por el que iban, aunque no duró mucho pues empezaron a ver unas luces y se imaginaron que la camioneta había regresado, entonces una vez más emprendieron la huida, pero era demasiado asfixiante, se golpearon con un árbol caído y terminados rodando por una ladera empinada.
Ellie se fracturó una pierna y fué la gota que acabó con sus ganas de huir, ya que le resultaría muy difícil seguir huyendo prefirió no ser una carga para Dylan.
Dylan: Sé que puedes hacerlo, por favor solo sigamos podemos salir de esto juntos. -Decía mientras sollozaba e intentaba no ser tan ruidoso.
Ellie: Ya no aguantaré seguir ve tú sin mí, corre antes de que te atrapen y no nos olvides por favor.
Su amigo iba a intentar seguir convenciéndola, pero justo empezó a ver luces de linternas entre lágrimas se despidió de ella con un beso en la frente y siguió corriendo hacia delante, después de una hora ya terriblemente agotado había empezado a ver el amanecer y a lo lejos pudo divisar un pueblito lo que le dio más fuerzas para seguir.
Al llegar contó todo a la policía los llevo al lugar, pero no había nada, ni chicos, ni sangre, ni marcas de que hubiese habido personas allí, solo estaba su equipaje.
Por mucho que lo repitió nadie le creyó y tuvieron que cedarlo, al ver que después de algunos días lo siguió repitiendo decidieron encerrarlo en el manicomio donde aún hoy permanece.
-Cerró el cuaderno mientras sentía un poco de melancolía, entonces se tocó la cicatriz que llevaba en la frente, mientras sus ojos se aguaban, en ese momento un enfermero entró a la habitación.-
-¿Es hora de mis medicamentos?
Enfermero: Así es, ¿Qué tanto escribes en ese cuaderno?
-Un poco de mis memorias, ya sabes, dentro de estas cuatro paredes blancas puedes olvidar todo.
Enfermero: ¿El último verano? Bonito título, ahora vámonos Dylan.
