Primer Extra

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Bed:

Su vida no era tan emocionante como ella hubiese esperado que fuera.

Suspiro mientras limpiaba una de las mesas.

-Bediar-hablo una voz masculina,ella se enderezó dejando el trapo encima de la mesa antes de voltearse a mirarlo.

Los ojos café del hombre se veían tristes y cansados,tanto como él lugar en dónde ella está trabajando.

-Ya no puedo pagar las deudas-suspiro él y por un momento todos los sonidos cesaron-temo que deberé de cerrar el lugar.

-Pero este es mi trabajo-refuto ella-si cierra ya no tendré con que pagar el alquiler de dónde vivo.

-Lo siento-el hombre miro hacia afuera,dónde personas caminaban por la acera sin siquiera mirar el local de comida-pero sin clientes el negocio no funciona.

Ella apretó los puños.

Tengo una familia a la que mantener.

-¿Y si los clientes comenzarán a llegar?,¿Cerraría?

-Probablemente no-hablo él-habría ingresos para el local y lograría pagar todo.

-Entonces-Bed se quitó el delantal mientras se acercaba a un perchero para colgarlo-deme hasta mañana-pidió antes de salir.

El dueño del local solo la vio irse desconcertado.

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Ese día llegó media hora antes de que el local abriera.

Miro a las personas que pasaban con indiferencia a su lado y sonrió.

Esto resultará.

-Hola joven-saludo a un chico de aproximadamente veinte años-¿Le gustaría comer algo?

Él chico miro por encima del hombro de ella,el lugar estaba despintado y además cerrado.

-Gracias,pero no me apetece nada de esa tie...

Antes de que terminara de hablar Bed formó una nubecita rosa que voló de su mano a la cara del muchacho.

-¿Qué ibas a decir?

-Comeré algo cuando abra-y sin decir más el chico se sentó en el suelo a esperar.

Bed estuvo así más o menos por veinte minutos,cada persona que pasaba por su lado era atraída al local gracias a su poder.

-¿Bed?

Volteo con una sonrisa.

-¡Jefe!,mire todas las personas que ahí aquí para comer hoy-abrió sus brazos.

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Las primeras semanas su truco había dado resultados, él lugar ya no se veía como antes,lo habían remodelado,cambiando los taburetes por sillas acolchadas,las paredes que alguna vez fueron blancas ahora estaban tapizadas y al echar un vistazo por afuera podrías apreciar un gran cartel de neón.

El verdadero problema surgió al mes,los clientes le informaron al Jefe de Bed que ella los había hipnotizado con alguna clase de truco.

Él lo entendió,Bed estaba haciendo uso de su poder,algo que estaba prohibido en el lugar.

A las pocas horas pido hablar con ella.

-Esto tiene que terminar-dijo-no quiero una demanda por parte de los clientes.

-¿A qué se refiere?

-Tú y tú poder,Bed-hablo en voz alta-ya no te permitiré trabajar aquí.

Su alma cayó a sus pies.

-¡Tengo una familia que mantener,no tuve otra opción!

-Siempre hay otra opción-suspiro-,pero tú elegiste la más fácil,lo siento,pero debes irte,fuera de mi local.

Cerro sus puños,sería tan fácil usar su poder para controlarlo.

Una pizca de remordimiento cruzo su Corazón.

No podía hacerlo.

No a él que la había ayudado durante meses.

Suspiro y se quitó el delantal.

-Está bien-dijo mientras se lo pasaba-gracias por todo-susurro mientras salía.

Ya veré qué hacer.

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Se cruzó de brazos mientras se sentaba con una lata vacía en la mano,las pocas monedas que había juntado tintinearon en su interior.

Agh.

Había estado buscando trabajo,pero al parecer nadie le interesó contratarla,así que cuando en su casa comenzó a faltar la comida tuvo que comenzar a pedir limosnas.

Al principio era muy vergonzoso,pero al pasar las semanas se acostumbró,algunas personas eran amables y le daban alguna que otra moneda,otras no tanto,la miraban raro y de vez en cuando la insultaban.

-Ya que-suspiro.

Escucho una moneda caer a su lata y levanto la mirada,para encontrarse con un hombre bien vestido con su largo cabello recogido en una media cola.

-Gracias-susurro y volvió a mirarlo,se veía como un hombre al cual no le hacía falta dinero.

Espero me disculpe,pero...

Se puso de pie mientras el hombre se volteaba,formo dos nubecillas rosas y ataco.

La persona delante de ella dejo de caminar y lentamente cerro los ojos,con pasos agiles se acercó a él para inspeccionarlo,toqueteo sus bolsillos en busca de la billetera, pero no sintió nada.

Carajo.

-¿Buscas algo?

Sintió una mano cerrarse alrededor de su muñeca y el terror la invadió.

-¿Cómo...

-¿Te refieres a cómo me libere de tú poder?-rió-te falta practica muchacha-hablo-y por lo que veo también dinero,¿por qué no hacemos un trato?

-¿Qué clase de trato?

La soltó.

-Tu poder tendría buena finalidad-sonrió-muchos héroes temblarían ante ti-ella frunció el ceño.

-No me interesa ser una villana,ya bastantes problemas tengo,gracias.

-A tu familia no le faltaría nada.

Lo observo por un momento antes de hablar:

-¿Estás seguro de eso?

El asintió.

No hacía falta preguntar más.

Y en un abrir y cerrar de ojos ya era parte de un pequeño equipo de villanos,no cometieron crímenes muy grabes,estaban en entrenamiento:Comenzaron con pequeños robos a tiendas,para luego asaltar grandes bancos.

El dinero ya no le hacía falta,pero en su interior sabía que estaba mal lo que estaba haciendo.

¡Kill Me![Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora