Ghostin

Único

Inko Midoriya.

¿Cómo podría describir a la mujer después de todo lo que ha soportado?

No debe ser sencillo estar en su papel sabiendo el tipo de hijo que resultaste ser, nerd.

Tú madre, Izuku...

Fuerte, tenaz, paciente, resilente sobre todo bella, aún en estos momentos donde la angustia y la preocupación inundan todo su ser, sigue de pie.

Sigue esperando...

Esperando a que despiertes luego de que desvanecieras en medio de los ciudadanos resguardados en la UA, una vez que dieron su aprobación de quedarte para reponer tus energías, descansar y seguir la lucha contra All for One, a pesar de lo peligroso que resultara el hecho.

De eso a ahora, han pasado largas y tortuosas horas, con exactitud 72 hrs.

Jamás se ha apartado de tu lado.

Siempre cerca. Afuera, adentro; de arriba para abajo dentro de las instalaciones del hospital, aguardando por el comentario del médico mientras te mantienen en observación.

Deshidratado, cortaduras de diferente tipo de proporciones sin curar u otras con mala cicatrización. Los niveles de azúcar, grasas, sangre, presión, etc., muy bajas de lo normal. Fatiga extrema, niveles de estrés superior a la regla, inestabilidad hormonal. Una situación crítica para un omega como tú.

El hecho de haber anulado los vínculos con todas las personas que terminaron siendo tu manada, afecto tanto tú sistema metabólico, mental como emocional que, para evitar que te perjudicara a tu persona o posición heroica, te hiciste maniático a buscar situaciones o generar ciertas acciones que elevaran y mantuviera tu adrenalina al máximo ¿Con qué fin? Con el fin de no sucumbir a lo que tanto te dolía...

Decidiste ignorar, reprimir incluso olvidar lo que te hacía "débil", según tus creencias.

Tú y tus malditas creencias.

Siempre suponiendo.

Siempre actuando por ti mismo.

Siempre pensando en los demás y menos en ti.

Siempre poniendo tu persona en peligro, sin importar qué.

De no haber intervenido hubieras terminado desecho en todos los sentidos, estúpido.

Estúpido.

Estúpido.

Estúpido, Deku.

Porque no ves cómo nos tienes aquí, a todos ¡Sí, a todos! Mortificados, ansiosos, temerosos. Con la agonía de saber si regresaras en ti, si vas a mejorar, si vas a estar bien, si vas acudir a nosotros como nosotros lo hicimos contigo.

Somos manada.

Somos la clase 1A.

Somos la siguiente generación de héroes que salvara al mundo

Somos la esperanza y la fe de todas estas personas.

Somos los que se disputaran quien será el número uno, el mejor.

¿Lo entiendes?

Así que no te atrevas abandonarnos de nuevo porque, en definitiva, te voy a matar.

-Oh, Katsuki-kun...

La voz logra sacarme de mis cavilaciones notando a la Tia Inko a unos pasos frente de mí, al final del extenso pasillo donde está ubicado la habitación del nerd. Mierda. No puede ser posible. Mi misión solo era vigilar a la distancia, sin ser notado... la emoción me orillo a todo esto. Ahora, estoy siendo cuestionado por la mirada asombrada, pero con poca vida, de la Tía Inko, quien aprieta un pañuelo húmedo contra su pecho.