Mi pequeña presa~ [Ryusei Satō x T/N] [Yandere]

Prólogo

En un campo lleno de flores y un árbol en medio del campo, pero...¿Quién es ella?, una bella dama debajo del árbol a espaldas, con un vestido celeste que le llega por debajo de las rodillas, que se movía con delicadeza con el viento que había junto con su hermoso cabello. Ryusei atónito se acerca lentamente extendiendo su mano para tocar el hombro de la hermosa chica, la chica al sentir el roce de la mano del moreno se da media vuelta haciendo contacto visual, al verlo le da una dulce sonrisa dejando al chico perplejo, juraba que estaba viendo un ángel.

—Me da alegría verte Ryusei.

—¿Quién eres?

Ante esa pregunta la chica suelta una risa y se acerca al chico abrazándolo por el cuello.

—Bueno, creo que pronto sabrás quien soy.

—¿Qué?

—¡Ryusei! ¡Despierta idiota!— Grito un chico pelo bicolor quien agitaba a Ryusei para que despertara, logrando con su cometido.

Ryusei despierta algo descontento y frustrado ya que quería, él quería seguir con el sueño y saber quien era, se levanta del piso de la terraza y mira Chifuyu con un pequeño seño en el rostro.

—¿Qué quieres Chifuyu?

—¿Cómo que qué quiero? Tenemos que ir a clases y el profesor te va a castigar si llegas tarde de nuevo a clases, hasta yo le dije te buscaría minutos antes que empezara su clase— Respondió con enojo mientras se cruzaba entre brazos.

—Tsk, si, si, lo que tu digas gruñon. ¿Uhm?— Siente algo en su mano y pudo ver que tenia una ramo de rosas con una carta. Mira extrañado ya que no recuerda haber tenido algún encuentro con alguien antes, de seguro se lo dejaron mientras dormía.

—¿Otra vez tus admiradoras? Dios santo ¿cuando dejarás de ilusionar las con tus coqueteos si a final de cuantas nunca sales con ellas— Lo miro frustrado y enojado por su forma de ser y como juega con los sentimientos de las chicas. Con sus encantos haciéndolas creer que hay "algo" para al final dejarlas como si el nunca pareció interesado.

— Lo que yo escucho son celos~ además no es mi culpa de ser guapo — Sonrío orgulloso haciendo que el de orbes verdes pusiera los ojos blancos para jalar lo de el brazo sin delicadeza alguna, camina por los pasillos del colegio apresurado ya que dentro de unos minutos tocaría el timbre y ya tendría que estar en clase.

Ryusei parecía despreocupado mientras que Chifuyu estaba apurado, algunas veces el de oji-negro saca de quicio a Chifuyu, le enojaba que no le diera importancia a las cosas y le pareciera que no se esfuerza en ninguna cosa. Llegaron a clase segundos antes que sonará el timbre, entraron y cada se fue a su lugar, Chifuyu soltó un suspiro y miro por la ventana.

《Siempre es lo mismo. ¿Por que no simplemente me voy con un ______ siquiera 5 minutos? Pero nooo siempre tengo que estar al tanto de de Baji-san y de Ryusei, mejor por un día los dejo solos y que ellos se lo arreglen. Además no la he visto desde hace una semana.》

Soltó un suspiro pesado mientras escuchaba al profesor que hablaba demasiado lento, como si quisiera que se durmiera, posiblemente solo este cansado. Mientras tanto el de tez morena estaba pensativo sobre su sueño. ¿Quién era? ¿Ya la conocía? ¿Por que apareció en su sueño? No entendía en lo absoluto lo que sucedía, quería saber más y más de quien era.

(...)

— Mamá, no creo que sea necesario cambiarme de colegio — Comentó una chica mientras comía su desayuno viendo de reojo a su madre quien estaba lavando los trastes.

—Yo creo que es lo mejor para ti ______, además Chifuyu va a estar contigo, ¿acaso ya no se llevan bien?

—Es mi mejor amigo, nos conocemos que somos pequeños, pero no tengo un buen presentimiento de ir a ese colegio, siento que algo va a suceder— Dijo frunciendo el seño pensativa, por un momento pensó en su ¿sueño? ¿pesadilla? No sabia como describirla, tampoco es que se recordará mucho de ello, solo recuerda que en el sueño estaba sentada en un rincón con un tipo de cadenas que tenia al rededor de sus muñecas mientras que alguien se acercaba a ella, estaba sonriendo al verla, de una forma que le daba un escalofrío. No quería recordar se del resto y prefirió terminar de comer.