Una noche y descontrol (editando)

capítulo 39

Holaa, acá les traigo otro capitulo, espero que les guste, no se olviden dw votar y comentar, los amoo❤

Mi vientre crece día a día. Como crece mi angustia al no saber nada de mi padre.

Corrección.

Sabía pero no quería afrontarlo.

Coma. Una palabra tan fea, digamos que Jeremy esta sumido en un sueño. Del cual en algún momento debía despertar

Tenia miedo de perder a mi hija.

A pesar de todo ya la amaba y no iba a ser lo suficientemente fuerte como para soportarlo.

Luego del desmayo tuve una perdida y me recomendaron reposo por unos días. Tampoco podía recibir emociones fuertes, ya no mas.

De eso ya hacia una semana.

Solo me decían que mi padre estaba bien, pero ya sabia que no era cierto.

A los 14 años cuando me fui estuve muy dolida con mi padre. Deje mi vida, mis sueños, mis amigos, mi familia atrás porque él quería "darme una lección", pero no entendió que yo era una adolescente y solo necesitaba que alguien me escuche.

En parte mi "llamado de atención" como dijeron, fue culpa de mi familia.

Mis hermanos eran mas grandes y cada uno tenia su vida hecha, mi papá cambiaba de mujeres muy rápido y no lo culpaba, Beatrice le habia roto el corazón y hasta ahora no había sentado cabeza.

Maria fue la única en mi vida que me escuchó  que, a mi parecer, sufrió mi partida.

Llegar a otro país, con gente desconocida y un idioma, el cual a penas manejaba, fue muy difícil.

Recuerdo que llegué un  sábado, llovía mucho, y para colmo mi "madre" no me había ido a recoger al aeropuerto. No me sorprendía.

*Flashback*

Para cuando llegue a su casa estaba toda empapada, porque no encontraba el lugar, ni  tenia cambio para un taxi, asique tuve que caminar mas de 20 cuadras bajo la fria lluvia.

Toco la puerta del departamento pero nadie responde, estuve como 10 minutos hasta que un hombre, en boxer, abre la puerta, me mira y dice- Niña, no estoy comprando galletas, no molestes.- No voya negar que era un hombre muy lindo, tenia cerca de unos 25 años.

Y estaba por cerrarme la puerta en la cara cuando puse mi pie y con una gran sonrisa conteste- Vengo a ver a mi madre imbécil, así que si no te importa...- Lo empuje y entre justo cuando Beatrice salia por el pasillo abrochándose una bata rosa transparente, claramente estaba despeinada, no hacia falta darme cuenta que estuvo haciendo que era mas importante que buscar a su hija.

-¿Que haces aquí?-Pregunta enojada.

-¿Disculpa?- no me sorprendía -. Soy tu hija y acabo de viajar mas de 15 horas para que ni siquiera me vayas a buscar al aeropuerto, lo mínimo que quiero es que me recibas como cualquier madre normal.

-Beatrice, nunca me contaste que eras madre- contesta el hombre de la puerta. Quien sigue parado en la puerta con cara de sorpresa.

Su rostro pasa del enojo, a la sorpresa para estar de nuevo enojada- No me hables así, sigo siendo mas grande que tu, y no eres mi hija.

Ese fue su primer golpe verbal y me dolió muchísimo mas que cualquier otra cosa.

-¿Quien es entonces?- pregunta el joven.

-Ella es... es... mi hermana- responde-. David ella es mi hermana Stephanie, viene unos días a vivir conmigo.

Eso no me lo esperaba. Rogaba porque fueran unos días y no años.

-Bien amor- se acerco y la beso en los labios. Asco-. Voy a vestirme para luego irme, te dejo a solas con tu hermana, seguro debes de haberla extrañado.

No dije nada y en silencio me fui por el pasillo, mire cada puerta hasta encontrar el baño, la primera era la habitación ,intuí, era de ella, había una cama de dos plazas desordenada, en frente se encontraba otra y supuse era la mía, sencilla pero acogedora, al lado otra puerta que conducía al baño, y por ultimo, al final una biblioteca.

Llore en silencio.

Pero me di cuenta que era en vano, a partir de ahora esta era mi vida y debía ser fuerte para afrontarlo.

Me limpie las lagrimas y salí de allí, justo cuando abría la puerta me choque con el tal David.

-No eres su hermana ¿no?-Pregunta.

Niego.

Me mira de arriba a bajo y se que soy una asco.-Eres hermosa, yo no podría avergonzarme de alguien como tu.

Sonrío, sus palabras me toman por sorpresa.

Miro detrás de él, en cualquier momento puede aparecer, y este es mi momento de venganza.

-Muchas gracias- contesto y pienso en que si se lo propongo no se negaría-. ¿Me harías un favor?

-Lo que quieras preciosa.- y me toma de la mano.

-Besame.- susurro.

Y justo cuando termino la veo a ella parada mirándome y desafiándome con la mirada.

-Con mucho gusto.- responde contra mis labios.

No era mi primer beso, ese lo había tenido a los 10, pero besar a una persona mayor, se sentía... distinto. Mas maduro.

Lo agarro del cuello y lo atraigo mas hacia mi, él me toma de la cintura.

Justo cuando su boca desciende hacia mi cuello, abro los ojos y la veo allí parada, pasmada. Sonrío.

Cometido cumplido.

*Fin flashback*

Desde ese día ella empezó a envidiarme y querer parecerse ami.

Me mando al psicólogo. Me compro y se compro ropa y me convirtió en una mujer.

Yo no era fea pero no me consideraba hermosa, al contrario, usaba ropa grande y holgada para esconder algunas curvas que comenzaban aparecer.

Ella no me lo permitía y de apoco me acostumbre a la ropa ajustada.

Cuando me llego al menstruación no me explico nada y todo lo que supe que debía hacer lo aprendí por Amanda y Giselle.

Mi padre me llamaba 1 vez por semana, los primeros meses, luego lo hizo 1 vez por mes y cada vez recibía menos llamados. Mis hermanos por otra parte eran otra historia, si recibía un mensaje o un llamado era un milagro, excepto por Jordan y Joshua

Me dedique completamente al estudio, y contaba los días que faltaban para irme.

Al principio dijeron un año, pero hubo una pelea en la cual concretaron que debería quedarme hasta ser mayor de edad, para luego yo tomar la decisión que quisiera.

Esa noticia fue la peor que pudieron darme.

Pero la acepte y me quede, no tenia otra opción.

Unos días antes de mis 18 llame a mi papá para pedirle mas dinero, él siempre me depositaba, todos los meses por cuatro años y jamas lo había utilizado, tenia muchísimo dinero guardado para vivir un tiempo sin mis padres, ese era mi plan al principio.

Pero luego lo pensé y decidí volver a Londres para cumplir mis sueños.

Los cuales en este momento se encontraban demorados, pero algún día los cumpliría.

Eso esperaba...