Capítulo 13

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Disculpen la tardanza, no hay escusas no acabé el cap antes del 31 de octubre y no me sentía cómoda publicando el 1 y 2 de noviembre.

Al día siguiente parecía que nada hubiera pasado, cosa que Takemichi agradeció internamente, como de costumbre tuvo que ir a la escuela, de camino su teléfono sonó mostrando un número que había estado contactando últimamente más de lo normal.

-¿Harukun? -contestó.

-Ya hablé con Senju -una voz algo cansada y adormilada fue lo que se escuchó.

-¿Y qué pasó?

-Dice estar bien.

-¿Pero?

-No lo está. Le dije que si quería irse lo hiciera, pero me dijo que quería seguir, tampoco quiso tomarse un tiempo.

Takemichi guardó silencio durante un largo rato.

-¿Te dijo algo más?

-No, solo me abrazó hasta que se quedó dormida. La desgraciada aun dormida tiene fuerza, tardé como media hora en zafarme -se quejó con cansancio.

Sonrió el semi rubio

-De acuerdo, si la veo muy afectada hoy la mandaré a casa.

Una voz femenina llamó a Takemichi, quien al voltear se encontró con Hinata.

-Voy a colgar, cualquier cosa te llamo. -tras recibir una afirmación colgó y guardo su teléfono.

-Buenos días, Tachibana-chan -saludo a la chica con una sonrisa amable.

-Ayer te fuiste de una forma muy repentina ¿todo bien? -preguntó con amabilidad y preocupación.

-Si, no te preocupes -respondió con simpleza ¿que debería de responder? ¿"Parece que todo se irá al caño y estaré en crisis"? No, gracias.

Conversaron hasta llegar al instituto y después cada quien se fue por su lado. Los chicos no comentaron nada de lo que ocurrió la noche anterior y todo siguió con tranquilidad, al menos hasta la noche.

Takemichi suspiró al verse con su uniforme de la Toman, todavía no se acostumbraba a él pese a estar ¿cuanto tiempo llevaba en la Toman? ¿Un año? no importa.

Las cosas que no se dan queriendo no importan.

Salió de su casa con el cabello peinado de lado ligeramente hacia arriba y no pasó mucho para que una moto se le acercara.

-Capitán -saludó Inupi deteniendo la moto frente al semi rubio teñido.

-Hola, Inupi-kun -sonrió Takemichi a manera de saludo y se subió en la parte trasera de la moto.

-Los demás están de camino al santuario -informó el mayor poniendo a andar la moto.

-De acuerdo.

-¿Sabes cómo está Senju? -preguntó Seishu después de cierto silencio.

-Dice que está bien, espero que hoy esté mejor.

-Le pregunté a Akane al respecto y que podríamos hacer -hizo una pausa- dijo que seguro Senju sintió miedo y asco, si hubiéramos llegado después seguro hubiera sentido impotencia y horror. Lo mejor sería mostrarle nuestro apoyo, pero no sé cómo.

Takemichi guardó silencio un momento y después lo rompió con un suspiro- Me sumergí en otras cosas que olvide que Senju es una niña aun.

-Aunque sea menor que nosotros, Senju querrá seguirte, y no es la única.

No soy tan importante para Mikey-kunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora