Efímero

vive

De repente me encuentro otra vez dentro de esta oscura habitación, y entró nuevamente en una lucha por no dejar salir las lágrimas de mis ojos ya cristalizados, trato de recordar en qué momento todo empezó a salir mal, más nuevamente no obtengo más que un inmenso silencio como respuesta, una sensación desesperante me invade, miedo realmente no sé que hacer yo mismo/a me he encargado de dejarme sin a
Personas a las que recurrir, aún así busco una salvación, ¿Soy el único que se siente así? ¿Alguien más compartirá este extraño sentimiento? Necesito alguien que me salve.

¿Milagros? Tales cosas no existen, susurré para mí, mientras observaba el maravilloso resplandor de la luna, me he perdido totalmente ¿Es demasiado pedir un destello de luz en medio de mis tinieblas? Supongo que sí.

Luego de una larga noche llega el amanecer, supongo que todo era una horrible pesadilla, recuerdo que constantemente repetía "los milagros no existen" no obstante ese pensamiento desapareció cuando te conocí te convertiste en mi mundo, no tengo palabras para siquiera tratar de explicarlo, me encontraba tan perdido/a, tú me indicaste el camino, eres demasiado bueno/a para contarlo, tus palabras fueron mi salvación "me voy a quedar a tu lado, te amare siempre" "caminaré e tu lado incluso si mis pies sangran" solo mantente vivo. Me repetias constantemente.

Mi sombra cada vez es más grande, la verdad no me importa, porque tú me iluminas, tu eres la razón por la que sigo en pie, tu sonrisa basta para alivianar mi dolor, ¿No te has puesto a pensar que somos un poco parecidos? Ocasionalmente siento miedo de todo ¿Porque estoy pasando por todo esto? ¿Cuando terminara todo?

Me reconforta saber que está vez fue solo una horrible pesadilla, ya que ahora despierto y te tengo a ti, en muchas ocasiones afirme tontamente que los milagros eran solo falacias, siento felicidad al decir que aquello que tanto dije es mentira, pude confirmarlo en cuanto llegaste a mi, probablemente no lo sabes pero fuiste la razón por la que me salve, tus simples palabras ayudaron a qué la sombra que poco a poco me consumia se opacara por la luz que tú desprendes.