¿Promesa? [✔️ COMPLETADA] ©

Capítulo 35- Hazel

Corrí hacia el pequeño cuarto donde estaba alojada con Derek, quien me esperaba con su mochila y chaqueta con capucha puestas.

─ ¿¡Por qué te has quedado a ayudarlo!? ─ Bramó.

─ ¿¡Cómo que por qué!? ¿¡Acaso querías que lo dejara ahí, desangrándose y medio muerto!?

─ ¡No joder, pero al menos, haber esperado un poco!

─ ¿¡A qué!? ¿¡A que estuviera muerto!? ─ Bufé. Las lágrimas rodaban por mis mejillas sin consentimiento ─. ¿¡No entiendes que posiblemente ahora esté muerto!?

─ ¿Lo está? ─ Se le rompió un poco la voz a él también.

Tragué grueso y me clavé las uñas en las palmas de las manos.

─ Traté...creo que solo se ha desmayado, o está inconsciente. Aún tenía pulso cuando... ─ Estaba alarmada, asustada y helada por los hechos. No podía dejar de llorar, la imagen de Aaron empapado en sangre y con un disparo en el pecho rotaba por mi mente sin descanso. Derek no me dejó terminar de hablar.

─ ¿¡Le has tocado?! ¡Mierda, Hazel! ¡Prepara tus cosas y vámonos! ─ exclamó furioso ─. ¡Tus huellas están en su ropa!

─ Pero... ─ él no se frenó y yo suspiré y lo tomé del brazo ─. ¿Podemos... ir al hospital a verlo? Los policías y la ambulancia ya se lo han llevado ─ supliqué. Me sentía frágil, devastada.

─ Bien, no sé adónde ir. Pero debemos entrar en silencio y a escondidas. Nadie puede vernos. Y agradece que iremos al hospital a arriesgarnos para ver a tu amorcito ─ bufó enfadado.

─ ¿¡Cómo que mi amorcito?! ¡Le acaban de pegar un tiro! ¡Quiero verle!

─ Cállate y vámonos. No hagas ningún ruido.

♕♕♕

Llegamos al hospital y, de una manera muy extraña, conseguimos entrar.

Haciéndonos pasar por doctores, entrando a la sala de uniformes y robando dos. Me puse la peluca y las lentillas, obviamente.

Pasamos por todas las plantas y cuando por fin encontramos a la familia Real, se me erizó la piel.

─ Cálmate, Vennia ─ el padre de Aaron estaba serio e inexpresivo. ¿Acaso no le importaba que su hijo hubiera estado apunto de morir, en caso de que estuviera vivo?

─ ¿¡Cómo coño quieres que lo haga si mi hijo está ahí dentro y no sé si vivo o muerto?! ─ ella chilló eufórica.

Sus palabras fueron como un alfiler enorme para mi corazón. Mis ojos se llenaron de lágrimas. Aaron podía estar vivo o muerto, y tenía más posibilidades de estar muerto que vivo.

─ Ellos están haciendo todo lo posible para que Aaron sane. Además, él es fuerte, Vennia ─ el padre de Aaron, una vez más, trató de calmarla sin éxito alguno.

Senila la abrazó y esta vez, Vennia se calmó un poco más. En verdad, una parte de mí quiso ir a abrazarla.

─ Todo estará bien ─ dijo ella, aunque todos sabíamos que no.

Un doctor salió de la consulta y me tensé por completo, haciendo mis manos temblar de nervios. Derek trató de calmarme de la manera más natural y disimulada posible. Lo consiguió un poco. Un poquito, nada más.

─ Tengo buenas y malas noticias sobre Aaron. ─ Cada palabra del doctor me ponía aún más nerviosa y tensa ─. La buena, es que pudimos retirar la bala de su pecho...

Expiré, calmada, al igual que lo hizo la familia completa.

─ ... la mala... Es que está en coma. ─ Por un momento, pensé que me desmayaba. ¿En coma? ¿¡Aaron estaba en coma!? ─. Y se encontraron huellas de la reina Hazel en su ropa. Los investigadores se llevaron todas las pistas.