Y sigo pensando, todo estaba mejor que nunca, comenzábamos a hacer las cosas bien, todo empezaba a tomar forma, estábamos en el mejor de los momentos, peros implemente un día la tormenta se desató ¿en que momento se lleno del rayos el paraíso y nos vimos metidos en el caos y la confusión?
¿En que momento se fue todo al diablo? Nadie lo sabe, nadie es capaz de ver exactamente cual fue el hilo que se rompió.
Me he dedicado a buscar el error, he dedicado mis noches y mis días a repasar todos y cada uno de los últimos instantes antes del inminente adiós, para encontrar la falla, para ver quien cometió el error. ¿Fuiste tú? o ¿Fui yo? Aún no lo sé.
Me dedico a mirar el cielo, contando las estrellas, como hacía cuando hablabas del futuro y de lo que nos esperaba juntos. Veo la copa de los árboles siendo atravesadas por finos rayos de sol, como cuando me sentaba a escucharte tocar esa dulce melodía. Me quedo callada viendo las gotas de lluvia que golpean la ventana, como cuando nos quedábamos en casa a ver películas.
Todo me trae recuerdos: buenos, como aquel gorro gris que detesto hasta el infierno y aún así nunca dejarás de usar, como tu sonrisa a medio día o tu risa al anochecer. Malos, como nuestra primera pelea, las veces que me llegaste a lastimar con tus palabras. Tristes, como todas y cada una de las veces que te he perdido.
Ya ni siquiera llevo la cuenta, porque siempre digo que es la última, pero siempre regresas y volvemos a empezar.
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Letras y café para ti. (2)
RomansaAlguna vez me pediste que escribiera cartas para ti, pero yo no soy de las que trabaja bajo encargo, cariño. Sin embrago, me he dado a la tarea de escribir para ti, te dejare cada una de estas cartas, para que nunca olvides ese "algún día", para que...