Daiyō -Kookmin-

Three

A la mañana siguiente, Jungkook se encontraba solo en la espaciosa cocina preparando algo para comer.

Ya llevaba un par de horas despierto, de hecho ya había desayunado y aunque trató de despertar temprano al omega, éste balbuceó un poco, rodó sobre la cama y volvió a quedarse dormido. Eran casi las diez de la mañana, se despertó a las seis ante el sonido de su alarma que olvidó apagar.

La noche había estado movida, no salieron de la cama hasta que Jimin quedó rendido y Jungkook pudo ir al baño a hacer sus necesidades, aunque Hoseok le había dicho que debía hacer que Jimin comiera, no se atrevió tampoco a levantarlo, así que ninguno de los dos cenaron.

Era por eso que estaba preparando mucha comida, solo esperaba que el omega no se molestara por tomar unas cuantas tiras de tocino, huevos para hacerlos estrellados, hizo un batido de banana con leche y cortó unas cuantas frutas en cuadritos.

Estaba colocando el plato en la isla cuando el dulce aroma del omega llegó a él, alzó la mirada hacia la entrada de la cocina justo para ver como el peliazul ingresaba, con el cabello desordenado, frotándose los ojos con ambas manos... Y desnudo.

-Buenos días Jimin.-dijo en un tono cordial.-Hace frío ¿Por qué no regresas y te pones algo de ropa?

El omega le ignoró y caminó hacia él para hacerse espacio entre sus brazos y frotar su nariz entre sus pectorales, en donde inhaló profundo.

Jungkook podía sentir la erección del peliazul contra su entrepierna, sus manos se posicionaron en la espalda del omega y acarició un poco.

-Te he preparado desayuno, disculpa por tomar los ingredientes sin tu autorización pero, creí que tendrías hambre al despertar.

Jimin alzó el rostro y dejó un fugaz beso sobre los labios del alfa, todo parecía bastante normal e inocente, quitando el hecho de la desnudez del omega, por supuesto, pero cuando el menor trató de meter sus manitas dentro del pantalón del mayor, Jungkook tuvo que detenerlo.

-Come primero.-pidió al escuchar el quejido de Jimin.

-S-Si a ti.-murmuró Jimin pasando sus manos por el abdomen marcado de Jungkook por debajo de su suéter.

El castaño rió y tomó las manos de Jimin entre las suyas.

-Seré tu postre ¿Qué te parece?-quiso negociar y Jimin refunfuñó.-Vamos, debes comer, pero antes hay que buscarte ropa.

-Ropa no.-dijo Jimin de inmediato.-Luego tardarás para quitármela, pero, podrías prestarme tu suéter.

Jimin jugueteó con el cuello en v de su suéter gris y Jungkook suspiró, hacía frío pero él podría aguantar.

-Está bien.-terminó diciendo.

Jimin se alejó un poco de su cuerpo, mirándole atento mientras que Jungkook empezaba a quitarse su suéter, ya cuando lo tenía prácticamente fuera, Jimin le sorprendió.

El omega se presionó contra su pecho y con sus labios rodeó su pezón marrón, succionando suavemente, a Jungkook le recorrió un escalofrío en todo su cuerpo, su suéter terminó en su brazo izquierdo mientras que con la otra mano sujetaba el rostro de Jimin.

-Pequeño travieso.-murmuró.

Jimin pasó su lengua en su pezón erecto y cuando estaba por pasarse al otro, algo cayó sobre su cabeza, cubriendo su rostro, se quejó de inmediato.

-No te pases de listo, lindura.-dijo Jungkook mientras acomodaba el suéter en la cabeza de Jimin para luego tomar sus brazos y adentrarlos en la suave tela.-Primero hay que comer, te lo dije.

Jimin puchereó, su cabello tapó un poco sus ojos ante los movimientos previos con el suéter.

-Pero, te necesito.-murmuró, sus ojos adquiriendo un brillo que desconcertó un poco a Jungkook.

-Y aquí me tienes.-murmuró de igual forma Jungkook, sujetando el rostro del omega con ambas manos.-Voy a cuidarte y complacerte, dentro de los cuidados están el encargarme de que te alimentes bien.

Jimin entrecerró los ojos y le miró fijamente, su rostro empezó a sonrojarse y no volvió a quejarse, en cambio sus manitas sujetaron las del alfa y le sonrió.

-Si-Siéntate conmigo, alfa.-pidió el omega.

Jungkook alejó sus manos del rostro de Jimin y éste separó la silla que estaba frente a la comida, para luego palmear el asiento.

-Siéntate tu, yo ya comí, pero estaré aquí para acompañarte.

Jimin puchereó y tomó la mano del alfa, sin dejar de palmear el asiento, lo jaló para acercarlo y Jungkook suspiró.

-De acuerdo, tu ganas.-dijo y se sentó donde le pedía el omega.

Jimin no perdió el tiempo y se sentó en su regazo, tomó el tenedor que estaba sobre el plato con los huevos y las tiras de tocino y se lo extendió al castaño.

-¿Qué? ¿Quieres que te alimente?-preguntó divertido, tomando el tenedor con lentitud.

Jimin asintió y abrazó por los hombros a Jungkook quien empezó a alimentar a Jimin de apoco.

Se mantuvieron en silencio, para Jungkook fue bueno saber que Jimin no sería un omega difícil de tratar, era obediente y tranquilo, de igual forma tenía un encanto peculiar, uno difícil de ignorar al igual que su ternura, aquel omega era una joyita que sabía su alfa destinado apreciaría cuando se encontraran.

Cuando Jungkook se estiró un poco para alcanzar el platito con frutas, Jimin volvió a sorprenderle, pero esta vez actuó rápido, los dientes de Jimin habían rozado la piel de su cuello, Jungkook se hizo hacia atrás cuando hubo una pequeña presión y el omega tuvo que separarse de inmediato.

-Cuidado con esos dientes.-dijo, tratando de escucharse tranquilo.

-Pero quiero morderte.-dijo Jimin obstinado, cruzándose de brazos.

Jungkook sonrió ladino y besó la mejilla del omega.

-Bien, pero no puedes morderme el cuello, sabes lo que eso significaría.

-Una marca.-dijo de inmediato.-Quiero marcarte.

Jungkook tragó saliva bastante sorprendido, aquello no debería afectarle ya que Hoseok ya le había avisado sobre aquello, sin embargo lo hizo, algo se removió en su interior al ver la sinceridad en los ojos del omega, parpadeó repetidas veces y desvió la mirada, carraspeando un poco.

-Marcarás a tu alfa destinado.-terminó diciendo en un tono apagado.-Reserva esa marca para él apuesto a que debe estar esperando por ti.

Jimin bajó la mirada y suspiró.

-No lo creo.-murmuró y antes de que Jungkook dijera algo al respecto, volvió a hablar.-Dijiste que me complacerías.

-Pero no puedo complacerte en eso, pequeño, lo siento.-se disculpó.-¿Qué tal si terminas de comer y nos damos una ducha juntos?

Jimin sonrió de inmediato, interesado en la propuesta, asintió besando el cuello del alfa (el cual le pertenecería cuando menos se de cuenta Jungkook) y movió sus pies con emoción.

Volvieron a sumirse en silencio, pero el ambiente se sentía diferente, ambos estaban ansiosos por terminar y fundirse en el cuerpo del otro las horas que fueran necesarias.

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Holiiis, solo avisarles que estoy copiando y pegando en si los capítulos entonces realmente no les estoy revisando la ortografía, de antemano me disculpo 😖

Los amo ❤️