46 ♥︎

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Scarlett no había querido dormir conmigo. 

Creo que durmió en la sala, todo un drama.

Salí temprano en la mañana, ya ella no estaba a mi lado. Ni un mensaje dejó, muy inmaduro de su parte.

Decidí ponerme ropa de ejercicio, le puse el collar a Sparky y fuimos hasta un parque que había cerca de la casa, pero antes pase por un pequeño café que había allí. Me recordaba al que iba todo el tiempo cuando vivía en el apartamento.

En el cual vi a Scarlett...

Me senté en un banco debajo de un árbol, la sombra acariciaba mi rostro y Sparky jugaba con los otros cachorros.

No me sentía tan bien hacen meses. Acaricié mi vientre, desearía tanto que ella estuviese aquí. 

No sé qué nos sucedió, fue una pelea tonta y sin sentido. 

- ¿Cuántos meses tienes? -Una chica se sentó a mi lado.

Tenía el cabello rizado y una sonrisa impecable.

- Pronto tendré tres meses -asentí mirándola, tuve que entrecerrar mis ojos, el sol pasaba las hojas del árbol azotándome en la cara. 

- Es lindo -dijo moviendo sus piernas- ¿Sola aquí? 

- Eso es algo que solo preguntaría un secuestrador -reí nerviosa.

- Oh no, no -rió nerviosa- Perdona la pregunta, soy Tatiana por cierto. 

- Elizabeth -le di una sonrisa. 

Sparky corrió hacia mí al verme un poco tensa, la chica era amable, pero su pregunta me incomodó. 

- ¿Es tuyo? -trató de acariciarlo, pero el se tensó y gruñó.

- Hey, muchacho, todo está bien, sé amable -acaricié su cabeza- Sí es, se llama Sparky. 

- También tengo un cachorro -señaló un poco a lo lejos, era un pequeño chihuahua color crema.

El pequeño trataba de tomar agua del bebedero, pero era tan pequeño que no podía.  

Ella lo llamó y él comenzó a correr de manera rápida y torpe hacia ella. 

- El es pancho -lo tomó en sus manos para enseñármelo. 

- Qué lindo eres -acaricié su cabeza.

Sparky comenzó a hacer ruidos extraños.

- No estés celoso, te quiero tanto -le acaricié la cabeza. 

- ¿Quieres ir pon un helado? -me dio una sonrisa.

- Ummm -reí nerviosa- Tengo que volver a casa -le puse la correa a Sparky poniéndome de pie- Fue lindo conocerte.

Comencé a caminar, podía sentir su mirada aún en mi espalda, qué sensación tan extraña, puedo jurar que me esta coqueteando, pero eso sería...

- Disculpa -dijo corriendo tras mío- Ten, por si cambias de opinión -tendió un papel enrollado, parecía que estábamos haciendo cosas ilícitas. 

- Gracias -le dije sonrojada.

Seguí mi paso de manera tranquila, pensé que era un paparazzi, pero no, resulta ser que ahora tengo vibra de lesbiana y que me coquetean en la calle cuando me ven.

Llegué a casa, dejé a Sparky correr sin correa hasta la puerta, no estaba acostumbrado a tenerla, nunca había salido de casa.

- Buen chico. 

El auto de Scarlett estaba en la entrada, respiré profundo porque estaba decidida a acabar con nuestra pelea sin sentido de ayer. 

La busqué en la cocina, pero no estaba, al pasar por la puerta del patio percibí el olor a cigarrillo de inmediato, respiré profundo varias veces antes de tenerla de frente.

¿Solo es actuación, no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora