De que diablos va esta historia? Realmente ninguna mujer me había impactado tanto como aquella chica, tan ángel y posedora de toda mi atención, apartir de esa sonrisa que intercambiamos. No entendia mi reacción irracional, y por dentro mis latidos eran fuertes y precisos, me amenazaba con su mirada y yo sentia estallar en extasis ante su presencia, subita y veloz me hacia suya con cada gesto que hacia mientras yo, solo le miraba.
No, tu ni siquiera sabras que noche tras noche despierto, buscando encontrarte entre mis sabanas, que te recuerdo cada día, de forma insistente, que cada domingo lloro por ti buscando una explicación a tu adios, de todas las cartas que hasta el día de hoy no he dejado de escribir, y lo haré, toda la vida que me reste en este misero mundo, cuanto tiempo más habra de pasar para poderte olvidar? Tú de que vas...