Unas Historias de rol

Capítulo 3: Nieblaopaca

Érase una vez, un pueblo como cualquier otro, con sus prados y sus montañas, su puerto, y su mercado.

Durante el día, era un pueblo lleno de paz y tranquilidad. Con marabunta en sus mercados y demas comercios. Nieblaopaca destacaba por por tener un puñado de pueblerinos pero con productos de gran calidad. Tenían un alcalde llamado Mat Halocorn. Su carismática picardía contrastaba bien con su buen corazón y sus cuernos de fauno, los cuales eran dignos de su apellido al formar tan perfecto halo en su cabeza.

En las noches, en este pueblo destacaba con relatos de historias y leyendas alrededor de la hoguera de la chimenea sobre héroes que hacían frente a peligros como críminales, accidentes y extrañas criaturas que abundaban y abundan por nuestro mundo. Tras lo cual se ohia un leve ruido de un cascabel, esto hacía que la piel de quien lo oyese se pusiese de gallina. Esto era gracias a hermanos jugueteros Jajar y Rison que se ganaban unos cuartos haciendo estás historietas.. Jajar era quien ideaba las historias y Rison ayudaba con su arte con diversos juguetes y instrumentos.

Un día un carruaje llegó al pueblo, una mujer de cabello rojo como la sangre salió del carro decía ser la nueva dueña del pueblo, y que formaría un reino aquí. Decidió enseñar magia a su pueblo, y a cambio de casaria con el que más destaque entre todos tras la eseñanza.

Esto obviamente generó interés entre todos, menos entre los dos hermanos. Estos últimos no estaban interesados más que en sus historias y creían que no serían aptos para la magia. Aún así debían ir.

Varios prodigios de familia intentaron probar suerte y sacaban algún truco bien. Lo cual al estar muy parejos empezó a haber tensión dentro y entre varias familias, y surgieron competiciones para a ver quién lograba el trono.

Alice, sin embargo, animo al pueblo a seguir probando. Y cuando vio a los hermanos, sintió algo. No tenía muy claro que podía ser... pero, algo le llamó la atención ellos.

Pocos días después, una niebla se ciño sobre el reino. Se decia que esa niebla estaba maldita y quién entrase se perdería por la eternidad. Una niebla tan expresa que pasaron años y no se iba, al menos hasta hace unos días. Unos pueblerinos de las fronteras vieron que la niebla parece haberse ido parcialmente. Una mujer salió de ahí y les ha entregado una cara para transmitir un mensaje: Tras 20 años el país de Nieblaopaca, que estaba totalmente inaccesible al resto del mundo, ahora está accesible y esperando a grandes héroes que puedan admirar este increíble y portentoso pais.