I "hate" you

☆1☆

Hace mucho tiempo, hubo una isla, que por sus esfuerzos, era muy famosa y reconocida, porqué en esa isla, no era una cualquiera, era una, en la que, demostraban... que los dinosaurios existian.

Todo tipo de dinosaurios, algo que a muchos les fascinaba, interesaba o asustaba. Pero, nadie sabía las intenciones de ese lugar.

Nadie sabía que unos seis niños, iban a lograr sobrevivir, mantenerse juntos, después de todo lo que pasaron, su esfuerzo fué válido.

Muertes, terror, misterio y más, pero fue excluida la diversión. Nadie sabe lo que pasó en esa isla, pero lo que si saben, es que no quieren verla ni en pintura.
Pero... todos tenemos un equilibrio, ¿no?

Había un niño, la primera victima en el accidente en metro, se quedó confirmado, que logró salir de ahí con vida, comos los cinco, pero, hace dos años, se informó a todos los ciudadanos de California, Texas y mas países o ciudades, que aquella victima, se reporta desaparecida.

Quien sabe, no saben si vivió o murió, pero lo que se sabe, es que perdió su equilibrio...

◇En el presente◇

En la sala, se encontraba una mujer llorando, se le veía de unos 48 o 51 años, cabello castaño y ojos verdes, y llevaba un foto en mano.

La foto mostraba a ella cargando a un bebé, que parecía tener cinco o cuatro meses, y al lado de la mujer, un hombre que a la vista se veía buen hombre, y lo era.

La mujer volvió a ver la foto, y volvió a romper en llanto, que si eran fuertes los lamentos anteriores, no era comparado.

La mujer apenas podía abrir los ojos, y de sus labios arrugados y rojo de tanto golpearse, salió de la boca un:

"Ben..."

-¿Por qué tuviste que irte, cariño? ¿Por qué Dios, me quitaste a lo único que tengo...?-

Decía la mayor en llantos, lo único aue tenía se lo llevó el viento.

Pero no se iba a rendir, se secó las lágrimas, que aunque seguían saliendo, se las secaba, se levanto de su sofá, que llamaba su prisión y se dirigió al teléfono.

Abrió de un cajon cinco números con unas iniciales:

"D, B, S, Y, K"

Los marcó, y lo único que pudo decir fué:

-¿Conocen a Benjamin Pincus?-

-Sí, fué uno de los integrantes de nuestro equipo...-

-Por favor, se lo ruego, a ti y a sus amigos, regresen a Isla Nublar-

-¡¿Qué?! ¡Señora ese lugar esta ya prohibi-!-

-¡Se que se llevaron a mi hijo a ese lugar de mierda, y no quiero volver a perderlo, necesito ayuda!-

Gritó fuerte, volviendo a llorar, su esperanza la iba a abandonar, como lo hizo el amor de su vida..

-Haremos lo posible-

Y colgó, la mujer, empezó a gritar, pero de felicidad, por fin, alguien que la ayude, y no deje que sus pesadillas se la lleven...