Una última vez

"Calm Down"

Catherine 2022

Desperté como siempre para comenzar mi día, tenía compromiso real hoy, un día antes había escogido lo que me pondría y llevaría mi cabello lacio así que solo tenía que tomar un baño y bajar a desayunar. Lo hice en el mayor silencio posible porque William aun dormía y quería dejarlo descansar. Me moví poco a poco desenroscando su cuerpo del mío y cuando por fin pensé que era libre lo escuche suspirar, era trabajo imposible que él siguiera durmiendo después de yo salir de la cama.

―No abras tus ojos todavía, quiero que descanses otro poco ¿Vale?― le dije poniendo las manos en su cara y acariciándola.

―Sabes que después que tú sales de cama, a mí se me va el sueño― su voz recién levantaba siempre era algo tan sexy.

―Solo quédate allí, Will... descansa― él asintió y solo tomo mi almohada para abrazarla como oso. Nunca le tuve tanta envidia a una cosa, hice puchero y camine al baño.

Me aliste y maquille, cuando salí William se había despertado por completo, sus ojos azules me miraban fijamente con esa sonrisa juguetona en el rostro, se levantó y me dio un abrazo para luego dejar un beso en mi frente, sonreí ante aquello y solo nos distanciamos para poder iniciar con nuestras cosas, a él le tocaba llevar a los niños a la escuela hoy y pasarlos a retirar después de eso, yo llegaría después de mediodía. Me prepare un té y luego de unos diez minutos William apareció aun en pijama pero con la cara lavada, entre ambos comenzamos a prepararle la lonchera a los niños.

―Déjame hacer algo, William― negó con su cabeza mientras me quitaba la espátula para voltear los hotcakes.

―Ya estas lista para irte y no quiero que manches tu vestido... estas hermosa hoy como para arruinarlo con mezcla para hotcakes― ladee la cabeza y solo me puse de puntitas para dejar un beso.

―Vale, pero al menos déjame armar su lonchera y no irme con la culpa de que no hice nada por ellos hoy― asintió y me puso todo en la mesa para comenzar a prepararlas, conocía a mis hijos y sabía que unos hotcakes no los llenarían así que metí un par de galles, una fruta y su agua junto al jugo. Sentí las manos de William rodearme por la cintura cuando cerré la última lonchera.

―No tienes por qué sentir culpa, eres la mamá más entrega, dulce y responsable de todas― me tenía completamente pegada a su cuerpo y solo pude sonreír para entrelazar sus manos con las mías― Los niños y yo somos afortunados de tenerte, así que nada de culpas. Aunque sé que no lo puedes evitar.

―Eso... solo no lo puedo evitar― reí y él jugaba con mi anillo de compromiso― aunque se siente bien cuando dices que soy una buena mamá― giro mi cuerpo y tomo mi cara con sus manos.

―Lo digo porque lo eres... eres la mamá más cool, entrega y sexy de todas― levante una de mis cejas y él rio. Sin pensarlo dos veces uní mis labios a los suyos y podía sentir como todo mi cuerpo levitaba de amor por él. No sé en qué momento termine subida en el mesón con William entre mis piernas besándonos de una manera desenfrenada.

―Will, amo cuando aprovechamos... el día desde muy temprano... pero tengo que irme― le decía entre besos.

―Un día de estos me vas a volver loco con tantas erecciones que me dejas en su punto― mire a sus pantalones de pijama y si, en efecto estaba muy abultado, me mordí el labio y luego sacudí la cabeza para concentrarme.

―Prometo compensarte, te amo― me baje de la encimera y comencé a salir de la cocina― subiré para darle un beso a los niños y luego me iré.

― ¡No has comido nada todavía!― me dijo fuerte para que escuchara porque ya iba escaleras arriba.

― ¡Pues estaba muy ocupada besandome contigo! ― le respondí de regreso y pude escuchar su risa tonta.