Harry Styles || Butterfly Tattoo

Capítulo 1

¿Cómo es que las nubes se mueven tan rápido?

Lo sé, a veces comienzo a pensar cosas sin mucho sentido, pero eso me sucede cuando estoy tan aburrida ¿raro no?, quién se aburre cuando acaba de salir de vacaciones de invierno, pero gracias a mi lindo padre -pensé sarcásticamente- no puedo salir de casa porque estoy castigada por mi buen comportamiento. No puedo ir a las casas de mis amigos, al centro comercial, ni siquiera a casa de mi abuela. Observé desde mi ventana el jardín, mi habitación daba hacia la casa de la vecina. Está sacando sus esculturas de hipopótamos, -si que son muchas- creo que siempre compra más, más y más de esas feas esculturas porque intenta comunicarse con sus antepasados, porque sí uno compara a la señora Ilizarituli;

no, así no era

Irilaziturri

no tampoco,

nunca he logrado decir el apellido de esa mujer,

I-Li-Za-Li-Tu-Rri

Al fin.

Comparar a la señora Ilizaliturri con un hipopótamo, parecen hermanos perdidos. En verdad odio a esa señora, era una total molestia, era un grano en el trasero. Pero sólo para mí, porque para los demás vecinos y para mis padres, era "una pobre anciana solitaria". A mi siempre me irrita, no me deja pasar por su acera, me dice que baje el volumen de mi habitación cuando ni siquiera he puesto música, y cada vez que se le secan las plantas, dice que es por las "malas vibras" que yo tengo... Maniática.

Tengo una idea. Busqué mi celular, que para variar no tenía idea donde estaba, levanté una bota y ¡Bingo!, ahí estaba el maldito aparato. Marqué y contestó.

-¿Hola?

-Perrie soy yo, Peyton.

-¿Cuál Peyton?

-Idiota, -reí- no te llamaba para que saber cual Peyton soy, te llamaba para decirte que la vecina está sacando a sus hermanos al patio... -no me dejó terminar.

-¿Las figuras gigantes de hipopótamos?

-Exacto -dije mientras observaba que la señora había terminado de sacar las figuras y se estaba yendo en su coche.

-¿Y qué tengo que ver yo?

-Qué tengo lista nuestra primera obra maestra de nuestras vacaciones.

-Pero Peyton, recién ayer acabamos de librarnos de esa maldita cárcel ¿Y ya quieres comenzar con mas líos?

-¿Qué acaso ya no te gusta armar problemas conmigo?

-No es eso, es que estoy muy agotada, las vacaciones son para descansar mi querida Peyton.

-¿Agotada de hacer nada? -la molesté.

-¿Cómo que de hacer nada? -dijo ofendida-, ¡El mocoso con cara de gnomo no me deja descansar ni un maldito segundo!

Ella es Perrie, tenía un odioso hermano pequeño de 7 años, me daba risa, ya que ese mocoso podría ser un payaso de circo, aunque a veces dan ganas de tirarlo por la ventana.

-Ya perdón, pero ¿Por favor? -supliqué.

-No -dijo firme.

-Por fa.

-No.

-Por fis.

-No.

-Por favorcito.

-No.

-Por fu.

-¿Cuántas maneras de decir por favor conoces? -preguntó ya harta.