Canción 1
El Castillo Negro
El Castillo Negro era la sede de las Capas Negras, una organización formada tras la última gran guerra entre el Reino y la Alianza. Este se encontraba en la frontera de ambos territorios y se decía que en su momento había sido usado como bastión por una civilización ya perdida.
La orden estaba fundamentalmente compuesta por voluntarios y había sido creada con el propósito de ayudar a la gente común. Lo cual incluía desde trabajos pedestres hasta servir de mediadores para evitar futuros conflictos a gran escala. Por supuesto, había lugares en los que eran bienvenidos y en otros no tanto, después de todo varios de estos nobles fundadores eran anónimos y ciertas facciones dudaban de tanta caridad.
En la orden había varios rangos de importancia y estos eran: recluta, tercera capa, segunda capa, primera capa y el líder.
En ese momento un combate de práctica se llevaba a cabo en el patio del castillo. La primera capa Laila (grado otorgado a solo una persona que servía de mano derecha del líder) estaba entrenando a algunos de los nuevos reclutas, menos experimentados.
"Glacie" Usando un hechizo de hielo congeló los pies de uno de ellos y detuvo su gran espada mágica a solo centímetros de golpearlo.
"Deben ser más rápidos, ¡si se encuentran con usuario de magia de hielo como esta, estarán muertos en segundos!" La hermosa mujer hablaba con determinación y fuerza.
"¡Sí, señora!"
Los reclutas asintieron más atemorizados por el ímpetu de Laila que convencidos de lo que dijo.
"Tan vigorosa como siempre eh"
"Nunca deja de sorprenderme, ojalá fuera mi novia..."
"Jajaja, ni lo sueñes, no tienes oportunidad"
Dos de los que observaban la pelea conversaban sorprendidos por la habilidad de la hermosa mujer.
"¿No crees Hiroshi?
"Ah, sí..." El hombre le contestó con desgano.
Otro de los que estaba en el lugar en cambio no se encontraba tan sorprendido, estaba comiendo unas raciones de pan mientras parecía perdido.
"Aff, otro que siempre está igual es Hiroshi"
"Sí eh... me pregunto si habrá algo que lo haga cambiar de expresión"
El hombre del que conversaban, Hiroshi Bluewolf. Era uno de los miembros de la orden, había llegado a segunda capa en solo unos pocos años, todo un logro pero por varias razones no era ni de cerca tan popular como Laila. Tenía veintiún años, su pelo negro le llegaba por detrás a la base del cuello, era alto y sus ojos eran negros. Bueno, al menos el único que se podía ver. El otro estaba cubierto por un parche y se decía que lo había perdido durante un incidente en la última guerra. Él no hablaba mucho sobre su pasado, de hecho no hablaba mucho en general y esto había logrado que la mayoría se auto persuadiera de no preguntarle.
Mientras seguía allí un hombre se le acercó por detrás.
"Hiroshi, el líder me ordenó que te llamara"
"Vaya... ¿en serio?" Hiroshi lo miró.
El hombre le asintió con una cara que parecía decir: '¿Por qué te diría algo así en broma?'