desafortunadamente afortunado

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Se sentaba sobre la cama alrededor de quince minutos antes de ser capaz de realizar cualquier acción, como si su cuerpo necesitara volver a acostumbrarse al hecho de que debía existir más allá de actuar en automático, se paraba frente al armario y se preguntaba si sería correcto volver a usar la camisa que layla le había comprado, porque luego de usarla el día anterior, incluso con la mirada de confusión —y tal vez desaprobación— que su padre le había lanzado, no recordaba la última vez que se hubiese sentido así de bien vistiendo algo. Estaba limpia, porque llegando de la escuela se había asegurado de lavarla, priorizandola incluso sobre el sentarse a comer.

Escuchó como tocaban la puerta de su habitación lo cual lo hizo sobresaltarse, apretando con fuerza la camisa como si alguien hubiese intentado arrebatarsela. Suspiró con algo de pesadez tratando de mantener la calma cuando escuchó la voz de su madre del otro lado, dejó la camisa sobre la cama antes de dirigirse a la puerta para abrirla.

—¿Puedo pasar?

—Estaba por cambiarme, lo siento si estoy tardando —comentó en voz baja, sintiéndose menos lleno de energía que de costumbre.

—No vine por eso —aclaró con calma, cerrando la puerta detrás de ella al entrar—, vengo para que hablemos, Will.

—¿Hablar? ¿Sobre qué?

—Eso no lo sé —Tomó asiento sobre la cama, justo al lado de la camisa aunque, a diferencia de su padre, a ella no parecía importarle demasiado— ¿Hay algo de lo que quieras hablar conmigo? siento que algo está pasando, pero no soy adivina, por más que quisiera serlo, no puedo leer tu mente.

Will se mantuvo en silencio por unos largos segundos, sabía que no era el mejor cuando se trataba de ocultar los problemas, tal vez porque no lo estaba intentando con las suficientes ganas, pero no esperaba que su madre, o cualquiera en realidad, le preguntara de forma tan directa sobre sus problemas ¿Qué debía decir? "nada" significaba mentir, porque claro que algo ocurría, el problema es que no podía explicarlo, cada vez que trataba de aclararse esa duda a si mismo, se enredaba con las palabras, como si no fuera capaz de hallar las correctas para decir que se sentía como una persona miserable y estaba harto de seguir con la vida que estaba teniendo.

—No pasa nada, ma —aseguró con una sonrisa—, solo han sido días tediosos en la escuela, ya sabes, los proyectos, los trabajos, lo pesado que es el entrenador boomer con sus clases —mintió tratando de dar la respuesta más acercada a la realidad, porque en parte era cierto, la escuela lo había estado abrumando demasiado, pero también sabía que eso era debido a algo más personal que no conseguía solucionar.

—¿Estás seguro que solo es eso? puedes hablar conmigo de lo que sea, Will, quiero que confíes en mí.

—Lo hago mamá, te prometo que no es nada del otro mundo —Tomó su mano en busca de hacerla confiar, pero ni siquiera él era capaz de creer sus palabras.

Notó la duda en su mirada, pero ella no insistió más, quizás porque sabía que no conseguiría hacerlo "decir la verdad" o tal vez solo quería intentar confiar en las palabras de su propio hijo, Will quería decirle que no estaba equivocada, que algo estaba pasando pero, después de eso ¿Qué más diría? ¿Cómo le explicaría algo que ni él mismo comprendía del todo?

—Está bien, te dejaré para que te alistes, baja pronto para que desayunes —pidió con una pequeña sonrisa antes de levantarse para salir de la habitación.

Will estaba solo una vez más con sus problemas, comenzó a desvestirse, no le había prestado atención hasta el momento, pero quizás la combinación de blanco, rojo y azul estaba más presente en su vida de lo que creía, había quitado el cubre colchón, dejando solo la sábana blanca debajo, sus cobijas también tenían esa combinación, su cepillo de dientes, la toalla de baño; tenía al menos una prenda de cada categoría que contara con la mezcla de los tres, tenis, camisa, sudadera, suéter, chamarra, ropa interior. Maldijo una y otra vez cuando intentó deshacerse de unas cuantas cosas solo para terminar dándose cuenta que, sin importar lo que hiciera, siempre aparecería algo más y no podía solo tirar todo su closet porque los colores lo hicieran sentir incómodo.

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⏰ Última actualización: Nov 24, 2022 ⏰

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CAN YOU FEEL MY HEART? | will x warrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora