—Sube —fue la única instrucción que salió de los labios de Taehyung, en un tono de voz bajo y peligroso. Los ojos de Seokjin volvieron a picar, con las inmensas ganas de llorar, luchando con su fuerza para retenerlas.
—Tae... no es lo que estás pensando... —intentó hablar nuevamente. Necesitaba despejar cualquier duda o sospecha que se estuviera formando anticipadamente en la mente de su prometido, sabiendo de sobra cómo pensaba el pelinegro.
—Dije que te subieras —repitió, más ansioso. Entonces, extendió una mano hacia él, cuando vio que se movía hacia el lado del copiloto. —Las llaves —exigió. Y si la situación no fuera tan jodida como lo era, Jin hubiera encontrado aquella expresión de cejas fruncidas, combinada con su voz demandante, algo muy caliente. Sin embargo, ahora sólo pudo seguir sus órdenes y darle las llaves, para luego rodear el vehículo y sentarse de una vez. Pensándolo mejor, era preferible hablar de lo sucedido lejos de su lugar de trabajo, donde los chismosos oídos de sus colegas no pudieran enterarse de nada.
La puerta de Taehyung se cerró sonoramente, cuando éste se subió, tirando las carpetas olvidadas sobre el techo del vehículo, al asiento trasero, sin preocuparse por ser cuidadoso con ellas. El motor rugió al giro de la llave y salieron del parqueadero. Tae no llevaba mucho tiempo desde que obtuvo su permiso para conducir, por lo que, aunque pareciera deseoso de pisar el acelerador a fondo, sólo para desahogar su frustración, fue prudente, respetando las señaléticas y la velocidad establecida.
—¿Por qué demonios no me dijiste lo que estaba pasando? —la pregunta salió en un gruñido, prácticamente y Jin se masajeó la sien derecha con agobio. —¿Por qué tuve que enterarme por terceros? ¿Eh? —aunque no estaba elevando su voz, al castaño le sonaba como un regaño.
—Lo que viste, fue la primera vez que pasó —intentó ser tan claro como podía, a través de su estado de nervios. —Yo... te juro que la situación no era así de grave, por eso... pensé que podría manejarlo por mi cuenta... es sólo que...
—¿Qué? —exigió. —¿Te das cuenta en el problema que hubieras estado si yo no llegaba a tiempo? —la demanda en sus palabras, cambió a sincera preocupación. —¿Olvidas acaso que tuviste una cesárea hace sólo unos meses? —aprovechando el semáforo en rojo, Taehyung le dio una mirada compleja, con sus cejas bajando en una expresión de angustia y un brillo similar al de lágrimas contenidas. —Aun no estás recuperado totalmente, ¿cómo ibas a defenderte si él te golpeaba? ¿y si el mocoso ese fuera un psicópata? ¿qué hay de los niños? ¿qué hay de mí? —continuó, posando una mano en la suya, que reposaba sobre el regazo. Su tono se suavizó y tambaleó, como si le costara hablar en este punto. —Yo no me perdonaría que algo te pasara... no podría vivir sin ti...
—Tae... —Jin estiró su mano y acarició la mejilla de su prometido. Éste cerró los ojos y se apoyó en su toque, restregándose contra su mano como un cachorro.
—A él no le hubiera importado nada, con tal de aprovecharse de ti —insistió. —¿Escuchaste todo lo que dijo después?
—Sí... pero, nunca fue así —explicó. —Yo le dije que estaba casado, que tenía dos hijos maravillosos y una vida feliz... —detalló, para calmar el corazón agitado de su prometido. —Que debía dejar de pensar más allá conmigo, porque yo jamás le correspondería... —negó con la cabeza, suspirando. —Por eso, él reaccionó así...
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Ni tan JUNTOS, ni tan REVUELTOS - YoonKook/NamKook
Fanfic[TERMINADA] La vida te da sorpresas, y Jungkook se llevó la más grande de todas, al enterarse que sería padre. ¿Podrá llevar la paternidad con su ex, y mantener su relación amorosa con su actual novio? [Spin Off de "JUNTOS, pero no REVUELTOS"] ADVE...