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Ahora que estoy en mi último año de carrera pienso que debí aprovechar mucho más los años anteriores para escribir y hacer las cosas que me gustan en general ಥ_ಥ JAJA, regresenme a la escuelita per favore.

Pero bueno, en fin, espero les agrade la lectura❤(ˆ‿ˆԅ)



Desde hace un par de meses que consiguió un trabajo nuevo, no era lo que le encantaría pero tampoco puede quejarse, le pagan bastante y sinceramente es hasta más de lo que deberían pagarle a un mero chófer así que por ese lado no puede quejarse. Tampoco puede quejarse de su horario de trabajo ya que lo llaman solo por la mañana y en ocasiones por la noche, además de que le dan el auto todo el día, no anda paseando por todos lados pero sí le facilita muchas cosas.

El hombre que lo contrato es otro ricachón de la ciudad aunque no es a él a quien está llevando y trayendo, solo cuando tiene viajes de negocios que lo tiene que movilizar hasta el aeropuerto que sería la mayoría de las veces, es raro que esté más de dos días en su casa... A quien realmente va a buscar es a la prometida del mismo, él no es de meterse donde no lo llaman pero los últimos días se ha estado preguntando cómo la señorita soporta estar con ese hombre, no es que lo ha visto tratarla mal o hablarle mal, por el contrario, cuando los ve juntos la trata como si fuese una mismísima reina.

Que sería una vez cada... No sabría decir, quizás ¿una vez cada dos semanas? No está del todo seguro.

Ha perdido la cuenta de las veces que la ha ido a buscar de una fiesta o restaurante solo porque el gran señor no llego a tiempo de viaje y la deja plantada, trata de no verla por el retrovisor pero es casi imposible sus orbes negros no terminen en esa señorita, nunca la ha visto llorar, solo ve esos orbes violeta perderse a través de la ventana, no tiene que ser un genio para saber que eso debe lastimarla sin embargo no es algo que ella exteriorice por completo, tampoco es que son los mejores amigos como para que le cuente sus problemas, hablan pero de vez en cuando y porque ella comienza a sacarle conversación del resto trata de evitar cualquier otro tipo de platica, como ya ha dicho, no son sus asuntos y menos porque es algo de pareja... Aunque si es sincero ha estado a nada de decir algo que no debería por lo que ha tenido que morderse la lengua un par de veces y es que... 

Se pregunta cómo una mujer tan bonita e inteligente puede estar con un hombre así, la respuesta más obvia que ha encontrado es el dinero no obstante ella es muy sencilla y nunca despilfarra así que no entiende, duda conseguir una explicación, solo deberá seguir fingiendo que no ve ni oye nada.


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No tenía ni media hora de haberla llevado a una exposición de arte y ya estaba recibiendo mensajes de que la fuese a buscar, no tiene que ser un genio para saber el porqué, se había ido con sus amigos a un bar a hablar pero algo dentro suyo sabía que esto pasaría así que después de despedirse regreso por el mismo camino que había llegado.

Cuando doblo en la esquina la vio fuera del enorme edificio, no debería, sabe que a su jefe no le gusta se exponga, se lo ha explicado varias veces pero duda quiera un sermón de ese ser justo en ese momento... Estaciono el coche con cuidado, no le dio ni chance de bajarse a abrirle, ella abrió la puerta del copiloto y se metió al auto quedando justo a su lado, no negará se sorprendió, ésta cerro con algo de fuerza la puerta antes de ver su frente.


— ¿Puedes llevarme a la playa por favor?

—Señorita... Sabe que e-

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