El mundial - Fuleco x La'eeb.

Uno: Audición.

Estaba muy seguro, lo iba a lograr. En esos momentos estaba ya en el Centro de Crecimiento e Integración de Acreditación de Mascotas, era su gran día y todo debía salir bien, se trataba del gran importante momento donde iba a audicionar y tener el papel de la mascota oficial de la Copa Mundial de la FIFA 2022.

Llevo consigo su acreditación, preparó todo desde semanas atras. Al parecer habían otras posibles mascotas, debía de ser positivo, estar centrado en su objetivo y sabría perfectamente que saldría victorioso de ahí. "Les deseamos la mejor de las suertes" escuchaba en el altavoz, claro que tendría suerte, se ha preparado por años para este esperado momento.

—Estoy seguro de que seré el mejor, el más apto, el más encantador en mi catego...—Hablaba en voz alta mientras iba hacia la sala de castings, al momento en la cual se abrió la puerta alargó un poco más la última palabra, habían otros participantes y debía de admitirlo, destacaban mucho más que los que pudo observar en su camino.

Se encontraba frente a Oryx, recordaba perfectamente la puntuación de la audición de sus "rivales" y sus mejores habilidades, sabía que tenia un 9.7 sobre 10, sus habilidades más destacadas se trataban sobre una velocidad supersonica e igual era encantador; vio su audicion y debía de admitirlo, fue fascinante, lograba hacer varios trucos con sus cuernos . Una vez más, el miedo de un posible fracaso volvió en sí, pues diviso no tan lejos de sí a otro participante, Hoopoe, una ave la cual tuvo en de puntuación un 9.5 sobre 10, sus habilidades iban desde la telequinesis, volar y brillar en la oscuridad, sus resultantes plumas amarillas era a su gusto algo tan llamativo, el ver como aquella mascota repentinamente le guiño un ojo le extraño tanto, pero estaba centrándose en su demás competencia. Por último, pero menos importante estaba Falcon, quien tuvo la puntuación más alta y la cual se trataba de un 9.8 sobre 10, podía volar, al parecer era alguien bueno en la poesía y tenía super fuerza.

Aquella confianza del inicio ahora iba cuesta abajo, pensando si es que podría llegar hasta su nivel o incluso uno superior. Sentir las miradas de aquellos tres participantes sobre si lo único que causaban ahora era nerviosismo, en completo silencio espero a que llamaran para su esperado turno y para su suerte no tuvo que demorar tanto, se abrió la puerta que ahora llevaría hacia los tres jueces que decidirian cual sería ahora su futuro. Escuchó su nombre y se dirigió ahí, el único inconveniente se trataba del que aquel pequeño robot cuadrado de tonalidades celestes pronunció mal su nombre "Laa'ibb", de una forma no tan amable lo corrigió.

Estaba frente a los jueces, reconocía a los tres perfectamente, Willie, un gran león el cual portaba la camisa del Reino Unido junto a la frase "World Cup" y siendo la primera mascota en el mundial de Inglaterra del año 1966 quien estaba en el asiento derecho, en medio estaba Pique, mascota del mundial de México del año 1986, un chile jalapeño con bigote y sombrero de charro, usando una camiseta roja del Tri, hasta la izquierda quien estaba sentado se trataba de él famoso pulpo Paul conocido por ser un gran oráculo quien predijo el resultado de las selecciones. Al parecer estaba contando un chiste el último mencionado, pues hizo reír a las dos mascotas restantes.

El set en el cual se encontraba enfocaba únicamente a el, un pequeño campus de fútbol junto a un micrófono en medio y de ahí mostrando todo lo demás de colores opacos, pues nada más que él estaba iluminado, sentía la enorme tensión del momento pues a los pocos segundos de su presencia y escucharse el eco de fondo a causa del micrófono los tres jueces voltearon a verlo. Ha practicado durante tanto tiempo para aquel importante momento, sin embargo ahora estaba en blanco y sin siquiera poder pronunciar una palabra frente a los demás. Escuchó la voz del pulpo Paul, al parecer este fue quien decidió de una vez con romper con ese un tanto incómodo silencio.

—Asi que...—Escuchó atentamente la voz del pulpo, en voz baja repitió a la misma oración del contrario, observando como con uno de sus tebtaculos jugaba con un boligrafo—¿Tienes alguna habilidad que mostrar?