Luna y Mana Mitsuya eran dos Betas que trabajan para su hermano mayor, funcionando como sus secretarias y parte del equipo de información, pero ellas eran las encargadas de la seguridad también, trabajando en conjunto con los otros encargados de la seguridad de las otras mafias, con los tres de Tenjiku y Satoru Nomura de Brahman.
Satoru era el de mayor edad entre ellos, contando con 50 años, su cabello era completamente blanco por las canas, un Alfa fuerte a pesar de la edad, de mirada gris parecidas a dos perlas negras brillantes, el olor de la granada venia de él, su cuerpo tenia una buena musculatura a pesar de la edad.
Habían recibido un aviso sobre personas teniendo una fiesta que se estaba llevando en el puerto, pero como era muy lejos de donde se estaba llevando la firma solo ordenaron que los vigilaran y los sacaran fingiendo que eran de seguridad del puerto, ademas, al ser omegas no seria difícil intimidarlos.
Pero ahora ellas, con Satoru, Shion, Mucho y Mochi, estaban en una sala que habilitaron para la seguridad, ya que para garantizar no ser atrapados pusieron cámaras por todo el lugar, al menos en las entradas principales y lugares importantes, en esa sala estaban pantallas que mostraban todos las cámaras de seguridad y lo que grababan.
Así que vieron, con asombro, lo que mostraban las cámaras, ya que ese grupo de omegas parecía ser más de lo que aparentaban ser.
Primero vieron como se acercaban, disfrazados de seguridad, unos hombres que fueron mandados a sacarlos, gracias a la visión nocturna de la cama podían ver a los civiles intrusos al menos de forma decente, aunque no se podía ver sus facciones.
Los omegas se pararon al ver como se acercaban los falsos guardias, para luego intercambiar algunas palabras, ellos recogieron sus cosas y caminaron hasta ellos, presuntamente listos para irse, fue cuando comenzó la acción.
De repente uno de ellos, una mujer por su ropa, uso una botella que saco de un bolso y se la rompió en la cabeza a uno de ellos, quien luego intento atacarla, solo para ser inmovilizado por uno por detrás, para ser apuñalado sin miramientos por la mujer y el cuello de la botella, le quitaron el arma y lo dejaron tirado en el suelo, sus manos fueron pisadas con tanta fuerza que de seguro se las rompieron.
Uno de ellos le dio un buen golpe al estomago de uno de los atacantes, pero en un descuido fue tumbado para ser atacado, pero otro Omega se interpuso y de forma impresionante lo tomo del cuello de la camisa y tomando la mano donde tenia el arma, lo lanzo por los aires, dejándolo en el suelo, uno de ellos se puso arriba y comenzó a golpearlo una y otra vez con los puños, siendo ayudado por el Omega que saco algo de su bolsillo y se lo lanzo a otro que se fue corriendo.
Los únicos que no se movían eran dos Omegas, que solo miraban con aparente tranquilidad lo que pasaba delante de ellos, uno tenia un bastón, miraban a todos lados como vigilando que nadie más se acercara a ellos.
Luego de unos minutos, algo fuera de cámara llego, posiblemente un auto por las luces, los Omegas dejaron a los falsos guardias, la mujer se llevo el cuello de botella ensangrentado, dejaron sus cosas tiradas y salieron de cámara, subiendo al auto lo más seguro, y se fueron.
Con esto, era claro que no eran simples Omegas que estaban de fiesta.
Luna: -¿Ya revisaron las demás cámaras?- pregunto ella seria
Subordinado: -estamos buscando las cámaras cercanas del lugar señora, pero solo hemos podido encontrar imágenes de lejos, aun no hemos podido ver la patente del auto- dijo él algo nervioso por la miradas de sus superiores
Mana: -¿Y que pasa con ellos, ya fueron llevados a ser tratados?- pregunto ella, ellos eran una fuente de información importante como para que se murieran antes de hablar
Subordinado: -ya fueron llevados y están siendo atendidos, ambos están inconscientes- informo intentando guardar la calma
Shion: -más les vale que los mantengan vivos, tienen mucho que hablar cuando despierten- dijo con ese tono usual de enojo que tenia
Todos tenían el mismo pensamiento, esos Omegas no eran lo que aparentaban ser, y eran mejor prevenir que lamentar, tenían que informar esto a sus superiores cuanto antes, ya que podían ser un peligro.
Pero solo uno de ellos sabían la verdad, solo uno de ellos conocían bien el estilo de pelea de esos Omegas, quien tuvo que reprimir su sonrisa al ver las cámaras.
Satoru: -(Como han crecido, mis pequeñas Valquirias)- pensó con una sonrisa interna
Pero, a pesar de la alegría que sentía en esos momentos, también estaba la preocupación, ya que ellos acababan de llamar la posible atención de las mafias más peligrosas de Japón.
Satoru: -(Y como siempre, se meten en problemas, ¿Acaso no pueden dejarme descansar un poco?, ya estoy viejo para cuidarlos)- pensó con algo de fastidio
Esos niños siempre le generaban problemas cada vez que los veía.
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The soldier and the mobster [Tokyo Revengers AU] [Yaoi] [Omegaverse]
Roman d'amourUn soldado retirado enamora sin saberlo al jefe de una de las mafias más poderosas de Japón, ¿Loco no? Takemichi Hanagaki es un Omega que en el pasado fue un soldado, con un curioso olor a una planta hermosa con un corazón de oro. Manjiro Sano, mejo...