amor de oficina

Capitulo 22: Sufriendo en silencio; Ese hermoso atardecer

??: Te estoy diciendo que no hize nada —dijo un chico algo joven.

??: ¿Crees que soy estúpido?... Estaba a unos cuantos metros de ustedes y aún así tienes el descaro de negarlo— hablo con furia el tipo, apretaba más sus manos al volante.

??: Si estabas tan cerca, debiste de ver qué solo fue un abrazo.

??: Tú estás conmigo y me perteneces.

??: No soy un objeto, tengo amigos y amigas, al igual que tú... La única diferencia es que yo no conozco a ninguno de tus amigos —hablo con firmeza el menor.

??: Vas a empezar de nuevo.

??: No conozco a tus amigos y menos a tu familia, tú conoces todo de mí, y aún así no confías en mí.

??: Esas palabras no son tuyas, son de esa maldita mocosa, te dije que no le hablaras, me desobedeciste —volteo a ver al menor, esa mirada que le da terror al joven.

??: E-ella es m-mi mejor amiga — el menor bajo la mirada, su cuerpo temblaba de solo sentir su mirada.

El auto se detuvo de golpe, el tipo al volante tomo del cabello al menor y jalo, haciendo que su cabeza se hiciera hacia atrás.

??: ¡Atrévete a desobedecer me, otra vez!... Y te juro que no volverás a esa querida amiga tuya — lo último lo susurró al oído del joven.

Nuestro querido rubió, despertó agitado, temblando y con lágrimas que recorrían sus mejillas, se levantó de la cama y fue directo al baño, en frente del espejo se quitó la camisa dejando ver su pecho pero también alguna cicatrices.

Naruto: Pensé que ya se había esfumado de mi vida — calló al suelo, empezando un llanto silencioso.

El sol empezaba a salir junto con el pasado de Naruto, del que tanto había estado olvidando durante ese par de escasos años, varios horas después el rubió estaba estado en la silla que se encontraba en el balcón, con su mirada perdida observaba un cielo despejado .

Naruto: Tendré que volver a terapia — suspira con pesadez.

Se escucha la puerta que tocan, el rubió se levanta y abre, era Shikamaru, se hace un lado para dejarlo entrar.

Naruto: ¿Que sucede? —dijo con una voz desanimada.

Shikamaru: Se que no soy la primer persona que quieras ver por la mañana, pero al menos sonríe al verme.

Naruto: No seas exagerado.

Shikamaru: Solo venía por tí, para comer en el restaurante del hotel.

Naruto: Okay, vamos.

Ambos bajaron al restaurante, y los guiaron asta su mesa, cada uno ordeno a su gusto.

Shikamaru: Naru... No sabía si preguntarte o no, pero, ¿Está bien?.

Naruto: ¿De que hablas?.... Claro que estoy bien, ¿Por qué no lo estaría? — dijo viendo amigo con una sonrisa.

Shikamaru: Okay~, te creeré — dejó salir un suspiro largo.

Naruto: Shikamaru, quiero ir al lago que está cerca, en la tarde para poder ver el atardecer.

La mirada del rubió, parecía perdida, como si algo le hubieran arrebatado, ese brillo que lo distinguía apenas podía verse, era como ver morir poco a poco la luz de una hermosa luciérnaga, su amigo de solo verlo podía notar como estaba sufriendo en silencio, ver una máscara para cubrir las heridas.

A lo lejos un azabache observaba la misma imagen, pero ante sus ojos veía un chico pidiendo ser rescatado de aquella penumbra que trataba de encarcelar lo de nuevo.

Sasuke: Quiero saber que es lo que te agobia, y poder hacer que no te vuelva atormentar, quiero protegerte, igual que aquella vez de la cual no te acuerdas.

Un pelinegro y un rubio, disfrutaban aquella comida, al terminar el rubió no quería salir asta la hora de ver lo que le había dicho a su amigo, así que se encerró completamente en su habitación, volvió a sentarse en el balcón y volver a ver el cielo.

Naruto: Quisiera ser este hermoso cielo despejado, pero también tiene sus momentos grises y hay cosas que lo dañan poco a poco — le canto ambos brazos y con sus manos parecía como si acariciara el cielo — tu y yo somos iguales, nada nos va a dejar ser felices — lagrimas empezaron a caer y una sonrisa amarga se formó en su rostro.

Paso horas y ya era hora para ir a aquel lugar, su amigo fue por él, para poder acompañarlo, también quiere comprender el por su expresión de una felicidad falsa. Ambos se sentaron en una banca y en frente de ellos un gran lago que reflejaba el cielo, Naruto solo admiraba en silencio.

Shikamaru: ¿Quieres tomarle una foto, como recuerdo? — preguntó casi a punto de sacar su celular, pero si amigo se negó rotundamente.

Naruto: (Inmortalizar la, la volverá poco a poco menos especial).

Fue un pensamiento que él cree que es correcto, para otros será una perdida de tiempo no tomarle foto, ya que con el tiempo se olvidara de aquel momento, y será algo pasajero.