Mi refugio (bnha)

Día normal

DIOS!, Por favor recomienden una historia con el tema de la imagen de arriba!!!

Estaba corriendo en dirección a mi casa, ya que si pude escapar de mis bullys gracias a dios soy rápido, tome mis llaves y las inserte en la puerta de mi querido hogar, un departamento sencillo, dos habitaciones, un baño, una cocina que por medio de una isla que ocupamos como comedor se entrelaza con la sala de estar; tome la puerta a la derecha del pasillo que me lleva a mi habitación, la cual la compartía con mi hermano menor, Takibana Hamada.

Comencé a quitarme mi uniforme rasgado gracias a los jalones y golpes con quirks de roca y garras los jalones que me dieron en la escuela... se veía horrible el uniforme, me cambie a ropa informal, solo una camisa de tirantes blanca, un sueter arriba y unos jeans un poco rasgados ya que así era la moda de hoy en día; comencé a coser mi uniforme ya que esta no era la primera vez que pasaba esto ni la última, aunque no me agrade decirlo, se sentía bien tener experiencia, porque eso me ayudaba cuando a Taki o a padre se les salía un botón o se les desgarraba alguna parte de la prenda; cuando acabe de cocer me puse a hacer mis tareas y en eso oigo la puerta principal abrirse, sabía que era mi padre y mi hermanito Taki, ya que llegaron hablando sobre el ultimo arresto que hizo All might, algo sobre un chico que se había lanzado hacia un villano de lodo o algo así, la verdad no pude escuchar muy bien ya que aun seguía en mi habitación.

Sali de mi habitación para saludarlos y ayudarle a mi padre a hacer la cena, mientras Taki miraba la televisión en su programa favorito con una canción realmente pegajosa, yo estaba cortando los vegetales para hacer curry, es mi favorito y el de padre; quien sabe de dónde Taki saco que el suyo era Katzudon. (Padre se llama Akiko Hamada)

-Yo- Y entonces... que tal el trabajo?, ¿algo nuevo?

-Akiko- Todo estuvo muy tranquilo, nada en especial, solo que hoy fue día de donas

-Yo- De acuerdo, tal vez para la siguiente le podrías traerle una a Taki, a el realmente le gustan las de miel

-Akiko- Tratare de recordarlo. ¿Qué tal te va en la escuela?, ya les dijeron que día comienzan los primeros exámenes?

-Yo- Si, dentro de 3 semanas y luego nos van a dar 4 dias para descansar, ya que el director cree que nos lo merecemos

-Akiko- Espero que lo sigas haciendo como todos los años, realmente espero mucho de ti Suzuki, tú vas a ser el ejemplo para tu hermano; no me decepciones, no la decepciones.

-Yo- Claro padre, claro como el agua

De verdad que intento ser amable con él y lo único que hace es decirme lo mismo de siempre, "tu debes ser el ejemplo, no me decepciones... No, mejor dicho, no decepciones a tu madre" realmente es exasperante, solo quiero que deje de preocuparse por eso e intente conocerme más. No es que quiera decepcionarla, solo que yo por fin ya pude dejarla ir, ya por fin hace poco pude cerrar ese ciclo, había aceptado su muerte, pero claro, ¡la herida aun necesitaba reposo como cualquier otra!, pero él no lo entendía y me lo sigue restregando en la cara, la verdad no se si aguantare hasta la mayoría de edad (21 en Japón).

Después de calmarme un poco, comer y platicar un poco con Taki sobre All might, me puse a ayudarle a Taki con sus tares, trataba de explicarle lo mejor que podía y daba gracias a que Taki en verdad si me entendía; amaba estar con mi hermano, lo quiero mucho y me hace feliz el que él también quiera pasar tiempo conmigo, aunque solo sea para algo simple como tarea... me gusta que me tenga confianza, que a veces me llame su "Héroe" solo por bajarle el cereal que estaba arriba del refrigerador...

Por las 6:30 salí de mi casa con mi bolso en dirección a mi segundo hogar, algo que de verdad amaba, mi escuela de natación, un lugar donde puedo relajarme de todo, sentir el agua sobre todo mi ser, la adrenalina de la rapidez a la que iba, de la fricción del agua en cada musculo de mí, la falta de oxígeno en mis pulmones, todo aquello me llenaba, me hacía sentir libre... A pesar de las críticas sobre mi cuerpo, más específico mis brazos, me sentía bien, ya no tenía que recurrir a autolesionarme solo porque no sabía cómo expresar mis emociones.

Decía mi psicólogo que lo hacía por el dolor de perder a mama, ella murió dando a luz a Takibana y no lo voy a contradecir, ya que, aunque allá pasado mucho tiempo (6 años), yo en verdad la amaba y como padre estaba sumergido en el trabajo y deudas, yo no tenía a quien aferrarme, por eso también dice el psicólogo que trate de aferrarme a proteger a mi hermano, porque inconscientemente no quería que nada le pasara a Taki...

Afortunadamente ya no lo hago, realmente creo que llegaría a eso en caso de que no cerraran la escuela de natación o algo le pasara a Taki.

La alberca es uno de los muy pocos lugares donde no sufro discriminación, sé que solo estoy "protegido" porque la alberca también es un lugar donde todo y digo "todo" puede pasar, desde un calambre hasta la muerte... Mas que nada, la escuela se cuida de las futuras demandas, no cierran el lugar dado que la escuela es el lugar donde entrenan los futuros jóvenes del mañana, los representantes de Japón en los próximos juegos olímpicos.

Acabando la práctica de hoy, me fui a duchar, me cambié a un conjunto deportivo azul en tonos neutrales y luego salí hacia mi casa, era un poco tarde aproximadamente como las 8 de la noche, aprovechaba para irme corriendo y quemar lo último de curry que había en mi sistema, gracias a mis ejercicios nocturnos podía escapar más rápido de mis bullys que, aunque no eran frecuentes, solo me molestaban cuando no habían descargado por completo toda su energía en los clubes escolares. Ellos me molestaban más verbalmente por ser un desperdicio de espacio, de oxígeno según ellos, solo por ser quirkles; pero en estos días han probado nuevos métodos... y como los profesores no dicen nada creen que es una luz verde.

Al llegar a mi casa aproximadamente a las 8:17, trate de no hacer ruido porque sabía que Taki y padre tenían cosas que hacer mañana temprano, así que me quite los tenis y los deje en la entrada, me puse mis pantuflas de diseño de gatos que me hacían demasiado feliz, "a veces los pequeños detalles hacen la diferencia" decía mama, me dirigí al refrigerador y tome un poco de fruta que me gusta preparar después de ir a la escuela como un suministro para cenas ligeras para estas ocasiones que llegaba un poco tarde y no quería despertar a nadie haciendo un movedero de ollas y sartenes. Así que solo disfrute mi pequeña "cena" con un poco de agua natural y luego en silencio me dirigí a mi habitación donde afortunadamente Taki ya estaba dormido, se veía tal lindo dormido, yo lo quiero mucho y aunque no paso tanto tiempo con el cómo me gustaría, lo quiero mucho. Me acurruque en mi cama y me adentre en ese gran descanso que esperaba y apreciaba demasiado.

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