Place of Pleasure | Changlix's one shot's

27to Shot: Negación

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Si existe algo malo y venenoso en nuestras vida es la negación, y vaya que Changbin debía combatirla

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-Si lo sigues viendo así parecerás un acosador – se burló Chan a su amigo sentándose a su lado

-¿De qué estás hablando? – intentó hacerse el que no sabía, volviendo la mirada a su celular apartándola de las otras dos personas frente a ellos

-Por favor Bin, decir que no te mueres por quitar a ese chico del lado de Félix y ser tú quién le habla sería una mentira, te mueres de los celos –

Sus palabras le tomaron desprevenido porque creyó que nadie lo estaba viendo, se dio cuenta que no era así – No sé de qué estás hablando – apartó la mirada de su amigo y vio alrededor

-Soy tu mejor amigo, así como el de Félix también, y sé de lo que te estoy hablando, no tienes porqué seguir tratando de ocultármelo –

Changbin suspiró volteando a verle y solo con esa acción le confirmó a Chan lo que creía, porque era correcto, pero no añadió más a sus afirmaciones pues se sentía atrapado – Te agradecería que no le dijeras a más nadie, ni a los chicos

-No sé por qué crees que lo haría, conmigo estás a salvo – se rio mirando al frente, instintivamente él también lo hizo encontrándose con Félix siendo abrazado por aquel hombre que no sabía quién era, de repente aquella espinita de celos se encendió vivazmente – Solo te recomendaría aceptar las cosas rápido, no te dejes ganar

Un pequeño empujón en su hombro fue lo ultimo que hizo Chan antes de partir, lo había dejado solo nuevamente con sus pensamientos intrusos acerca de aquel pecoso pálido que le movía el mundo de una manera que nunca pensó

Y hubiese sido todo más fácil si lo aceptara como son, pero claro, no podía hacerlo porque él no es gay, o eso era lo que creyó hasta hace un par de años, tal vez no lo era porque podía afirmar que le seguían gustando las mujeres, pero el deseo casi que irracional de tocar y estar con Félix era algo relativamente nuevo para él

-Hyung, ¿me estás escuchando? – su voz le hizo salir de sus ensoñamientos topándose con un Félix extrañado, al parecer le había hablado desde minutos antes

Changbin tosió disimulando – Perdón, ¿Qué era? –

-Te decía si querías ir esta noche con Mark y yo al bar cerca del hotel, me invitó, pero no quisiera ir solo – la petición causó algo en él

Sabía ahora el nombre de quién quería separarlo, pero el resto de lo que le contó le molestaba

Lo pensó por unos momentos y, aunque no quisiera ir y verle la cara a aquel tipo, no permitiría que su Félix fuese solo – Está bien – concedió ganándose un abraso por el pecoso, contacto que generó en él varios sentimientos, principalmente confusión

-¿En serio irás? – preguntó acostado desde la cama

-Sí, Chan, ya te lo he dicho tres veces, ¿Qué más puedo hacer? – respondió cansado desde el baño terminando de acomodarse su camisa

-¿No dejándolo ir? ¿Aclarar las cosas y decirle que no te gusta verlo con alguien más?, No lo sé –

Suspiró cansado por las mismas preguntas, debió pensar las cosas seriamente antes de aceptar – No puedo negarme ahora

Y como si lo hubiese invocado alguien tocó la puerta de la habitación, el mayor fue a abrirla encontrándose con el pecoso esperando por Seo

-Espero que tengas cuidado, estás demasiado guapo como para no verte – Félix se rio por el cumplido del mayor

Pero Changbin sabía que era para molestarlo a él principalmente, porque era cierto, Félix estaba malditamente guapo como para no admirarlo tal y como lo merece

-Estoy listo, vamos – salió de la habitación arrastrando a Félix a su lado, cerrando la puerta detrás de él viendo la mirada burlona de Chan que tanto odiaba, viéndolo reír cuando le dedicó una mirada de odio

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Changbin estaba jodido

Lo supo desde que llegaron a aquel bar y Félix cruzó miradas con el tal Mark y no se habían separado desde que llegaron, estaba sentado en la esquina de la mesa viendo a la nada mientras tomaba de su trago ya casi que vacío, en toda la noche no tuvo ganas ni la intención de cruzar palabra con el susodicho.

Pensó que sería pronto para irse pues ya pasaba la medianoche y no quería preocupar a los demás miembros, y su partida del bar habría sido tranquila si no hubiese volteado en busca de Félix para irse y encontrarlo besándose con el otro hombre en la mesa.

No supo cómo reaccionar y su ser simplemente se enervó ante tal escena que, para evitar conflictos, se levantó bruscamente de la mesa pasando por ellos, alarmando al pecoso por su acción

-¿Changbin? – preguntó extrañado mientras lo veía dirigirse al baño del establecimiento

Seo al llegar al lugar sintió la rabia invadirlo, trató de calmarse abriendo la llave del lavabo e introduciendo sus manos en ellas, ¿por qué se sentía así?, claro que lo sabía

Sabía las razones de su enojo; le enojaba ver a Félix besarse con otro que no fuese él, deseaba ser él quien le besara y probara sus labios, odiaba tener que reprimir sus sentimientos solo por terco

Porque le gustaba Félix

-Hyung, ¿estás bien? – la voz preocupa de Félix resonó en el baño del lugar detrás de él obligándolo a subir la mirada y verle fijamente

Parecía genuinamente preocupado por él y no hizo sino causarme más ternura de la que ya lo hacía, no podía creer como se fijó en alguien tan puro como él

-¿No estabas con Mark?, deberías regresar con él

-Vine contigo, no puedo dejar que te vayas, tomaste demasiado – intentó acercarse a él pero Changbin se movió en señal de no quererlo cerca

A Félix le dolió, pero se extrañó cuando el mayor empezó a reír con ganas mientras mantenía su cabeza gacha en el lavabo, talvez por la bebida, pensó

-¿Por qué tuviste que ser tú? –

-Hyung, ¿De qué estás hablando?, estás borracho

-¡No lo estoy! – alzó un poco su voz – Estoy lo suficientemente sobrio como para decirte que me gusta, que te odio por hacerme sentir cosas que nunca antes nadie me había hecho sentir, ni siquiera sé porqué sigo aquí si tanto odio verte besarlo a él y no a mí

Su voz fue disminuyendo con cada palabra y solo al final las risas sin gracias sonaban en aquel lugar, pensó que Félix se había ido por lo recién confesado, pero al voltearse y verlo ahí perplejo tomó la valentía suficiente para hacer lo que había estado deseando desde hace tiempo

Aprovechó el shock del menor y se acercó rápidamente a él, sin pensarlo tomó su rostro entre sus manos y chocó sus labios contra los del menor; se sentía eufórico.

La suavidad de sus labios contra los de él le llenaban de una alegría y emoción inexplicables que pensó era un sueño, pero el sentir los labios del menor moverse contra sí supo que no lo era: Félix le estaba correspondiendo el beso. Pero todo lo que empieza termina, por eso cuando se separaron por alta de aire debió ser valiente y ser sincero con ambos

-Me gustas, Félix, me gustas demasiado – le sonrió

Pero su miedo fue mayor y se separó de él, saliendo de ahí dejando a un Félix aturdido pero seguro de algo también

-También me gustas, Bin – susurró sonriendo saliendo detrás en busca de quién le había enamorado