ST★RFUCKER

010

jeno tomó los bóxers de renjun, considerando que sería mejor romperlos un poco y tener mejor acceso así a la entrada del chico que retirárselos del todo y que todos pudieran ver su trasero en caso de que los descubriesen.

no correría ese riesgo, luego si se lo pidiera le compraría ropa interior nueva.

rompió con sus manos una porción de la costura que había entre sus muslos, renjun estaba demasiado ido como para darse cuenta de aquello, así que no protestó.

estaba dócil ante el rizado, quien tomó su polla y la ubicó sobre la entrada del más bajo, deslizándose poco a poco con cuidado.

la boca de renjun estaba entreabierta, sus cabellos desordenados caían sobre su frente y tenía el mentón sobre el hombro duro de jeno.

mordiéndolo cuando lo sintió entrar en él, para luego lamer sobre el lugar, dejando un chupón que no tardaría en volverse morado. jeno gimió cuando lo sintió chupar, abrumado por las sensaciones.

cuando vio que el chico estaba cómodo, su entrada cerniéndose alrededor de su polla de una manera deliciosa, mucho más apretada que la de otras personas con las que había intimado, decidió moverse con estocadas lentas, tanteando el terreno.

renjun reaccionó al instante, jadeando sobre su oído, pequeños lloriqueos se oían cuando rozaba sobre sus puntos débiles, las manos del rizado reposaban en sus caderas marcadas, acariciándolo en círculos con sus pulgares.

―¿te gusta, querido? ―le dijo con la voz ronca, un gemido grave salió de su boca cuando lo sintió apretarse.

renjun sonrío complacido al oír sus palabras ser cortadas por un sonoro gemido, orgulloso de haber provocado eso en él. con voz dulce replicó sobre su oído: ―¿e-estás seguro de q-que la cosa no es al revés?

y jeno se reafirmó como quien dominaba comenzando a moverse de manera más frenética, su cuerpo chocando de la manera más sucia de todas contra la piel sensible de la entrada de renjun, quien no podía hacer más que gemir locamente, ahogando sus sonidos contra la piel de jeno.

mordiéndolo sobre su camiseta, chupando la piel expuesta sobre sus clavículas y cuello, dejando marcas que sabía que permanecerían por un tiempo. lo cual lo ponía muy contento consigo mismo.

―¿q-qué dirá la gente cuando vea que el nerd está follándose a huang renjun frente a sus narices? los dos enemigos mortales comiéndose a la vista de ellos, sin que se den cuenta ―terminó y pasó su mano sobre la polla erecta del ojimiel, dándole un apretón, acariciándola de arriba hacia abajo. ―no sabes cuán bien se siente tu hermoso culo ―remarcó deslizando su mano libre dentro de su bóxer, tomando un cachete y masajeándolo de manera libidinosa. ―que mal que no sea el único que lo sepa, todos esos chicos de por ahí teniendo una porción de él.

renjun iba a replicar que no le importaría entregárselo solo a él, si iba a tratarlo de esa manera cada vez que follasen.

pero se le dificultaba mucho hablar cuando una enorme polla lo estaba tomando de esa manera.

si abría la boca dudaba poder formular frase alguna u otra cosa que no fuera un largo y fuerte gemido.

jeno hizo un cambio de ángulo a último momento, acertando en la próstata de renjun, y con una mano cerniéndose alrededor de su polla, el más bajo sentía el orgasmo a la vuelta de la esquina.

no pudiendo aguantar más, tenía el aliento de jeno sobre sus labios, al borde de besarlo más sin hacerlo. sabía que eso haría el momento más íntimo de lo que en realidad era, y no quería arruinar esto con algo que no sabía si jeno quería.

el rizado sintió las paredes de renjun apretarse de la manera imposiblemente más caliente que existiera sobre su polla, atinó de manera rápida a cerrar su mano sobre el miembro ajeno, evitando que se manchase entero cuando su semen salió disparado.

toda la semilla de renjun acabando en la palma de su mano. jeno no necesito mucho más que dos empujes para correr con la misma suerte, terminando dentro del látex. llegó al orgasmo con un gemido ronco que fue acallado por los suaves labios de renjun, salvándolo de ser escuchado.

más su suerte no duró mucho, ya que el más bajo soltó un gemido que fue oído por un chico a la lejanía, quien volteó a ver justo cuando jeno terminaba de salirse de dentro de renjun, acomodándose de manera tal que no se pudiera ver más que las espalda de ambos.

―¡hey, miren todos! ¡el nerd está follándose a huang sobre la mesa de pool! ―gritó ese tipo a lo lejos mientras que todos miraban hacia la mesa, la música se detuvo de manera abrupta tras escucharse eso.

los chicos aprovecharon ese momento de distracción para guardar sus pollas en sus respectivos lugares. renjun bajándose de la mesa en un movimiento rápido, lo que le permitió acomodarse los pantalones de paso.

ambos tenían los rostros brillantes de sudor y el aspecto desastroso, pero podían pasar desapercibidos entre todos si salían de esta. por suerte, el más bajo era un actor nato, metiéndose en su personaje más rápido de lo que jeno esperaba, caminó lejos de él con cara de asco.

―¡ja! ―río agudo, componiendo su voz al instante para continuar: ―preferiría ir a un monasterio antes que dejar que el nerd me follase.

le dio una mirada rápida al rizado, dándole a entender que debía seguir con esta obra que estaba montando.

―y yo que mi polla se desprendiera de mi cuerpo antes que metérsela a huang, apuesto a que ese agujero es una cueva llena de murciélagos ―comentó pasando por detrás de quien había avisado a la multitud, apoyando su mano sobre su hombro, dejando una mancha blanquecina sobre la camisa a cuadros del chico.

renjun intentó seguir en su personaje, levantando las cejas a modo de ofensa y perdiéndose entre todos, con sus amigos corriendo tras él en su búsqueda.

jeno se dio cuenta que notó lo que había hecho, y que había escapado antes de largarse a reír frente a todos.

cuando todos oyeron el escándalo, acostumbrados a vivir esas peleas todos los días, la música volvió a sonar y todos se quejaron con el chico que paró todo.

recriminándole que "como iba a pensar que ellos dos habían follado, si se odian en cuerpo y alma". nadie le creyó, aunque él seguía afirmando que había visto lo que contó.

y tras eso todo carters high siguió creyendo que renjun y jeno eran los enemigos más grandes de todos, que cómo iba a ser verdad que follaron si se dio a conocer que renjun era el motivo por el cual jeno no conseguía citas ni sexo, lo que lo había llevado a incrementar el odio hacia su némesis.

creían todo eso y muchos inventos más, cuando, en realidad, los dos enemigos se la pasaban besándose bajo las gradas del gimnasio de educación física, diciéndose cursilerías en las bolitas de papel que se tiraban el uno al otro con caras de enojo, y, cómo no, follando en viejos salones de química vacíos.