🐬 Meguru Bachira 🐬

881 47 14
                                    

Actualmente estabas conviviendo en la misma casa con la estrella futbolista Bachira Meguru, estaban por cumplir aproximadamente cuatro años de relación. Muchos de sus respectivos familiares cuestionaban el simple hecho del porque hasta la fecha no estaban comprometidos o en plan de tener hijos, sin embargo, para ustedes nunca había sido esencial ninguna de esas cosas, era más que suficiente con el amor que se proferían ambos.

O al menos eso era lo que pensabas tú, ya que la idea de ser una madre de familia no iba con tu tipo de pensamiento, debido a que valorabas tu independencia y en especial aquellos momentos a solas, en los que podías centrarte solo en ti. Además, venias de una familia muy numerosa tenías una gran cantidad de hermanos/as, siendo tú la mayor, asegurabas con gran firmeza que ellos consumieron toda la paciencia que tu ser podía contener en esta vida y las próximas, si es que existía la idea reencarnación.

Ahora que lo pensabas con mayor claridad, a pesar de conocer a Bachira hace años, nunca se había dado la instancia para hablar de aquello o más bien nunca lo sugeriste de tu parte y tampoco provino de él la iniciativa.

-Mejor así, para que hablarlo.- por un segundo creíste que lo último que habías pensado se había quedado dentro de la conversación interna que mantenías en tu mente. Sin embargo, no había sido así, debido que lo habías proferido en  voz alta en el peor escenario.

-¿mejor así?- una voz masculina te hizo regresar los pies a la tierra. Aquella voz le pertenecía a tu lindo novio que se encontraba sentado frente a ti tomando desayuno.- ¿De qué hablas preciosa?- no pudiste evitar abrir los ojos de par a par. Lo que causo que Bachira soltara una carcajada automática.- ¿y ahora porque pones esa cara?-

-Perdón meguru , estaba pensando en voz alta, es decir, estaba absorta en mis pensamientos, no es nada importante.- dije quitándole importancia a lo dicho con anterioridad, que vergüenza en cierta parte, pero al menos no pronuncie nada comprometedor como decir la palabra "paternidad" en voz alta. Sin embargo tu novio se caracterizaba por ser un tanto infantil e intenso, por ende este pequeño momento era perfecto para molestarte un rato.

-¿nada importante?- consulto arqueando una ceja a lo cual yo asentí con la cabeza, afirmando en un gesto que realmente no era nada importante.- ¿y entonces porque te pusiste tan nerviosa?- cuestiono levantándose de su asiento,  para luego rodear la mesa y llegar a tu encuentro.- ¿en qué pensabas exactamente princesa?- posiciono ambas manos detrás del respaldo de la silla en la cual te encontrabas sentada y tiro de esta hacia atrás, menos mal habías dejado la taza de agua caliente sobre la mesa.- no me digas que estabas pensando en lo de anoche.- dijo con una sonrisa pícara a lo cual yo respondí con la cara más serie que podía darle.

-Meguru, no caeré en tus provocaciones, ya te dije no es nada importante-este en su insistencia comienza a inclinar aún más la silla hacia atrás.-

-vamos, dime en que pensabas-insistió haciendo pucheros.-antes que me respondas, no soy Meguru para ti- levante ambas cejas al no entenderlo- mi amor, cariño, príncipe de mis sueños esos apodos me gustan más proviniendo de ti preciosa.- rodé los ojos antes su cursilada, pero igual termine soltando una risa, así era mi novio tan dulce y tierno, aunque a veces me llegara a asfixiar con su melosidad.

-bueno mi amor, el hombre de mis sueños.- pronuncie suavemente acariciando su rostro mientras este aún mantenía la silla inclinada, me dirigió una mirada totalmente satisfecha, le gustaba los mimos con mucha regularidad, incluso más de lo que esperaba.- realmente en lo que pensaba era lo de anoche, digamos que fuiste un poco brusco.- evadir el asunto principal con otro, que inteligente de mi parte.-

-¿Enserio?- al chico se le desconfiguro el rostro, parecía preocupado.- con que era eso...-dejo de jugar con la silla, para poder sentarse ahora al lado de ____- preciosa perdóname, había pasado bastante tiempo lejos de ti, debido a los últimos partidos que me emocione excesivamente al tenerte tan cerca luego de meses de no verte- aclaro apenado, sin abandonar su carisma natural.-

One Shots|Blue LockDonde viven las historias. Descúbrelo ahora