• Capítulo 1

29 7 0
                                    

Lisa.

Suspiro al ver a los dos hombres ser echados del lugar tras haber montado una pelea. Es la tercera pelea de la semana y nisiquiera es fin de semana. Desde que el bar comenzó a transmitir los partidos de fútbol locales, los hinchas de los equipos pelean por quien ganó, por diferencia de opiniones o por insultarse.

Me echo el paño blanco al hombro y me giro para levantarle el dedo pulgar a Namjoon, quien se encuentra detrás de la barra esperando que echen del lugar a los tipos.

Me acerco a el y estira su mano por debajo de la barra. Saca un puñado de billetes y me lo extiende.

-Tu turno ha terminado Lis, te agregué la propina que recaudaste como lo mereces- sonríe.

-Gracias Nam, me quedaría a ayudarte a cerrar pero ya sabes, necesito ver como los Warriors patean a los Lakers- contesto devolviendole la sonrisa.

El asiente entendiendo, ya que también ha salido más temprano con tal de no perderse a su equipo jugar.

Termino de recoger mis cosas y salgo del bar en dirección a mi departamento. Creo que las ganas de ver el juego de hoy, se convirtieron en ganas de dormir las horas extras que trabajé en el día. Entro a mi hogar y suspiro, hogar dulce hogar.

No es gigantesco ni moderno, pero se vive bien. Con mi puesto de camarera en The Butterfly Bar y las tardes de los sábados que paso ayudando al señor Ji-Bum con su puesto de comida callejera, me permito vivir en una zona segura, en un lugar cómodo y mantener al amo de mi casa, Leo.

-Hola pequeño demoledor, ¿me extrañaste?- me hinqué para acariciar a mi pequeño gatito y este se ladeó su cabeza en la palma de mi mano.

Desde que vine a vivir a Corea a terminar mi carrera de medicina, pasé por muchos obstáculos para poder comunicarme, hacer amigos y obtener trabajo para pagarme la comida y alguna que otra comodidad, es lo que me tocó.

Obtuve el título con las mejores calificaciones, pero hasta el momento no tengo puesto en algún hospital debido a que tuve que viajar y volver a Tailandia repetidas veces desde que mi mamá enfermó.

Me dirigí a mi habitación y metí las propinas en mi frasco lleno de ahorros. Separé un poco para comprarme el nuevo jersey de los Bucks que, sorpresivamente, no tengo aún. Siempre separo algo de mi sueldo para gastar en mi amor por el deporte.

Mi teléfono comenzó a vibrar y la pantalla se iluminó dejándome leer el nombre de la persona que llamaba. Sonreí en grande y atendí.

-¡Jisoo!

-¡Lisa, al fin contestas!

-Lo siento, hoy hice horas extras y olvidé decírtelo, ¿están preparando todo para mañana?

Jisoo es mi mejor amiga, como mi hermana mejor dicho. Está conmigo desde que llegué a Corea, gran parte de haberme adaptado a este país es gracias al apoyo de Jisoo.

Estudiamos medicina juntas y trabaja en el bar conmigo, está casi en mi misma situación sólo que ella está tratando desde hace tiempo entrar al hospital central considerado el mejor de Seúl. Por fin le han echado el ojo y será residente en el hospital, así que hemos organizado una celebración en el bar mañana viernes ya que es feriado y no abrirán.

-¡Qué va!, tenemos todo listo, Nam pasó por aquí y me dejó las llaves para que vayamos un poco más temprano, luego el irá a darnos una mano- dijo con su característico entusiasmo.

-Eso es genial, aprovecharé este tiempo antes de que seas una doctora exitosa y me dejes pudriendome detrás de la barra atendiendo viejos grasoso adictos a la cerveza.

Fingí derrota y ella rió.

-Anda, cuando sea esa doctora exitosa que dices, te quiero conmigo siendo mi mano derecha.

-Pff, ni lo pienses, seré tu competencia mejor dicho, ya verás Kim- la reté y reímos.

-Por cierto Lis, esa chica de la que te hablé, Park Roseanne...

Fruncí el ceño.

-¿Qué hay con ella?

-Irá mañana al bar a festejar con nosotros, también irán algunos de sus amigos.

No es secreto lo colada que está Jisoo por la tal Rosé, no hemos tenido la oportunidad de concoerla en persona pero según lo que Jisoo nos ha comentado, es una chica muy interesante.

-Eso es genial Jichu, pero, ¿por qué lo dices como si fuera un problema?

-Es que...ya sabes, ella y sus amigos ricachones yendo a la fiestita de una camarera nada especial.

Solté una risa nasal.

-¿Apesta, no?, pero eres la mujer más cool del mundo Chu, eres muy inteligente y graciosa, también eres linda y todo el mundo se divierte contigo- me senté en el borde de mi cama mientras me quitaba los zapatos -No tienes nada que envidiarle a cualquier estúpido niñito nacido en cuna de oro, serás la doctora más exitosa del mundo así que no agaches la cabeza ahora.

La escuché reír y puedo apostar a que ahora mismo está apoyada sobre la palma de su mano sonriendo, tiene los mismos gestos para cada emoción. Es una persona muy predecible cuando la conoces bien.

-Tienes razón Lis, gracias.

-Por nada chiken.

Hablamos un poco más hasta que Jisoo tuvo que ir a preparar su atuendo para mañana y yo me dirigí a ordenar un poco mi hogar. Es sabido que algunos de los amigos de Rosé tienen la fama de ser algo...irritantes. Pero yo no voy a dejar que nada ni nadie estropee el momento que a Jisoo le hace tanta ilusión celebrar.

Abrí Tinder para distraerme un rato, Jisoo y Tae me lo descargaron en un intento de "hacerme conocer el amor", se esforzaron creando mi perfil. Nada era de mi interés, deslizaba a la izquierda buscando algo de una noche como he hecho siempre.

La imagen de una hermosa chica de pelo negro y sonrisa seductora llamó mi atención, "Yuna". Le mandé un simple "Hola" que contestó al instante. Estuvimos hasta tarde hablando, es una mujer muy agradable la verdad, quedamos de vernos en el fin de semana.

Mañana es la tan esperada fiesta, veremos si la luna me trae algo interesante, o alguien.

Alinearme en tus estrellas - JenLisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora