ᚒ𝙿𝚛ó𝚕𝚘𝚐𝚘ᚓ

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NARRA OMNIPRESENTE

Las flores brotaban, el viento resoplaba, un bello atardecer se asomaba por las colinas del sur. El camino era silencioso, los pasos era leves en su caminar arrastrando su guadaña por el cálido pasto que entre sus huesudos dedos sentían.

Caminado se encontraba una figura femenina de tez blaca como la nieve, sus cuencas color carbón, vestía de una larga túnica negra cual estaba atada con cuerdas color café, una estaba entre su cintura y otra en su cuello que tenia una clabera de adorno junto con una capucha grande cuál tenía puesta.

Su mirada pérdida agotada, mostrando una expresión neutral a su alrededor su andar era delicado, había tenido una gran jordana de trabajo ese mismo día.

Unos momentos de su andar llegando a un roble de cerezo que se ubicaba en una colina media, camino hasta el roble de cerezo para dejarse recostar en este su espalda soltando un suspiro cansado y sin humor. Tal roble no se disolvió en polvo este fue creado por una mujer creadora de vida, era un regalo de hace ya varios largos años para la de tez blanca quién se encontraba tranquilamente recostada en este cerrando sus cuencas.

-Te vez muy agobiada amiga mía...tan agotador ha sido tu labor hoy?...  -Una voz dulce de una dama había resonado del otro lado del tronco del roble de cerezo-.

-Razón no te ha de faltar querida, este día ha sido muy estresante -Le respondió una voz cansada a la dulce voz que antes le había hablado- -inhalo ondo para sentir relajación en sus inexistentes pulmones-.

-Ya veo, has venido al roble de hace tantos años para descansar un poco no es así- -Dirigió su mirada al atardecer cuál estaba presente siento una suave rayo de calidez en su piel-.

-Tu mejor que nadie lo sabe...sabes?..aveces odio mi agobiante trabajo, por que yo debo escargarme de tantos difuntos? Porque soy tan odiada solo por cumplir mi deber cuál detesto... -Soltó con frustración, en verdad odiaba su "vida" tener que ser encargada de tantas muertes del mundo humano e inhumano se le hacía tan injusto para ella y su hermano menor-.

-Se que como te debes de sentir, pero podemos cambiar los roles que nos fuero asignados y lo sabes Reaper, solo tenemos que seguir nuestro deber en este mundo- -Comprendía perfectamente las palabras de amiga de años, pero no podían hacer más-.

-Ahora que estamos en este tema, quería darte algo que te ayudará con el desahogo de tus penas, suena miy trillado pero ten este diario talvez te ayude- -Le otorgó a su contraria el diario con la fé en su corazón de que le ayude a su amiga, odiaba que ella estuviera asi y le quería ayudar-.

-Un diario? Enserio crees que ayude el escribir?- -Se cuestionaba bastante el escribir sus pensamientos e sentimientos en un cuaderno- -Siento que no servirá de mucho Life, lo veo como algo absurdo-.

-Hey! No seas pesimista de seguro te ayudará, se que es muy cliché pero no ahí nada que perder, porfavor, por mi siiii???- -Se levantaba para dirigirse hacía la de tez blanca oara hacerle ojos de cachorro desamparado-.

-Trataba de mirar a otro lado, maldecía por dentro a la de vestido verde, sabía cuál es su punto débil no le quedo más de otra aceptar- -BIEN! Escribiré en el diario quita esa cara yaaa!!

-Jeje se que no resistirías~- -Sonreía victoriosa, había sido astuta en usar la debilidad de su amiga-.

Las dos amigas se habían despedido con abrazo para cada una volver a su hogar tan deciado, una feliz por haber convencido a su amiga de probar el método que le recomendo, mientras tanto otra acostadandose en su suave cama con muchas ganas de dormir un poco.

Reaper antes de irse a dormir se quedo pensando que talvez escribir un poco no le hará mal, pero estaba muy cansada como para escrbir en ese momento diciendo a que mañana empezaría a escribir, cerrando sus cuencas para conciliar el tan anhelado descanso ya que mañana estaría denuevo en muuucho trabajo.

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X: bueno me hubiera gustado que fuera más extenso pero ahí voy.

X: espero que les haya gustado! <3

●♡ℰ𝓁 𝒟𝒾𝒶𝓇𝒾ℴ 𝒹ℯ 𝓁𝒶 𝒫𝒶𝓇𝒸𝒶♡●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora