Este venerable de verdad no abandonó a mi familiar

29- Estoy aqui

Dentro de la pagoda había otro mundo completamente nuevo.

Feng Ci abrió los ojos. Lo primero que vio fue el bosque sin límites de una serena montaña nevada. Sobre su cabeza estaba el denso dosel de cedros. Debajo de sus pies había nieve blanda acumulada. El aire que respiraba era el aire fresco y helado después de una tormenta de nieve.

Efectivamente, el interior de esta pagoda era un reino secreto existente de forma independiente que alguien había creado.

Feng Ci se giró para hablar con la persona detrás de él:

-Xiao—

Su voz se detuvo espontáneamente cuando comenzó.

Pei QianYue no estaba a su lado.

Justo ahora, claramente habían entrado juntos en la pagoda. Llegó a este bosque, pero Pei QianYue desapareció sin dejar rastro.

Feng Ci cerró los ojos y trató de extender sus sentidos espirituales para explorar; sin embargo, no pudo hacer lo que deseaba.

Su poder espiritual se había ido.

Feng Ci se miró las manos y frunció el ceño ligeramente.

Reinos secretos. Tan pronto como se crean, tienen sus propias "reglas" individuales. No importa qué tan alto sea tu cultivo, siempre que entres, estás limitado por las "reglas" internas.

Dispersando a las personas que ingresan juntas al reino, limitando los poderes espirituales, dejándote solo para enfrentar los peligros. Estas eran tácticas comunes utilizadas en muchos reinos secretos.

Feng Ci inconscientemente miró su mano derecha.

Por una extraña coincidencia, esta vez Pei QianYue había logrado adivinar con precisión que este reino secreto podría separarlos a los dos y le dio a Feng Ci un elemento para mantener el contacto.

El objeto mágico aún no se ha activado. Actualmente, la mano derecha de Feng Ci estaba desnuda; no se podía ver nada.

Este objeto mágico, sin embargo, no estaba limitado por el área o la energía espiritual. Solo necesitaba tocarlo brevemente y esta cuerda roja se conectaría con Pei QianYue. Independientemente de lo lejos que estén separados, podrían sentir la ubicación del otro.

Incluso dentro de un reino secreto, no se vio afectado.

-Oh Xiao Hei, tienes el corazón de Sima Zhao...

Feng Ci suspiró ambiguamente y bajó la mano. No planeaba contactar a Pei QianYue tan rápido.

De repente, hubo una ráfaga de viento junto a su oído.

Feng Ci ágil se volvió hacia un lado. Una hoja larga cayó desde arriba y aterrizó cerca de él. Con un boom, se estrelló contra el suelo nevado.

El recién llegado tenía 9 metros de altura: alto, grande y robusto. Llevaba túnicas de monje que estaban hechas jirones y de un amarillo desteñido. Las cicatrices en la parte superior de su cabeza eran de color rojo brillante.

Levantó la cabeza, revelando un rostro retorcido, siniestro y mal definido.

Feng Ci:

-... Joder.

Ese rostro era de un blanco ceniciento. Su tez parecía estar cubierta por una capa de gasa blanca, difícil de ver con claridad. Sin pupilas, miró directamente a Feng Ci con un par de ojos vacíos.

Al ver esta cara a una distancia tan cercana, y sin ninguna preparación, Feng Ci se sorprendió. Sin embargo, el recién llegado no le dio tiempo a reaccionar y sacó esa enorme espada del suelo.