【EL PRIMER CAZADOR】

Capítulo 92: Episodio 92 - La luna de Seúl, Parte III

Capítulo 32. La Luna de Seúl, Parte III

Traductor: Khan

Redactor: ROJO

------

Era lo suficientemente tarde para llamarlo amanecer. La gente se acercó al coronel Jang So-gook, que esperaba a alguien con los ojos brillantes, aunque era hora de que todos se durmieran. Pero no eran ellos los que estaba esperando.

"Coronel Jang So-gook, está bajo arresto por rebelión".

Fueron los soldados los que acudieron al coronel Jang y le mostraron un espíritu asesino. Sin embargo, no resistió frente a ellos, pero no porque tuviera miedo de los soldados.

"... Teniente coronel Yoo Dae-hyun, eres un traidor".

El hecho de que fuera el teniente coronel Yoo, no nadie más, quien viniera a arrestarlo, fue lo que dejó inmóvil al coronel Jang.

"Estás con Kim Tae-hoon..."

El coronel Jang conocía el papel que había desempeñado el teniente coronel Yoo como puente móvil entre Mac Guild y el Comando de Defensa de la Capital. Podía ver fácilmente que el teniente coronel Yoo los había traicionado. En otras palabras, estaba apegado a Kim Tae-hoon.

"Has hablado mucho de un hombre que intentó vender el país a Japón", comentó el teniente coronel Yoo sin piedad.

No había ninguna razón para ser misericordioso. Su oponente era el que quería vender el país y perseguir sus propios intereses, y de ahora en adelante sería castigado por ello. Sería el teniente coronel Yoo quien llevaría a cabo el castigo.

"El mayor general Lee Ki-soo y el mayor Oh Se-bum están muertos, y el coronel Jang So-gook será castigado como advertencia para los demás".

Esa era la misión que le había dado Kim Tae-hoon.

'No, debe ser castigado como una advertencia para los demás. El caos se reducirá a medida que sea tratado con crueldad.

Kim Tae-hoon le dio al teniente coronel Yoo la autoridad después de la muerte de Lee Ki-soo: encontrar a los traidores y castigarlos. Kim Tae-hoon, a quien se le confió la autoridad total del Comando de Defensa de la Capital, le dio el derecho al Teniente Coronel Yoo y, de hecho, era como Grim Reaper.

"Sáquenlo".

Para el teniente coronel Yoo, Grim Reaper no era un hombre guapo con un sombrero negro y un ojo húmedo, sino un hombre que podía quitarle la vida a alguien sin dudarlo.

"Si se resiste, mátalo".

Ante esa orden aterradora, el coronel Jang fue arrastrado y vio el cielo. La luna de Seúl era tan brillante como el sol.

-----

Los fuegos artificiales en el cielo cerca de la Torre Namsan despertaron a los que viven cerca de Seúl de su merecido sueño.

"Mamá, ¿qué es eso?" Incluso los niños se frotaron los ojos y se despertaron.

"¿Son fuegos artificiales, eh?"

Ante las palabras de un niño, una mujer miró hacia el cielo con su hija en brazos. Sus rostros estaban demacrados, sus ojos oscuros. Esa era la realidad de Seúl.

La tierra de Seúl, que tenía la densidad de población más alta de Corea, no tenía espacio para satisfacer a los sobrevivientes. La comida se había acabado por mucho tiempo, y no había nada bueno para comer, solo un bulto de calorías que podía llenar el estómago. A veces llenaban las calorías con aceite de cocina. Pero lo peor era que no tenían ninguna expectativa para el futuro.