En un valle sin vida donde avanzando hacia el inmenso vacio estaba un ser de inmenso tamaño oculto por la oscuridad, mientras frente suyo estaba una joven chica de cabello negro, de ojos dorados y cuernos rojos, un vestido negro con guantes rojos y botas metálicas negras con medias negras.
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--Que quieres Ophis. Dijo el ser entre las sombras.
--Es hora que cumplas tu palabra de ayudarme, después de haber cumplido la mía de mantener seguras a tus hermanas. Dijo la ahora identificada Ophis que estaba viendo hacia los ojso que se abrieron entre la oscuridad.
Eran ojos rojos tan rojos como la sangre que reflejaban poder mas aya del entendimiento sobrenatural, donde Ophis verlos directamente le causaba una incomodidad ya que sabia por experiencia misma que este ser no era alguien al que molestar.
Menos cuando alguien se mete con las dos únicas personas o mejor dicho las unicas dos jóvenes que son importantes para el.
De ser dañadas seria el fin de este ser ya que serian borrados de las existencia misma, tal como lo comprobó ella cuando este casi la extermina de no ser que pudo expulsar su alma lejos para recuperarse, tal como ahora.
--Veo tu nueva apariencia y no me impresiona pero veo que has aprendido con quien estas hablando. Dijo la voz entre las sombras donde comenzó a escucharse el sonido de pasos que sonaban fuertes y pesados, donde Ophis rápido floto hacia el cielo donde se quedo en espera de su ahora aliado.
Ophis oyó el sonido que la hizo estremecer y por inercia preparar un escudo mágico para protegerse donde se revelo el causante de dicho rugido.
De la oscuridad lo primero que vio Ophis fue una pata saliendo de la oscuridad aunque Ophis afirmaba que parecía una mano de color negra y gris, seguido salio un hozico largo con colmillos que parecian tener sangre, de ojos rojos orejas puntiagudas negras y el resto gris, avanzando estaba su cuerpo de pelaje gris azulado hasta el final donde era negro con gris y lo que Ophis afirmaba convertia a este ser en un nivel superior al suyo solo comparable con cierta quimera.
Hay al final del cuerpo de este ser estaban diez largas eh inmensas colas de pelaje gris con rojo terminando las puntas de color gris que se ondeaban en el aire de manera perezosa.
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