...¿Qué...? ¿Qué acaba de pasar? ¿Dónde está? ¿Cómo llegó ahí? ¿Y sus amigos?... ¿Y Conter?
Se encuentra demasiado confundido, demasiado abrumado. Todavía no termina de comprender los eventos anteriores, ¿Dónde está Revil? ¿Dónde están todos los demás guerreros?
Sus sentidos están alterados, su corazón late muy rápido y no se siente respirar. Todo está muy lejos, muy borroso, se siente como si estuviera bajo el agua. No le gusta, no le gusta para nada.
Trata de controlar su respiración una vez que comienza a sentirse mareado, desmayarse significaría quedar a merced de quien sea que esté allí, y necesita saber qué es lo que está pasando a su alrededor. Con cada inhalación comienza a recuperar la visión, empieza a estar consciente.
Su cuerpo tiembla y una ola de cansancio lo ataca, pero termina por entender a qué se debe todo este malestar. Y oh Dios... Por favor que esto no sea real...
Está rodeado de cuerpos quemados, calcinados, totalmente irreconocibles. Solo logra visualizar a 6 de sus compañeros con vida, que revisan aquellos cadáveres con esperanza de encontrar algún signo de vida.
Alterado, busca con la mirada a su familia. Los había perdido de vista durante la batalla y teme que algo les haya pasado. Pero eso era imposible, ¿no? sus amigos eran los mejores guerreros del pueblo, habían pasado todos estos últimos días armándose para esto, preparándose física y mentalmente. Sus amigos no están muertos, ¿verdad?
Corre y busca por todo el lugar, ignorando el olor a podrido y tratando de no pisar ninguno de los cuerpos de sus compañeros caídos. Niega cada pensamiento negativo, sus amigos no están muertos.
...Pero a la hora, comienza a resignarse y lágrimas se forman en sus ojos.
Toda esperanza que tenía se esfuma cuando ve a lo lejos el característico casco de su líder, Farfadox, cubierto de sangre y al lado del cuerpo de este, que ahora no es más que huesos y carne quemada.
Esto... Esto debe ser un sueño... no, una horrible pesadilla creada por Revil. Si, seguramente es eso, sus amigos están vivos y siguen armándose para la batalla final...
Pero... Incluso con eso en mente, no puede evitar acercarse y arrodillarse ante el objeto, que carga con un alto valor emocional. Tampoco retiene las lágrimas ni los sollozos por mucho tiempo.
Los temblores en su cuerpo aumentan ante la ansiedad y la incertidumbre, ¿acaso los demás también sufrieron el mismo destino que Farfa? ¿Era lo único que quedaba del equipo Tryhard? ¿Dónde está Conter?
Se detiene en seco. Conter tiene que estar vivo, apenas habían terminado de aclarar las cosas entre ellos, apenas se habían hecho una pareja oficial. Conter no lo dejaría solo, ¿cierto?
Sin un segundo de retraso, guarda con manos temblorosas el casco de Farfa y sale corriendo a donde se encuentran los demás. Lo más probable es que el conejo esté ayudando a los sobrevivientes, siempre tan bueno y leal.
Ve a lo lejos a sus compañeros reunidos, una sonrisa forzada aparece en su rostro mientras intenta convencerse de lo imposible.
- ¡CONTEEER! ¡PELOTUDO DE MIERDA, YA SÉ QUE ESTÁS ACÁ!
Su grito llama la atención de los demás, quienes se le quedan mirando de manera extraña. Pero eso no le importa, ahora solo quiere ver a su novio sano y salvo.
Mira el lugar, sin encontrar rastro alguno de su molesto compañero de casa. Irritado, dirige su mirada al grupo.
- ...Che, ¿lo vieron al chupa pijas de Conter?...