-Que promesa...?? ¡¡¡¿QUE PROMESA??!!- se levanta de la cama y comienza a caminar de un lado a otro golpeándose la cabeza- Tendría que hablar con ella pero... creo que me tomara de loco si le digo que la vi en forma de un ángel gritándome que cumpla una promesa, y por que mierda me vi a mi de esa forma por que ella murió?!! yoo....-agarra su celular y sale corriendo del cuarto, en el trascurso de pone su capucha para que no lo reconocieran junto con unos lente, saliendo del hotel- Taxi!!!, , lléveme a Osmos lo mas rápido posible.
5 minutos despues:
-ya llegamos a Osmos señor- se detiene en la entrada.
-Gracias tome, -sale del auto- quédese con el cambio
-Pero... son 100 dólares genial hoy día se come-el taxista se va feliz
Yasuo entra bruscamente a Osmos, lo cual se da cuenta lo estúpido que fue, y trato de disimular lo cual no sirvió de nada ya que todos ya lo veían como un loco,
-Ammm.. hola señorita este... esta la señorita Riven?- lo dice algo avergonzado a la secretaria
-la señorita Riven, por el momento no se encuentra, si es tan urgente, le puedo dar la dirección
- SI PORFAVOR!
La señorita está algo nerviosa al darle la dirección de su jefa a alguien que claramente no se veía bien, pero dudosa le dio la dirección, Yasuo volvió a tomar un taxi y se dirigió a la casa de Riven, pero el no sabía que hacer o que decir y solo se quedo en frente de la casa pensando
Con Riven:
-hermanita... por casualidad ¿tienes hambre? te hice paquetes tus favoritos-entrando al cuarto de Riven
ya hacia echada de forma fetal en su cama aun asustada por su sueño, sus ojos seguían rojos y se notaba el cansancio en la cara de esa bella peliblanca, estaba tan sumergida en sus pensamientos que ni siquiera noto la presencia de Draven.
-¿Riven?, ¿estas bien hermanita?- le soba suavemente la espalda en forma de consuelo
-¿Por que?...¿por que me siento así? siento mucha culpa, y esa culpa me consume, me siento sofocada por estas emociones, surgieron de la nada! estoy muy cansada-comienzan a caer lagrimas que suave mente recorren sus cachetes
-hermana tranquila, de seguro fue muy vivido el sueño, sigues asustada, todo estará bien-le da un fuerte abrazo a su hermana en el cual Riven corresponde ahogando sus penas- gracias hermano, ya me siento mejor, creo que me asuste mucho, pero... su rostro cuando vi su rostro vi ira junto con dolor y amor, estaba asustada si pero, me sentía querida y muy protegida, pero luego me vi y... y... por alguna razón sentí, sus sentimientos, me duele mucho
-Pero ya paso, ¿verdad hermana?, ahora estas conmigo, y tu sabes que nunca te dejare sola-
-Jajajaja, se que siempre contare con contigo Draven- le da un ultimo abrazo, para luego levantarse de la cama, inconscientemente se asomo por la ventana y ve al chico pelinegro parado al frente de su casa- Yasuo...
con Yasuo:
-bien ya estoy acá, ¿Qué hago?, ayy... me duele la cabeza de tan solo pensar en esto, me da mucha ansiedad- se soba la cara-(¿ por qué hago esto?, ¿con que necesitad?, claro, una promesa, la promesa de un ángel)-
-YASUO!!!!! ¿QUE HACES AHI? VEN ENTRA! -grito Riven desde su puerta
Yasuo la mira con una sonrisa, y sus preocupaciones y ansiedades desaparecieron, fue hasta que entró en esa hermosa casa donde Riven amablemente lo invito a pasar-tienes una hermosa casa Riven-