Un pequeño error a veces conlleva grandes consecuencias y eso Lee Felix lo aprendió de la peor forma, según él.
Lee Felix un lindo omega de tan solo 22 años de edad, rubio, pecoso y con los ojos más hermosos que pudieras imaginar, estos irradiaban un hermoso color verde que jamás se había visto en otros ojos, era un omega único.
El miedo más grande de cualquier omega siempre será el despertar con una mordida en su cuello después de un celo y que está sea de alguien completamente ajeno al mismo; y es que enlazarse con alguien que no conoces solo por unas copas de más en tu sistema o un celo adelantado, es de lo peor que les pueda pasar.
Y para Lee Felix su pesadilla se estaba haciendo realidad.
Ahí se encontraba él, escapo de Australia por miedo a su padre y ahora mismo se encontraba vagando por las calles de Corea del Sur, donde al llevar solo unos días en el lugar tenía curiosidad de conocerlo, y así fue.
10:23 pm marca el reloj en su celular, Felix miraba las calles de Seoul completamente aburrido y es que a pesar de llevar tan solo unos días ahí, ya había recorrido la ciudad casi por completo y ahora no encontraba que hacer, además de que el dinero que llevaba poco a poco iba desapareciendo.
"Ey! Escuchaste que en los barrios altos abrieron una nueva discoteca?", por fin algo interesante pensó Felix, " Si lo escuché pero ni de chiste podemos entrar ahí, solo la gente adinerada puede acceder", bueno, las esperanzas de Felix bajaron rápido; no es que él sea alguien con muy poco dinero pero tampoco tenía mucho dinero y menos en esos instantes donde ya se había gastado una buena cantidad al estar turisteando.
El pecoso dejó de escuchar la conversación ajena y siguió su camino "bueno es hora de regresar al departamento " pensó, dio media vuelta para cambiar su dirección y ahora caminar hacia el que era su nuevo hogar.
"¿Iremos a la nueva discoteca?", escucho no muy lejos, porque diablos todos hablan de la nueva discoteca, miro hacia su costado en donde había escuchado aquello, pudo observar dos chicos conversando, "No pierdo nada en preguntarles" pensó, Felix se dirigió a aquellos chicos con las intenciones de preguntar sobre esa nueva discoteca.
— Hola disculpen las molestias pero no pude evitar escuchar que hablaban sobre la nueva discoteca y quería saber donde es que quedaba ubicada—.
— Oh lindo, ¿te gustaría acompañarnos? —.
Y no sabe como pasó pero en esos instantes se encontraba entrando a la nueva discoteca con los dos chicos que literalmente acaba de conocer hace tan solo unos minutos.
—Fue un gusto haberte conocido amigo — dijo uno de ellos. — Pero creo que aquí tendremos que separarnos, alguien nos está esperando—.
Felix sin chistar le agradeció a los chicos para después despedirse y adentrarse a aquel nuevo lugar el cual estaba algo obscuro pero gracias a las luces neones que se desprendían de la pista de baile pudo caminar sin tropezarse con algo o alguien.
El lugar estaba lleno de diferentes aromas tanto por parte de alfas como también por parte de omegas, pero había algo peculiar, un aroma peculiar a su olfato"Pinos, lluvia y vino" pensó, esos tres aromas destacaban en sus fosas nasales trato de ignorarlo pero su lobo se sentía inquieto ante aquello, era tan peculiar que a pesar de estar rodeado de tantos aromas, esos tres destacaban para el.
Dío paso largo e intentó seguir ignorándolo, se dirigió a la barra donde servían bebidas, esa noche Felix se sentía extraño por alguna razón, tenía una nueva sensación que no sabía describir ni tampoco sabía identificar si era buena o mala pero lo que si sabía es que esa noche algo cambiaría, algo en él se lo decía.
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Middle of the Night
Fanfic𝐄ʟ ʜᴇʀᴍᴏ𝐬ᴏ ᴏᴍᴇɢᴀ 𝐬ᴇ ᴀ𝐬ᴜ𝐬ᴛᴏ ᴅᴇᴍᴀ𝐬ɪᴀᴅᴏ ᴀʟ ᴅᴇ𝐬ᴘᴇʀᴛᴀʀ ᴇɴ ᴜɴᴀ ʜᴀʙɪᴛᴀᴄɪᴏ́ɴ ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀᴍᴇɴᴛᴇ ᴀᴊᴇɴᴀ ʏ ᴄᴏɴ ᴜɴᴀ ɢʀᴀɴ ᴍᴏʀᴅɪᴅᴀ ᴇɴ 𝐬ᴜ ᴄᴜᴇʟʟᴏ "𝐎ʜ 𝐅ᴇʟɪ𝐱 ᴏ̨ᴜᴇ ᴅɪᴀʙʟᴏ𝐬 ʜɪᴄɪ𝐬ᴛᴇ" ...