capitulo 1

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Amber Jame.

Apretó su nalga con deseo mientras deslizaba su tibia lengua por su labio inferior, ella suspiraba de deseo anhelando ser tomada por él, en una forma salvaje y sin piedad. Él la agarro por la cintura lanzándola a la cama...

Escucho la puerta abrirse de un golpe, levanto la vista y rápidamente cierro el libro que estaba leyendo.

-¡¡Amber!!- grita mi queridísima hermanita y entra como Pedro por su casa a mi habitación, haciendo escándalo sin importar si uno está durmiendo o no.

-cuantas veces te he dicho que toques antes de entrar, ¿acaso no conoces lo que es la privacidad?- pregunto un poco exaltada por el susto que me lleve, pensando que eran mis padres. Por qué si fueran ellos ya me hubiesen matado por leer mis libros eróticos que compre a escondidas.

Me mira apenada baja la mirada mientras sus rizados cabellos ocultan su cara de una manera desordenada haciendo contraste con su piel blanca y bronceada.

- es que te quería decir algo... interesante y no pude esperar a decirte-dice mientras levanta la mirada para verme directo. Sus ojos toman un brillo de diversión y curiosidad.

-¿y qué es eso tan magnífico que descubriste, según tú para interrumpir mi momento de relajación?- levanto una ceja interrogante.

Su capacidad de fastidiar no tiene límites siempre es lo mismo. Ella me ignora, camina hacia mi cama para lanzarse de espalda con los brazos estirados, mientras contiene una sonrisa pensando que no me he dado cuenta.

-Ámbar-siseo molesto. Le doy un golpe con mi pie en su hombro. Suelta una risita.

- está bien, está bien- hace una pausa para seguir riéndose como si le hubieran contado el mejor chiste del mundo- mira vi en la televisión sobre una web, ósea es una página para buscar pareja, tiene para hacerte un perfil, mandar mensajes, fotos, audios y video- termina con una sonrisa bien grande en los labios como si hubiese dicho la cosa más grandiosa del mundo, yo solo ruedo los ojos.

Se estarán preguntando por la televisión si nosotras no tenemos de eso, bueno la cuestión es que en nuestras habitaciones no nos la permiten, pero en la sala de estar hay uno muy chiquito que únicamente sirve para ver noticias.

" Que patético"

-Aja y eso que tiene de importante- mascullo sin saber, que es lo interesante del tema.

Voltea la cara como el exorcista, quedando de una forma torcida, rueda los ojos mirándome raro y frunce el ceño.

- en serio ponte a pensar- dice de la manera más obvia, cambia el ceño fruncido por una sonrisa pícara y traviesa, que sé, no traerá nada bueno-te lo digo con el sentido que abramos una página de esa cada una, para buscar nuestra pareja ideal y no solamente eso. Sí no también para divertirnos así no estar deprimidas por este encierro- hace un puchero.

Y ahora es mi momento de yo soltar una carcajada por la estupidez que dijo, ella entre sierra los ojos apretando los labios. Es que nada más a mi hermana se le ocurre eso sabiendo, que no lo tenemos permitido.

" Dios, gracias por darme una hermana tan chistosa, que no aria sin ella"

Sigo riendo sin poder contenerme, asta lágrimas salen de mis ojos, pongo una mano en mi estómago apretando por lo privada que estoy, Ámbar me lanza una almohada que me da de lleno en la cara, auch, eso dolió, haciendo que mi libro caiga al suelo, se escucha un golpe seco. Dejo de reír La miro furiosa y le devuelvo el almohadazo, pero fallo en el intento. Rápidamente se sienta.

- es en serio Amber... No estoy jugando- gruñe mientras cruza sus brazos haciendo que sus senos se vean más grandes de lo que los tiene.

- y como pretendes tú que abramos algo así, si ni siquiera tenemos computadora y mucho menos un teléfono, ¿me lo puedes explicar?- la miro esperando una respuesta, pero no la dejo hablar- de todas maneras nuestros padres no nos dejarían.

Infringiendo Las Reglas +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora